27/11/14

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Hoy ha sido el anteultimo día de clases, hemos celebrado nuestra despedida de la primaria con una pequeña celebración en la quinta del Instituto. Hemos bailado, hemos comido, hemos reído, hemos firmado libretas y camisas, parece todo muy divertido, pues así lo fue, me he olvidado todo un momento, pero como digo yo, a mi me dura la felicidad lo que un pedazo de pan entre los pobres. Él estaba allí, le he tomado una fotografía para una amiga, y pues el me ha pedido hablar con mi amiga y se han puesto muy acaramelados. Él me pedía a cada rato mi móvil para hablar con ella, y dolía mucho, pero ya no tanto. No consigo dejar de amarlo, es tan perfecto, tan lindo, es tan él. Hasta ya lo extraño en este momento, pero sé que el no me extraña a mí, siquiera es capaz de hablarme por Whatsapp. Como duele el amor, sí alguien lee esto, te daré un consejo, no te enamores. No he ordenado mi habitación, y el desorden le deja los pelos de punta a mi madre y, lo admito, soy bastante desordenada y a ella le molesta mucho. Reiteradamente me amenaza con llevarme a vivir con mi padre, pero nunca lo hace. Se ha puesto tan nerviosa que ha roto un plato y ha hechado su almuerzo al suelo. Le he preguntado que había pasado y sí quería que la ayude, me ha dicho que prefiere no verme. Luego de mi clase de inglés se le ha pasado, pero me ha dicho que no quiere entrar en mi habitación. Me he ido a entrenar y me han felicitado, me he olvidado de todo por un momento, me he reído como hacía tiempo no lo hacía, me he reído de verdad, mi sonrisa volvió a tener luz, pero fue solo un momento. Reír es lo más bonito de la vida, sinceramente creo que las personas que te pueden sacar una sonrisa en un tiempo de dolor son la que más valen, así que, querida lectora (sí esque alguien me lee) , ríe siempre que puedas, sé feliz, saca a relucir tu hermosa sonrisa. Sin más que decir, me despido.

Dear Diary.Onde histórias criam vida. Descubra agora