Vida Universitaria [Haikyuu]

»Confusión«

Los ocho chicos se miraban los unos a los otros aún sin poder creer lo que estaban mirando frente a ellos.

— ¡Esto debe ser una confusión! ¿Están seguros que están en la Universidad correcta? –se ánimo a hablar Oikawa después de varios minutos de silencio incómodo, mirando expectante a todos esperando a que alguno le respondiera.

— Tal vez yo si me equivoqué. –se rasco el cabello Bokuto sacando su celular para revisar su galería, dónde tenía foto de su ficha de inscripción.

— No, Bro. Estás en la correcta –soltó unas carcajadas Kuroo al ver que por un momento Koutaro había dudado de haber llegado a la universidad que debía ser. Aunque hubiera sido muy gracioso el caso de que hubiera podido llegar a estar en el lugar equivocado.

Para este punto tanto Daichi como Sugawara ya habían salido del trance que aquella situación les había provocado y se miraron con total sorpresa ya que para nada esperaba que sus antigüos rivales ahora serían sus nuevos aliados.

— Diva-Chan no parece contento. –rió Tendou mientras no deja de mover sus dedos analizando a todos los presentes, le parecían muy divertidas su caras de asombro, y susto. En especial la de molestia de Oikawa.

— ¡No me llames así! –le apunto Tooru al amigo de Wakatoshi– ¡Y quita esa extraña sonrisa UshiWaka-Chan! ¡Que no pienso levantar para ti ni una sola pelota! –gruño este con una pequeña vena de molestia que se asomaba en su frente, soltó un suspiro y subió sus gafas tratando de calmarse.

— Ya es un avance que estemos en la misma Universidad, solo es cuestión de tiempo. –respondió Ushijima con una corvatura en sus labios que parecía más bien una mueca extraña— Y deja de llamarme por ese extraño apodo.

Para este punto Oikawa quería tirarse encima de el y matar a Wakatoshi.

— Tranquilo Oikawa. –trataba de decirle Suga con una voz dulce, que lo solía caracterizar, en ese tipo de situaciones el era de gran ayuda. Ya que parecía que había leído sus pensamientos.

— ¡Yo quiero ver cómo son tus levantadas Oikawa-kun! –entro el de ojos dorados en la conversación mientras hacía una pose como estuviera apunto de rematar un balón imaginario– ¡Le daré así! –termino imitando un golpe como si hiciera un remate recto.

Yaku y Daichi miraban con una ceja alzada al ex-capitán de Fukurodani, ante sus movimientos, no les extrañaba para nada.

Mientras que Tendou y Kuroo se reían de la situación poniendo su mano sobre sus estómagos.

El octeto comenzaba a llamar la atención de los demás estudiantes que iban llegando, sobre todo porque eran reconocidos al instante aparte que, estaban haciendo demasiado ruido y llamaban demasiado la atención.

— Deberíamos movernos. Está comenzó a llegar más gente. –esta vez fue la voz del libero la que llamo la atención de los presentes, el castaño claro tenía una leve mueca.

Su voz detuvo a las otras siete personas, sacándolos de sus propios pensamientos para mirar a su alrededor y darse cuenta que era cierto, muchas personas los miraban, quizá si estaban haciendo demasiado escándalo.

— Lo mejor será ir a ver en qué habitaciones nos tocó —sugirió Daichi mientras señalaba el gran edificio de hombres, quería de aproximadamente unos seis pisos de altura, al escuchar la sugengecia del ex-cuervo, todos asintieron con la cabeza y emprendieron camino detrás del moreno

— Por favor que no me toque contigo, por favor que no me toque contigo. –rogaba Oikawa mientras caminaba al lado de Ushijima, que no planeaba hacer ningún comentario. Solamente le dedico una mirada y segundos después la regreso al camino.

Mientras que el castaño color chocolate solo pensaba que su suerte era tan, pero tan mala como para que le tocará Wakatoshi de compañero de habitación.

