Daichi se avergonzó de igual forma, pero soltó una risita al ver a su setter avergonzado y haciendo movimientos raros para explicarse.
—está bien suga— dijo Daichi —puedes quedarte si gustas.
—¡¿E-EH!?— fue lo único que salió de la boca del peligris —p-pero-
—tú estarías... prácticamente desnudo.
Sawamura rió antes de abrazar a Koushi con cariño. El setter, rojísimo, apoyó su cabeza en el hombro del castaño —¿y eso qué?— dijo como última cosa.
—que... aún no me acostumbro a verte así.
—pues, así tendrás que verme en el onsen cuando vayamos.
No se sabe si el sonrojo de Suga luego de oír eso es físicamente posible.
.
.
.
Kageyama salió de su habitación con un bolso cargando su uniforme de vóley, iba a buscar al idiota de Hinata para practicar juntos pero se encontró con que éste estaba dormido al entrar a su habitación.
... tsk, estúpido, ¿Qué no sabe mantenerse despierto?
—¡oye Hinata!, ¡despierta!— bramó Kageyama esperando una respuesta, pero no hubo ninguna.
—¡OYE IDIOTA!— ¿¡es que está sordo o algo?! ¡¿por qué no lo escucha!?, ¿será que hasta durmiendo molesta al pelinegro? Simplemente no lo comprendía, Shoyo Hinata durmiendo antes de una práctica de vóley...
El enano debió hacer algo que tomara mucho trabajo como para quedar así.
—Kage... yama— dijo el pelinaranja entre sueños captando así la atención del ojiazul
Él....¿había dicho su nombre?
¿estaba soñando con él?
Un tenue sonrojo atacó las mejillas de Tobio, quien se estaba fijando en las facciones de Hinata.
Nunca lo había visto tan...
tranquilo.
Kageyama se calmó un poco antes de ver a Shoyo quejarse y moverse un poco.
—... vete... déjame dormir— dijo aferrándose a su almohada y volviendo a estar igual de inconsciente que antes.
—¡ERES UN--— las mejillas del pelinegro ahora ardían por la vergüenza, frunció el ceño y se preparó para darle un golpe a Hinata — ¡YO TE VOY A HACER DORMI-
—parece muerto— fue interrumpido entre risas. Volteó para ver que se trataba del líbero de su equipo —como sea— respondió cruzándose de brazos —me pregunto qué tipo de mierda lo habrá cansado así.
—vete a saber tú— dijo Noya con una sonrisa divertida.
Tobio esbozó una pequeña sonrisa socarrona (aunque seguía molesto).
—debió ser algo muy fuerte, ¿seguro que no lo drogaron o algo?
Yuu rió con más intensidad —claro que no, Suga nos mataría— respondió risueño —y de paso Daichi nos reviviría solo para matarnos de nuevo.
—eso dalo por hecho.
.
.
.
Akaashi entró serio al establecimiento pidiendo el número de su habitación y rezando con que no le tocara con cierta persona ejemBokutoEJEM.
Se tranquilizó bastante al saber que le había tocado con Daichi. La razón por la que no quería que le tocase con Bokuto....
Es que simplemente no aguantaría estar con él tanto tiempo en una habitación...
ya tenía suficiente con su actitud infantil en la cancha y NO quería que su hiperactividad pasara a un "pequeñísimo"(según akaashi) cuarto
Así que al saber que no le había tocado con Kotaro sólo podía hacer dos cosas
1.- regocijarse en tranquilidad
2.- rezar por el compañero del peliblanco
—alegría— susurró para sí mismo entrando en su habitación solo para encontrarse a Daichi y al setter no titular de karasuno hablando algo nerviosos.
—¿Qué ra...
—AH AKAASHI-SAN, BIENVENIDO— bramó Daichi con un tono un tanto alto.
—eh-eh... ¿hola?— preguntó el setter peligris con la cara roja de vergüenza.
Lo curioso del hecho es que esa haya sido la escena más normal que haya visto al entrar a un lugar.
ESTÁS LEYENDO
Simplemente Setters
Fanfiction¿Qué es lo que puede unir a cinco setters de distintos equipos, escuelas, y hasta prefecturas? Respuesta: un viaje de entrenamiento y muchas, muchas coincidencias. Porque a pesar de parecer tan distintos los unos de los otros, Kageyama, Suga, Kenma...
