8:17 am

7:05 am suena la alarma. Él lleva unos minutos mirando el techo, la apaga y se dispone a arrancar el día. Ella mira con bronca el celular, no quería levantarse tan temprano pero no tenía opción. Él cierra el grifo de la ducha y pasa unos minutos frente al espejo arreglándose el cabello. Ella bebe lentamente su café y mira Instagram, mientras acaricia la gata que se acuesta en su regazo como todas las mañanas. Él plancha su camisa y elige una corbata, se tenía que vestir bien aquella mañana pues tenía una reunión muy importante. Ella pone la taza en agua, al mediodía seguro la lava. Él repasa sus notas antes de partir. Ella se acomoda la pollera y sacude su blusa, era lo más cómodo que tenía a mano. Él toma su teléfono y su maletín. Ella acaricia una vez más a su gata antes de irse. Él cierra la puerta. Ella cierra la puerta. Él sale a la calle. Ella sale a la calle. Él dobla a la derecha. Ella gira a la izquierda. Él acelera el paso, le gusta llegar temprano. Ella camina tranquila, escuchando música de Carla Bruni con sus auriculares rojos. Él mira su reloj de pulsera, son las 8:17 am. Ella mira su teléfono, son las 8:17 am. Él la choca. Ella lo choca a él. Sus miradas se cruzan. Él lleva los ojos color café. Ella lleva en los suyos los tristes tonos de un día gris. Él sonríe. Ella sonríe. Él se disculpa y le pregunta si se encuentra bien. Ella solo se ríe y no sabe qué responder. Jamás había estado tan bien antes. Tampoco él. Qué suerte les trajo la vida, de mirar la hora al mismo tiempo. De no verse, de chocarse, de conocerse así, por accidente. De que justamente así, sin querer, a las 8:17 am de un día cualquiera, en un lugar cualquiera, naciera una anécdota para contar por el resto de sus vidas. Vidas que comparten juntos, tanto que ya el tiempo se les anidó en las manos. Él aún lleva los ojos color café que solo viven por ella. Ella aún lleva esos tonos de gris pero jamás volvieron a ser tristes sus miradas, sus días ni sus noches. El tiempo los juntó y los eligió, el uno para el otro. Es una historia de amor, de tiempos justos, de él y de ella...