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—Trata de sonreír cariño— susurro Daniel al oído de Ari, Daly platicaba animada con el manager del grupo, mientras Mavy no apartaba la vista de su celular, puesto que enviaba mensajes de Texto a Logan— No quedaras hacerme enfadar ¿Verdad?— Amenazo el chico, Ari se encontraba más que incomoda, la simple presencia de Daniel a su lado la hacía sentir mal, Daniel se había convertido en una verdadera pesadilla para ella, pero no quería perjudicar de ninguna ,manera el sueño que junto a sus amigas tanto les había costado cumplir — Ahora regreso — Anuncio la chica poniéndose de pie, o al menos eso intento pues Daniel la tomo del brazo antes de que ella pudiera dar si quiera un paso— ¿Qué quieres? ¿Ahora también me impedirás ir al sanitario?— Susurro molesta la chica

—No claro que no— respondió Daniel— No te tardes amor— la sonrisa cínica del chico le ponía los pelos de punta a Ari, sabía que tenía que aguantar por el bien de la banda aunque su paciencia se estuviera agotando demasiado rápido.

La chica camino sin rumbo fijo, tan solo quería un momento de tranquilidad, lejos de las cámaras y de toda presión.

Camino hacia la parte trasera del Hotel, donde se encontraba la cocina y los cuartos de servicio, tenía claro que eso le podía costar algunos problemas, pero prefería un regaño por parte de Alexander a aguatar a Daniel.

Siguió caminando hasta encontrarse con una puerta que tenía la inscripción de "vestidores" en la parte superior de la misma. Pensó que sería un buen escondite, pues todo el personal se encontraba atareado en la cena y por ende los vestidores debían estar solos. Pero esa teoría se vio afectada cuando justo antes de que ella abriera la puerta esta se abriera por dentro, golpeándola justo en el rostro haciéndola caer al piso.

— Dios mío, disculpa, ¿te encuentras bien?— pregunto la voz de un chico llena de preocupación, Ari levanto el rostro para encontrarse con unos ojos color chocolate que le eran sumamente familiares ¿Pero de dónde? Se preguntaba, en el rostro del chico se formó una mueca con una mezcla de pánico y nerviosismo y en ese momento lo reconoció. Liam, el mesero con el que había hablado en la cena hace algunas semanas atrás. — Diablos, señorita Smith— pronuncio alterado— Se encuentra bien, disculpe soy un tonto no...

—Pensé que ya había quedado claro el tema de hablarme de usted Liam— la chica sonrió tratando de no demostrar el dolor que atormentaba su nariz, para no hacer sentir mal al chico

— ¿Recuerdas mi nombre?— Pregunto el chico claramente sorprendido

—Por qué debía olvidarlo— respondió la chica mientras con dificultad se ponía de pie, cuando Liam noto eso, la tome suavemente del brazo para poder ayudarla

—De verdad perdóname, salí sin fijarme y jamás pensé que hubiera alguien más detrás de la puerta y.... — suspiro nervioso— Perdón

—No tengo nada que perdonarte fue mi culpa por estar aquí— respondió la chica sonriendo cortésmente— Estaba buscando un lugar tranquilo y pensé que este sería un buen lugar, supuse que o abría nadie

—De hecho si no tendría que haber nadie. — Dijo el chico— pero olvide mi móvil y vine por el— respondió— ¿Otra vez esa carita de tristeza?

—Pues...— la chica encogió los hombros— Es una situación difícil, demasiado complicada y....

— ¿Quieres contarme?— pregunto Liam— Bueno, sé que no me conoces, y esta es la segunda vez que nos vemos pero... si quieres confiar en alguien te juro que...

—Algo tienes— la chica lo miro interesada— A pesar de que no te conozco me provocas mucha confianza, no se siento como si te conociera de toda la vida, no entiendo por qué— El chico se quedó sin palabras ante la declaración de su ídola, ¿Qué debía hacer en ese momento?— ¿No interrumpo en tu trabajo?

Dream's FanOù les histoires vivent. Découvrez maintenant