𝘗𝘦𝘳𝘧𝘦𝘤𝘵𝘢𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘐𝘮𝘱𝘦𝘳𝘧𝘦𝘤𝘵𝘰 🐺 (Namseok)

🐺 C u a r e n t a. 🐺

Hay momentos, lugares y personas que pasan por nuestra vida. Muchos de ellos no se vuelven a recordar. Cómo si fuera de esos sueños que vives, y solo lo recuerdas en un breve lapso de tiempo al despertar. En cambio hay otros momentos que nunca se olvidan; el primer beso, una canción, un mal momento y sobre todo ciertas personas, esa persona, que da igual el tiempo que pase, da igual los hechos que transcurran. Esa que recuerdas en un lugar inesperado y que con solo recordarla eres capaz de temblar. Hay sensaciones que el corazón no tiene la habilidad de esconder.

Y tal era el caso de aquel agitado Omega. Quién parecía estar en un pequeño estado de shock, su mirada estaba perdida como tratando de entender la situación. Su pecho subía y bajaba con tal intensidad hasta el punto de ser preocupante para su contrario.

—¿E.. estoy soñan... Soñando?—

—No Humano, los hemos encontrado. Nos han encontrado—

y sin mediar más palabras se dió el cambio dejando a la vista a un Hoseok con su rostro inundado de lágrimas y completamente desnudo. Su estado no era el mejor, pero los sentimientos que le consumían en el momento no lo hacían ver mejor. Su llanto era de alegría, pero aún así lloraba como si hubiese perdido a su ser más querido.

Su alrededor se volvió nulo, ya no importaba lo que sucedía porque ahora lo tenía todo. Había olvidado que era el objetivo de alguien, pero eso ahora había pasado a segundo plano.

Sin vergüenza de estar desnudo se levantó con  las piernas temblorosas mientras caminaba lentamente hacia aquel lobo que no le alejó la mirada en ningún momento. Hoseok con algo de miedo acarició el pelaje de la cabeza de aquel majestuoso Lobo, quien solo se dedicaba a olfatear, cerrar los ojos y disfrutar del suave toque de sus manos.

Y si era él, como la luna, tan solo, tan lleno de imperfecciones pero siempre brillando, trayendo consigo luz a su noche oscura.

—D... Dime ... Dime qué estás aquí Namjoon—  la voz de Hoseok cada vez más salía entre cortada, sin fuerzas. A pesar de estar haciendo todo el intento por tener el control de sus emociones era imposible no sentirse vulnerable al respecto.

—Dime que en cuanto abra los ojos no estaré de nuevo solo— el omega acercó su rostro a aquel alfa sintiendo los aromas embriagantes de cada uno.
—Dime que en cuanto abra los ojos seguirás estando conmigo y que nadie volverá a hacerme daño— el menor continúo con su llanto lastimero mientras acariciaba con brusquedad a aquel lobo cómo si quisiera evitar volver a estar solo.

—Namjoon por...— pero ambos sobre todo Hoseok habían olvidado la realidad, porque nada era perfecto y pronto las pisadas de aquellas personas retumbaron en el lugar, rompiendo su pequeña burbuja de sentimientos.

No hubo reacción inmediata, estaba completamente desconectado de la realidad porque ahora tenía miedo. Miedo de que vuelva a repentirse, de que se despierte y sea solo un maldito sueño al que nunca le encuentra respuesta. Tenía miedo de estar solo porque su sol estaba perdiendo su brillo.