Un beso

1K 104 43
                                    

Los personajes no me pertencen.

Pareja: Nana Osaki/Nana Komatsu.

Capítulo único. 

Generó: Romance.

Capítulo único.

Hey, Nana.

¿Nunca haz sentido temor de lo que tú misma sientes? ¿Jamás has negado tus propios sentimientos? Pues yo si, ¿y sabes algo? Es muy doloroso tener que vivir así.

—Nana, deja de llorar —me pidió Junko mientras me miraba con el ceño fruncido.

Cuando no pude más, cuando mis sentimientos estaban ahogándome y mis lágrimas por fin habían salido gracias a que mi corazón por fin aceptó lo que tanto había ocultado, salí corriendo del departamento en el que vivía con Takumi.

Era de noche y él como siempre no estaba en casa, así que lo primero que pensé fue en ir a verte, pero aún no estoy lista para encararte. No después de aceptar mis verdaderos sentimientos.

¿Me odiaras, Nana? ¿Qué pensarás de mi cuanto te confiese todo?

—¡Lo siento, Junko! —tome el pañuelo que Junko me extendía y limpie mis lágrimas para después sonar mi nariz.

—¿Puedes decirme de una vez que pasa? ¡Debe de ser algo grave como para que vengas corriendo hasta acá a las dos de la madrugada! —exclamó mientras se sentaba en una de las sillas de la mesa.

Kyosuke estaba al lado de nosotras, con la cabeza entre sus manos y los codos recargados sobre la mesa. Era obvio que se estaba muriendo de sueño, pero él quería estar ahí. Él es muy buen amigo, siempre preocupándose por mí.

—Junko, no le grites a la pobre ¿no ves como viene? La harás llorar de nuevo con tus gritos.

—Entonces que hable de una vez —Junko puso su penetrante mirada sobre mí, exigiendo una respuesta sobre mi estado.

Baje la mirada sin saber qué decir. ¿Cómo iba a decirles que me enamore de mi compañera de departamento? ¿Cómo iba a decirles que me enamore de ti, Nana?

Sin poder evitarlo, mis lagrimas salieron nuevamente, haciendo que Junko me mirara con atención.

—Me he metido en un gran embrollo.

—¡Vaya, que nuevas! —soltó con sarcasmo —. ¿Te peleaste con Takumi? ¿Viste a Nobu? —paro de hablar un segundo antes de que su rostro se formara en una mueca de preocupación —. ¿Él bebe...?

Negué con mi cabeza tres veces .

—No es nada de eso, Junko.

—¿Entonces que pasa, Nana? Estamos muy preocupados por ti —hablo Kyosuke mientras me mandaba una mirada tranquila.

Si, sabia que estaban preocupados. Soy una egoísta, ¿Cómo pude venir a despertarlos a esas horas de la madrugada?

Negué con mi cabeza y me levante como resorte de mi asiento.

—Lamento tanto haber venido a estas horas chicos, sera mejor que me vaya. Gracias por atenderme, los veo luego —dije mientras me acercaba cada vez más a la salida. Mi mano quedó paralizada frente al picaporte al escuchar las palabras de Junko.

—¿Ya vas a admitir que amas a Nana?

Mis ojos se abrieron tanto que dolieron. Inmediatamente se llenaron de lagrimas y lentamente voltee mi mirada hacia Junko y Kyosuke, quienes me miraban con una sonrisa y ojos de resignación.

Un beso | NaNaOù les histoires vivent. Découvrez maintenant