Parte única

Depuis le début
                                    

—Vámonos cara de idiota.

Denki no tuvo más opción que ceder e igualmente hizo lo mismo que su compañero de tomar sus cosas y salir, además de volver disculparse con la bibliotecaria con una reverencia. Prontamente alcanzó el andar de Katsuki.

—Está bien, detesto estar encerrado en un lugar tan lúgubre —comentó procurando anivelar el ambiente tenso con algo positivo.

—Grandísimo imbécil, hiciste que me vetaran, no lo olvidaré.

El chico miraba con sus grandes iris amarillos analítico el perfil de Bakugou, el cual no bajaba ese ceño fruncido detrás de sus gafas. Estaba seguro que con su comentario lo haría cabrear aún más pero debía que dar su opinión de ello.

—¿Sabes? Si fueras más amable serías muy popular, ser accesible a otros trae buenas cosas, sobre todo con las chicas.

Después de todo, ese chico era muy brillante, además de que tenía un cierto atractivo físico pero debido a esa personalidad no solía atraer atenciones.

Esos comentarios pasaron desapercibidos por Katsuki el cual continuaba con su camino.

—No me digas —exclamó con sarcasmo —pues no se ve muy efectivo en ti.

Lo dicho fue tomado diferente a la intención agresiva, Denki lo tomó como halago, así que llevó su índice a frotar su nariz orgulloso con un total aire de casanova.

—Es que yo tengo otros objetivos Bakugou, pero hay otros estudiantes que ese es un don... sobre todo en aquellos que.... —el chico pausó al ver que un par de chicas corrían para arrebasarles el paso y continuar a lo largo del pasillo. —¡Hey, eso fue grosero!

—Sólo es el idiota de Kaminari, ignóralo —reclamó una de las chicas.

Bakugou enarcó una sonrisa burlona a esa respuesta que habían dejado sin argumentos a su compañero.

—¿Decías, Romeo? —Masculló divertido. Kaminari gruñó sus dientes indignado.

—¿Cuál es la maldita prisa?

—El partido de práctica del equipo de baloncesto inició, vamos tarde.

Kaminari pasmó a lo escuchado, sus ojos brillaron, es verdad, había escuchado de uno de los jugadores que mañana iniciarían el torneo regional. Bakugou miraba cansado la dirección hacia donde se alejaban las chicas.

—¡Oye! ¡Es cierto! —Comentó en un auge de emoción Denki —¡Deberíamos trasmitirles nuestras vibras positivas para que ganen! —Frotó sus manos ansioso, posteriormente las estiró hacia la dirección donde estaban las canchas. —¡Vamos!

—Imbécil, ¿acaso olvidaste que estás teniendo clases extras de química? —Exclamó tedioso sosteniendo del cuello del uniforme a Denki que estaba dispuesto a correr hacia donde se fueron las demás.

—Oh vamos, no seas aguafiestas —rogó procurando zafarse del agarre sin mucho éxito, podía no aparentarlo pero Bakugou tenía suficiente fuerza para detenerle con solo un brazo.

—Ni siquiera lo pienses cara de idiota.

—No veré ningún partido del torneo por estar en estas clases extras, ¡Sólo déjame ver la práctica! ¡5 minutos! ¡Por favor! Después me memorizo cualquier tontería sin rechistar, hasta le haré 500 cartas de disculpas a la bibliotecaria para que te exonere del castigo —imploraba sin mucho éxito a cualquier excusa para que cediera el otro.

Sabía perfectamente que si negaba a esa humillante petición Kaminari no se centraría en lo absoluto en las siguientes instrucciones de sus clases, por lo que suspiró hastiado y soltó su agarre.

Fachada [DkBk]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant