- Y les diré todo lo que sé al respecto sobre la persona que me dio toda la información acerca de estos niños, cuando terminen de llevarlos a las naves de rescate - con eso el hombre malo se quedó dormido y la mujer jedi le colocó unas cadenas plateadas en sus muñecas y lo llevaron a no sé dónde. 

- Todo acabó pequeña Soka - se me hizo raro el nombre que me puso, pero debo decir que me gustaba. 

- ¿Y ahora adónde iremos? - le pregunté curiosa, quería ver a mis padres....pero tenía la sensación de que Filij no sería el lugar adonde nos dirigíamos. 

- Ahora que rescatamos a la mayoría de los niños y jóvenes secuestrados por el contrabandista - no sabía qué era un contrabandista, pero algo me decía que se refería al hombre malo - los vamos a llevar al templo jedi en Couruscant - levanté una pequeña ceja, pero presentía que lo que me estaba diciendo era verdad - entiendo que no estés segura de mí ni de lo que te estoy diciendo....después de todo, el hombre que te llevó hasta acá, mintió a tus padres y a su gobernador para secuestrarte; pero te prometo que ninguno de nosotros les vamos a hacer daño ni a ti ni a tus compañeros - volvió a ofrecerme su mano, pero esta vez, decidí tomarla por todo lo que nos ha ayudado en este día. 

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Horas después, estábamos viajando todavía dentro de la nave de los jedi, pero para mí y para muchos de los niños, era toda una nueva aventura, porque jamás en la vida había visto el espacio; mi papá me había enseñado las estrellas desde nuestra casa hace tiempo, pero nunca imaginé que fuera tan grande, ni siquiera me había dicho que existían estos pasajes de color azul y negro que nos llevarían a nuestro destino. 

- ¿Te gusta la vista del espacio, pequeña? - la mujer jedi me llamó la atención y yo volteé sonriendo y asentí con la cabeza emocionada. 

- Sí, mucho, mi papi me había mostrado varias veces las estrellas en el jardín de nuestra casa, pero no me dijo que el espacio era gigante y que tenía muchas, pero muchas estrellas - le comenté como si fuera lo más normal de la vida y escuché una ligera risa de parte de la maestra jedi y volví a verla unos momentos para ver su cara y lo que vi fue una sonrisa sincera de su parte y yo le sonreí como nunca. Horas después llegamos al planeta que le llamaban Couruscant, gracias al maestro Plo, me dijo hace rato su nombre, pude llamar a mis padres y logre decirles que estaba bien gracias a la ayuda de los maestros jedi, ellos me dijeron que me querían y aunque lloramos un poco sabía que no podría verlos dentro de un buen tiempo y nos despedimos hasta que pudiera tener la oportunidad de regresar; cuando pasábamos por el planeta, me sorprendía junto con el resto de los niños ver que Couruscant era toda una ciudad, pero al mismo, la sensación que yo tenía a mi alrededor era muy compleja que me mareaba mucho - maestro Plo - llamé de repente al maestro jedi. 

- ¿Sí pequeña Soka? - me preguntó sin dejar de voltear al frente, porque él estaba manejando la nave. 

- Siento muchas cosas en mi mente - le dije algo preocupada - cuando llegamos aquí, mi mente y mis oídos captaron demasiadas cosas al mismo tiempo, pero no puedo descifrar ninguna y eso me hace sentir mal - luego lo vi desde atrás de su asiento y le pregunté - ¿algo malo me está pasando maestro Plo? - le pregunté asustada, tenía miedo de lo que estaba pasando. 

- Pequeña Soka, lo que estás sintiendo es algo que tú y el resto de tus compañeros serán instruidos por nosotros a lo largo de su vida - vi que apretó un botón y se volteó a vernos a todos los niños que estábamos en nuestros asientos - lo que ustedes están sintiendo ahora, es lo que nosotros conocemos como la Fuerza - ¿la Fuerza? Sonaba extraño para ser algo tan grande, pero debo admitir que se siente un impulso muy fuerte a lo que yo haya experimentado en mis años de vida. 

- ¿Qué es la Fuerza, maestro Plo? - Shaomi, una niña zaigueriana habló por primera vez y se dirigió igual de confundida que yo al maestro Plo. 

- Para ustedes pequeños, el significado y la forma de entender lo que es la Fuerza es muy complejo, necesitan tiempo para estudiar, comprender y relacionar todo aquél conocimiento que se sabe sobre la Fuerza, hay muchas cosas que nosotros los jedi sabemos por ser portadores de la misma.....pero de la misma manera, hay cosas y muchas sobre todo, que no conocemos, eso lo irán descubriendo conforme crezcan; por lo pronto, se les asignará una habitación por grupos de veinte niños con sus respectivas cosas, lamentablemente para ustedes, no podrán tener más que dos pertenencias, ya lo entenderán cuando sean más grandes - nos fue explicando poco a poco lo que íbamos a hacer cuando nos instaláramos dentro del Templo, no sé ¿por qué? Pero tengo la sensación de que cosas grandes y extraordinarias sucederán en mi estancia aquí. 

- Plo, ya estamos cerca de aterrizar - le llamó la otra maestra y el maestro Plo se volvió a colocar en su asiento, estaba nerviosa pero sabía que algo importante saldría de este lugar, no sé qué aventuras tendré a lo largo de mi estancia aquí, pero siento que haré nuevos amigos aquí. La nave aterrizó despacio y los maestros nos ayudaron a quitarnos el cinturón y nos guiaron a un castillo gigante y todos estábamos sorprendidos de lo que estábamos viendo. 

- Maestro Plo - se escuchó la voz de un jedi joven y con barba - me alegra que haya encontrado a los niños secuestrados - el hombre nos vio a todos y sentí que también era un hombre agradable. 

- Maestro Dooku - le respondió el maestro Plo y yo, me acomodé un poco más en la pierna del mismo - también me da gusto que los hayamos encontrado a tiempo, lamentablemente, nuestro hombre logró vender al menos a una cuarta parte de los niños y jóvenes - señaló al hombre malo que estaba llevando la otra jedi. 

- Es una lástima, pero me alegra que hayamos salvado a la mayoría - su sonrisa era algo extraña, pero debo admitir que se veía como una maestro sabio - ah, ¿qué tenemos aquí? - no me había dado cuenta de que me estaba observando y me escondí más detrás de la pierna del maestro Plo - Hola pequeña, ¿cómo te llamas? - se agachó a mi altura para verme a los ojos y sentí pena de verlo directamente. 

- Saluda al maestro Dooku, pequeña - me dijo el maestro Plo y con eso me dio un poco de fuerza y valor para saludar a la nueva persona que entrará en mi vida. 

- Hola maestro Dooku - le dije con voz temerosa y vi que el hombre llamado Dooku me dio su mano y me sonrió con alegría y yo me sentí cómoda al verlo con nosotros - me llamo Ahsoka.

- Debo admitir que esta niña tiene talento y mucho valor - se volvió a levantar y vio al resto de los niños - todos ustedes - le aseguró al resto de mis compañeros - bueno, jóvenes síganme que los voy a llevar a sus respectivas habitaciones - los niños lo fueron siguiendo y yo, iba comenzando a seguirlos, pero de repente vi a otro maestro con uno de los jóvenes que lo iba acompañando.  

- Maestro Plo - llamé al maestro que nos estaba acompañando. 

- ¿Qué sucede pequeña Soka? 

- ¿Quiénes son ellos, maestro? ¿Y por qué están separados de nuestro grupo? - señalé a la pareja que estaba junto a las otras naves. 

- Él es el maestro Obi-Wan Kenobi, Soka, es un caballero jedi dentro de nuestros compartimentos - se arrodilló junto a mí y me continuó explicando - y el pequeño que está a su lado, es su padawan Anakin Skywalker....ese puesto te lo ganarás cuando seas más grande y tendrás la oportunidad de ser elegida por algún maestro o caballero para que tú te conviertas en una caballero jedi. 

Ahsoka y Plo Koon en una nueva familiaWhere stories live. Discover now