— Supongo que no quieres que te toque con Ushiwaka. –comenzó a reír Kuroo al ver la reacción que tenía el de lentes

— ¡Claro que no! Sólo eso me faltaría. –gruño el de ojos marrón mientras con su mano derecha, jalaba su maleta, dedicándole una mirada fea al rematador zurdo, que lo estaba ignorando abismalmente ya que se encontraba hablando con Tendou.

Sugawara no pudo evitar soltar unas risas llevando su mano a cubrir sus labios para disimular un poco— Esto será muy interesante, Daichi. –río el de cabellos plateados entrando el edificio junto con los demás chicos.

— Parece que hay una lista donde dice que piso te toco. –hablo el libero una vez más al ver a varias personas tratando de buscarse en unas extensas listas que estaban colgadas en un pizarrón

Ya eran menos las personas, porque en lo que todos ellos estaban hablando afuera, los demas chicos ya habían ingresado a sus habitaciones correspondientes para conocer a sus futuros compañeros, con los que compartirían habitación los próximos años.

— Parece que dice el piso. Y las puertas de las habitaciones contienen los nombres de los alumnos –leyó Tetsurou de la hoja, analizando un poco aquello, notando que todos ellos estaban asignados en el– Sexto piso. Vamos al ascensor.

Todos notaron la hoja que había leído el de cabellos negros con anterioridad y cuando leyeron sus nombres fueron detrás de el para entrar juntos al ascensor, les había tocado a los ocho en el mismo piso, solo restaba ver en que habitación habían sido asignados y eso tenían nerviosos a unos.

Si bien el ascensor era bastante amplio con las maletas el espacio se había reducido considerablemente y estaban un poco apretados allí adentro.

— UshiWaka-Chan, dile a tu amigo que deje de mirarme. –espeto Tooru con una pizca de molestia, ya que bueno, aquel pelirrojo no hacía más que verlo fijamente con una sonrisa sinica y en sus adentros el de gafas sabía que solamente lo hacía para molestarlo, se pegó lo más que pudo a la pared del ascensor cruzándose de brazos cerrando los ojos, tratando de ignorar a aquel par.

— ¿En serio este el Armador que tanto querías que fuera a Shiratorizawa? –pregunto Satori poniendo sus dedos en su barbilla como formulando en su mente, porque Ushijima lo había querido reclutar durante los tres años de Preparatoria.

Antes de que alguno pudiera decir algo más el ascensor se abrió cuando la pantalla marco el número “6”, haciendo que cada quien se preocupara por sacar sus cosas, y acercarse a las primeras puertas que se cruzaron.

Era un largo pasillo con puertas tanto del lado derecho como el izquierdo, y se dedicaron a revisar la primera puerta que estaba a la derecha tanto como la de la izquierda

Ambas contenían una hoja en detalles de colores con una lista de nombres a lo largo, una pequeña tarjeta de bienvenida, y unas llaves colgadas en un listón sobre el manojo de la puerta.

— Que extraño. Si las llaves y la tarjeta de bienvenida aún están en la puerta, es que aun no ha ingresado nadie. –opinó Sawamura, notando aquello aparte de que las demás habitaciones ya no tenian sobre ellas nada de eso, ¿Podría todas ya estaban ocupadas y solo quedaban esas?

Dejo salir un respiro, tomando la lista que estaba pegada en la puerta, que contenía los nombres de los que serían compañeros en esa habitación para darle un vistazo.

Mientras que por su parte Oikawa había corrido para agarrar la lista de la puerta que tenía grabado “602”

Todos se habían acercado a ver las hojas, unos con Daichi y otros con Oikawa para ver qué nombres contenía la lista, y averiguar en que cuarto iban a estar. Más sin embargo todos pegaron un salto, o se sibresaltaron al escuchar el grito de Oikawa— ¡No puede ser! –Chilló el castaño, apretando la lista en sus manos con fuerza.

Oh, oh...
Pensaron todos en ese momento.