Parte 3 "El problema"

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El problema no es que mientas, el problema es que te creo.
El problema no es que juegues, el problema es que es conmigo.
El problema no es quererte, es que tu no sientas lo mismo.



Mark tocó la puerta de la casa de su novio tres veces y hasta la cuarta vez, el padre de Donghyuck salió para saludarlo, Mark escondió los nervios e intentó sonreír para hablar lo más tranquilo posible.

—Buenas noches señor Lee, ¿está Donghyuck en casa? —

—¡Mark! ¿cómo has estado? —

—Muy bien muchas gracias ¿usted? —

—También esperado el día en que aceptes nuestra invitación a cenar, y la respuesta a tu pregunta es que no sé, creo que salió desde la mañana —

—Mi amor ¿quién toca la puerta? —la mamá de Donghyuck apareció. —Mark, hola... — sonrió habitualmente.

—Señora estoy buscando a Donghyuck ¿puedo hablar con él? —

—Dijo algo de aire libre y que necesitaba concentrarse y por eso iría al parque. Eso fue como hace diez minutos... — Mark asintió en comprensión y agradeció después. —Él tiene que estar en casa a las once, le falta media hora — agregó como dato hacia el chico.

No le llevó mucho tiempo a Mark llegar al parque más cercano de la casa de su novio y tampoco encontrarlo en una de las bancas más iluminadas del lugar, con dos o tal vez eran tres de libros a su lado, sin embargo, no leía ninguno, sólo se mantenía observando las portadas de todas las piezas, una colección de cómics quizás. Mark no estaba interesado en los objetos.

Era impresionante, pensaba. Su figura, su mirada, mierda... seguía siendo impresionante.

Donghyuck siempre había sido una persona única y mirarlo sin que se diera cuenta había sido una de sus cosas favoritas en el pasado, no sólo era torpe, además era increíblemente atractivo. Así como era egoísta, extrovertido, celoso, punzante y mal hablado. También había encontrado algo en el menor que le inspiraba querer cuidarlo, protegerlo de todos y de todo. Aún no encontraba las palabras exactas para describirlo pero al principio cuando negaba los sentimientos de atracción pensaba que se trataba de la diferencia de edad y nada más. Estaba muy equivocado.

El pelirrojo había renunciando a leer las reseñas de todos esos libros con una actitud enfadada para concentrarse en mirar sus zapatos y perderse en ellos. La marca del modelo, el color, las partes desgastadas y sucias. Estuvo atrapado en esa telaraña de pensamientos por más o menos dos minutos que Mark contó. En el fondo, sabía que podía ser de aquello el protagonista pero no se sentía especial al respecto.

Dudó en acercarse e interrumpir aquel momento íntimo pero Donghyuck tenía que estar en casa temprano y antes de eso, él debía una explicación que estaba dispuesto a entregar.

Con pasos firmes el mayor se acercó por detrás y colocó con cuidado la palma de sus manos sobre sus ojos, con rapidez para no asustarlo con el contacto se atrevió a hablar.

—Soy yo no te asustes — Donghyuck ya quería a reaccionar para protegerse cuando se calmó al escucharlo. —No quiero que abras los ojos en este momento hasta que me escuches, puedes aceptar? — Mark seguía con sus manos en el mismo lugar.

El castaño dijo que sí.

—Fue una broma que ella hizo de guardar su nombre, somos amigos de clase pero eso es todo. No hay nada entre nosotros. —Mark sintió como el menor comenzó a suspirar usando sus manos como paredes, él iba a apartarlas pero entonces Donghyuck no lo dejó y puso sus manos encima de las suyas para llorar con libertad sin que él pudiera interferir y lo único que vino a su mente fue seguir hablando —Robaste mi celular mientras comía, ¿no confías en mí? de verdad pensaste que no me iba a dar cuenta, honestamente he querido preguntarlo desde la mañana pero ¿encontraste lo que buscabas? — Donghyuck negó con la cabeza pero las lágrimas no disminuyeron. —Ya no llores, por favor, vamos... hablemos — Mark intentó apartar sus manos de nuevo pero el otro no quiso.

Starring Role - markhyuck + hyuckheiWhere stories live. Discover now