Umbrella, 우산

𝗜'𝗺 𝘀𝘁𝗶𝗹𝗹 𝘀𝘁𝗮𝗻𝗱𝗶𝗻𝗴 ━𝗲𝗹𝘁𝗼𝗻 𝗷𝗼𝗵𝗻

La mirada de Peter se perdía entre las computadoras, tenía suficiente en mente, su mano derecha reposaba en su muslo al igual que su máscara, una larga noche de sábado, eso había sido, sin embargo, nadie le dio el infortunio de pensar en otra cosa.

Sabía que Tony le hablaba y explicaba un millón de cosas que solo ambos podían entender, pero aún así, su inteligente cerebro no paraba de pensar el por qué a su larga noche, porque Peter había actuado de una manera muy formal y acorde a la situación, llamar a la policía para que se llevaran a los maleantes, pero el no había sido quien los capturó, al contrario, solo llegó a la escena y todo estaba resuelto.

Quizá fue obra de ese nuevo héroe que anda por ahí, porque si, Peter había escuchado los rumores de un héroe con ojos semejantes a un gato, rapidez sorprendente, habilidades sobrehumanas y una altura considerablemente mayor al promedio, eso ponía mal al joven.

-...Y no me estás escuchando.

Pudo regresar a la realidad, hace más de dos meses que fue la pelea en Berlin y apenas tuvo la oportunidad de ver a Tony, pero tenía tanto en la cabeza que se olvidaba por completo que existía.

-Algo te agobia muchacho, ¿una chica?

El menor se puso rojo al instante, si, Peter pensaba en una chica, pero esa chica al parecer tenía cierto interés en un hombre, así que, por inercia, susurro lo suficientemente algo para que Stark escuchara "Un muchacho".

-¡Oh! -y Peter de inmediato supo su error- Si es un chico, no hay problema, aquí no juzgamos.

-¡No, señor Stark! Digo... -suspiro cansado-... me gusta una chica, Liz, pero ella tiene interés en un chico mayor, no tengo ni idea de quien sea, o si sea bueno para ella, el simplemente llegó.

Tony lo miró unos escasos segundos, para sonreír y pronunciar "Dime su nombre, te voy a ayudar", negación seria decir que Peter pensó en no decirle, sin embargo, nadie más lo podía ayudar, así que, renegando, contestó.

-Agamenon Prokhorov.

-🍒-

En una casa de Queens, donde ya todos estaban dormidos, o eso aparentaba, un joven se metía por la ventana de su cuarto intentando hacer el menos ruido posible, sus padres ya estaban dormidos, y no quería dar explicaciones.

Ya dentro, se sintió en paz, a dolorido, pero en paz, se quitó su máscara característica, mirándose al espejo, fijándose que aún tenía los ojos amarillos, felinos, pero también vio el reflejo de una cabellera rubia por el cristal, con alteración, volteo, mirando a su hermana, Joyce.

-Tu...-susurró la pequeña con temor, antes de pegar un grito, el cual fue ahogado por la palma de su hermano el mayor.

-No, por favor, no, soy Agamenon -bajo la cabeza sacudiendose un poco y justo cuando sintió que sus colmillos ya no estaban, alzo la mirada- ¿vez? No hay nada que temer conmigo, siempre te protegere.

Su hermana menor aún seguía pasmada, sus ojos azules pasaban por los negros de su hermano, para lanzarse a el y abrazarlo, claro que el mayor saco un quejido de dolor.

Joyce de inmediato se separó de el para ir al baño por el botiquín y decir seriamente: -Quitate la playera, te limpiare.

A lo que Agamenon obedeció, su hermana era pequeña, pero sabía más del mundo que cualquiera.