Prólogo

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Adrien se encotraba pensando en algo que había pasado no hace mucho, sentado en un banco del parque.

Marinette, Marinette lo había traicionado.

¿Qué como era eso posible?

Pues hizo algo muy malo.

Ayer habló con Plagg del tema... y lo convencio de que Marinette merecía un castigo.

Él y Marinette ya llevaban siendo enamorados hace un tiempo, así que usaría eso a su favor.

El rubio se levantó del banco y empezó a caminar en dirección al Instituto.

Como hoy habría clases, hoy haría su primera jugada.

Adrien pasó por la gran puerta de entrada y vio no muy lejos como Nino, coqueteaba con Alya y pronto Marinette se metió en su campo visual.

- ¡Hola, Adrien! Hoy no viniste a mi casa como siempre lo haces.

Saludo la chica con entusiasmo, viendo como Adrien parecía un poco ido ese día.

La azabache empezó a dar vueltas en círculos alrededor del rubio con su mano moviendola de izquierda a derecha.

Pero el chico aún seguía en la nubes.

¿La habrá pasado algo?

¿Quizás tuvo una pelea con su padre?

Si eso fue lo que paso, tal vez debería de poner a Gabriel Agreste en su lugar.

La chica a paso decidido se empezó a dirijir a la salida pero Adrien fue más rápido y le agarró del brazo.

- Marinette, tenemos que hablar.

Dicho esto la arrastró hacia la biblioteca.

SEGUIR LEYENDO, ya saben que va después.

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¡Hola!

Aquí una nueva historia que se paso por mi alocada cabeza.

Bueno espero les haya gustado este mini prólogo.

Y yo con esto me despido.

Nos leemos.

Temporalmente Where stories live. Discover now