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- ¡Oh, claro que no! ¡No me vas a ganar! ¡Soy Manuel Vainstein! ¿Me escuchaste?

Y si, le estaba gritando a mi maleta. No la podía cerrar de tantas cosas que traía adentro.

- ¿Por que no sacas lo que no es necesario? - Ania me miraba desde el marcó de la puerta.

- ¡Adoptada! - llevé una mano a mi pecho - me asustaste.

Me hizo una mueca y se fue. Yo volví hacía mi valija y empecé a saltar sobre está para poder cerrarla. Después de varios intentos pude lograrlo.

Mis papás ya me estaban esperando en el auto y yo fuí corriendo con mis maletas hasta ahí. Mi papá las guardo y empezamos con el viaje.

- Te voy a extrañar Manucho - habló mi mamá.

- Ah no, no vengas con eso - me crucé de brazos - vos me anotaste en esa cárcel porque decías que ver Friends catorce horas al día ya no era saludable.

- Es que no lo es Manuel.

- ¿Y escuchar CNCO en mi cuarto tampoco lo es? La otra vez estaba cantando perfectamente Se Vuelve Loca y Ania me tiró con un zapato.

Mis papás se miraron y negaron al mismo tiempo.

- Es hora de madurar Manuel. Es un nuevo comienzo, un nuevo aire y nuevas personas. La secundaria quedó atrás. - Mi papa me miraba por el espejo.

Suspiré y miré por la ventana. Dos horas después habíamos llegado, me despedí de mis papás y entré al hotel que quedaba a la vuelta de la Universidad.

Entré con ambas valijas en mis manos. Me acerqué a recepción y una señora, muy fea en verdad, me sonrió.

- ¿Vainstein?

- Si. Mi mamá llamó y reservó una habitación por ocho meses.

- Si - dijo mirando su computadora - Bueno, nunca específico si la no la querías compartir con alguien, por lo tanto nos adaptamos al dinero que nos dió. Tu habitación en la 204 y tu compañero no tarda en llegar.

Me entregó la llave y con pasos torpes me acerqué al ascensor. Vi un cártel pegado, pero lo que leí, arruinó todo mi día.

"Fuera de funcionamiento dentro de las 24 horas"

¿Justo hoy? ¿Encerio?

Como pude subi una valija sobre la otra, las agarre con ambas manos y empecé a subir con pasos delicados. Sentí que cada vez el peso era mas ligero, cuándo subi la mirada faltaba una maleta.

- Mierda - susurré pensando que se había caído. Miré hacía abajo pero no se veía nada.

- ¿Buscas algo?

Miré hacía un costado, había un chico extraño, con un piercing en la ceja, pero no se veía como que me iba a robar, al contrario, me sonrió dulcemente y me mostró mi valija.

- Uhh, esa es mi valija. Gracias wachin.

- Hace como cinco minutos la agarré, se veía pesada y te quise ayudar guapo.

- ¿Guapo? - arrugue mi frente - eh, si gracias. Me hubieras avisado igual.

- Si, pero sos muy bonito y me perdí en tus ojos.

- Bueno, esto es raro.

- Soy Valentin, ¿Vos?

- Manuel y esta es mi habitación - le saqué mi valija - gracias, espero no volver a verte y chau.

Entré rápido y le cerré la puerta en la cara. Puse ambas valijas debajo de la cama que se veía desocupado y me tire sobre el colchón. Estoy muy cansado para hacer algo.

Agarré una revista de la mesita de luz de mi compañero.

- ¿Hombres desnudos? - pasé las hojas muy rápido. La señora no me había dicho que era una chica, me había dado a entender que era un chico. - Esperó que sea sexy.

- Oh, no se si soy sexy. ¿Soy sexy?

Bajé la revista y estaba el mismo chico de hace rato.

- ¿Que haces aca?

- Si te gustó esa revista te la podes quedar, tengo muchas.

- ¿Esto es tuyo?

- Soy tu compañero de habitación bombón.¿No te dijo Graciela?

Oh no, esto no puede ser.

- O sea que.. - lo señale.

- Si. Y si, vas a compartir el cuarto con un puto, o como lo digas vos.










Perdón, pero amo el Manuel de esta fic.

Pd: Voy a borrar "Un Plan Para Recuperarte"  Pero se los recompensó con esta fic

Atrevido - WosplikDonde viven las historias. Descúbrelo ahora