Capítulo 1

859 78 44
                                    

Luego de que el joven de ojos verde esmeralda conociese a su nueva amiga, no pudo evitar sentirse un poco alegre al conocerla, debido a que era muy buena persona y tenía un gran corazón; cosa que al de cabellos verdes le ha encantado porque hay má...

Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.

Luego de que el joven de ojos verde esmeralda conociese a su nueva amiga, no pudo evitar sentirse un poco alegre al conocerla, debido a que era muy buena persona y tenía un gran corazón; cosa que al de cabellos verdes le ha encantado porque hay más personas en el mundo que te querrán por como uno es y no por lo que debe tener. Desde hace unos días Izuku se hizo amigo de Mina Ashido, lo cual es algo que se veía venir porque los dos parecen gemelos.

Izuku le prometió que se encontrarían en el mismo parque cada día de la semana para que puedan jugar entre ellos, mientras que nuestro amigo de ojos esmeralda se encontraba algo nervioso y tambaleando porque es la primera vez que hace un amigo.

—¡Izuku, viniste!—exclamó la niña de cabellos rosados muy alegre.

—H-Hola Mina—A Izuku aún le costaba abrir conversación debido a que solo ha podido hablar con una sola persona, y esa era su propia madre—.Q-Que lindo v-volver a verte.

De repente al joven de cabellos verdes se le vino un leve tono carmín en sus mejillas al seguir hablando en frente de una niña, lo cual aún no se acostumbra debido a su timidez.

—¡Lo mismo digo!—Mina seguía conservando esa alegría tan enérgica que lleva dentro, lo cual es algo común en ella—. ¿Vamos a los columpios?

—C-Claro—respondió el joven de ojos verde esmeralda para dirigirse al columpio junto a Mina, luego la de cabello rosado lo toma de la mano para que se dirijan más rápido a los columpios y así poder jugar entre los dos.

Mientras los dos fueron a jugar a los columpios, se les notaba mucho como se llevaban bien, Izuku no pudo evitar sonreír mientras sentía el leve viento en todo su rostro al como empujaba el columpio, al igual que Mina que también se sintió muy alegre y segura mientras sentía una suave brisa en sus delicados rizos de color rosa. 

Luego de que terminaran de jugar en el columpio, se dirigieron al arenero para jugar entre la arena.

—¡Izuku, ven a jugar conmigo en la arena!—La joven de piel rosa le gritó al de ojos verde esmeralda para que viniese a jugar entre la suave y delicada arena.

—P-Pero no traje mi cubo, ni mi pala para hacer castillos—El de ojos esmeralda estaba algo indeciso—. ¿Como vamos a hacer un castillo de arena? No tenemos palas ni cubos.

—Tengo una idea, confía en mí—El joven de cabellos verdes al ver esa sonrisa notó el sentimiento de confianza y seguridad, luego se acercó a la arena y junto a Mina se sentó, estaba algo sonrojado pero no se notaba mucho—. ¿Alguna vez has hecho un muñeco de nieve?.

—Am.. No—Izuku sintió como su cabeza anduvo en blanco por unos segundos, era la confusión.

—Déjame enseñarte—La de piel rosada lo tomó de la mano y le enseñó como hacer muñecos de arena, lo cual no fue tan difícil—. Solo tienes que tomar un poco de arena y formar una bolita, ¡es fácil!

Izuku tomó en cuenta lo aprendido por Mina, tomó un poco de arena para luego formar una bola de arena y hacerle unos agujeros alrededor de la circunferencia para que formen unos pequeños ojos, luego tomó un par de pequeñas ramas y ponérselas a los lados para que parezcan manos.

—Mira Mina, ¡hice un pequeño gólem de arena!—El de ojos esmeralda se sintió muy alegre por dentro al hacer su «amigo» de arena—. Lo llamaré Olaf, como en la película de Frozen.

—¿A tí también te gusta esa película?—preguntó la de cabello rosa a Izuku.

—Sí, es muy bonita—El de ojos verde esmeralda le respondió a Mina mientras este estaba jugando con su muñeco de arena—. Solo que a veces veo mucho esas películas con mi madre...

Se notó un tono algo decaído por parte del de hebras verdes, cuando le respondió a Mina sintió ese sentimiento de soledad al no tener muchos amigos con quién compartir, con quién jugar, con quién hablar, nada. Se sentía como un ermitaño, pero no fue culpa suya, se sintió así por ser diferente a los demás, al no tener un Quirk.

—... Nunca he compartido con nadie porque soy diferente—El joven de cabellos verdes al contar sobre como se sentía, su rostro empezó a quebrarse ante las lágrimas de tristeza, teniendo en cuenta lo que le pasa en su escuela.

—No llores Izuku, no me gusta ver como sufre mi amigo...—La joven de piel rosa con esa calidez en su corazón abrazó con seguridad y confianza al joven de ojos verdes esmeralda, al como corresponde ese abrazo—... Quiero que sepas que yo siempre te apoyaré, sin importar lo malo que pase.

—¿Me lo prometes Mina?—preguntó el de cabellos verdosos.

—Si.. Lo prometo—La chica de piel rosa le brindó esa tierna sonrisa para que Izuku se sintiese más seguro de sí mismo al notar que su amistad es severamente sincera y honesta—, pero prométeme que seremos amigos hasta el final.

—También te lo prometo Mina—El joven de cabellos verdosos volvió a sonreír y se sintió más seguro de sí mismo al tener a una chica como Mina a su lado.

Al hacer esa promesa Izuku extendió su dedo meñique derecho para que luego Mina hiciese lo mismo, para sellar esa gran promesa que se hicieron el uno al otro, pero esto es solo el comienzo para que cada uno reaccione ante tal sentimiento que llevan guardado desde sus corazones.

«¿Qué pasa cuando la vida te da limones? Haces limonada. Si preparas bien la limonada, será perfecta y no tendrá sabor amargo.—»

Mina Ashido.

Mina Ashido

Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.
Rizos de amorOnde histórias criam vida. Descubra agora