— Ay no empieces, vete de aquí —Le pido a Jungkook mientras me acuesto en la cama de la habitación. Estoy boca abajo, no quiero verlo, me hace mal que me diga esas cosas. Oigo unos pasos acercarse a donde estoy acostado y un cuerpo me aplasta, pronto el aliento lleno de alcohol me llega a las fosas nasales y volteo encontrándome con los ojos cristalinos de Jungkook

¿Va a llorar?

—Perdón. Lo siento tanto, perdóname —Ay no, otra vez no. Siento mi pecho rompiéndose por el peso y por mi corazón roto de liceísta enamorado. Todavía este chamo me trae más mal que el chikungunya.

— Marico, quítate de encima, no me dejas respirar.

—Te dije que lo siento mucho Tae, de verdad. Fue toda mi culpa, perdón por no buscarte

—No... no hagas esto Ggukie...

—Lo siento —Se ahoga entre las palabras mientras sus mejillas son teñidas de rojo y sus lagrimas lavan su cara, no puedo. No soporto verlo así y empiezo a llorar yo también

Hoseok se sienta al lado de nosotros

—Ay, no lloren chamos, me van a hacer llorar a mi también —Nos dice con lagrimas en los ojos y se tapa la cara. — ¿Por qué estamos llorando?

Yo lo veo extrañado pero otra vez está ese calor quemándome la maldita piel, quiero quitarme todo, la camisa, el pantalón. Todo, siento como si estuviera en un mediodía en Maracaibo.

—Jungkook, de verdad, quítate de encima —Le pido porque siento asfixiarme con el calor que también me da su cuerpo, pero por otra parte no quiero despegarme de él. Hoseok vuelve sus ojos a mi después de unas cuantas lagrimas caídas y sus ojos se expanden y se dirige a Jungkook

—Mano, tu novio es precioso ¿Por qué lo estás haciendo llorar? —Le pregunta anonadado, Jungkook está en otro mundo porque no se da cuenta de que me estoy quejando debajo de él —Coño, quítate —Le empuja y me ayuda a sentarme.

Otra vez se me queda viendo embobado y se me acerca de a poco. Jungkook se para del piso porque había rodado hasta el piso cuando Hoseok lo empujó y se para casi deteniendo a mi novio.

— ¿No era tu novio, pues? —Pregunta también extrañado de la vida y volteo los ojos —Ay no importa —Me dice y es él quien me termina besando mientras soy sostenido por Hoseok. Los chasquidos de su lengua caliente me prenden más aún y de verdad que el calor se vuelve algo malditamente insoportable. Me separo del beso mientras ambos chicos se quedan viendo expectantes.

Me voy quitando la ropa como si fuera algo completamente natural. Veo de reojo como ambos están embelesados clavando su vista en mí. Le sonrío tímidamente

Ellos también sonríen cuando voltean a verse con una mirada llena de lujuria, ambos acercan sus rostros y se besan para mi sorpresa. No puede ser.

Me quedo boquiabierto mientras ambos empiezan una lucha de bocas demasiado calientes. Inconscientemente llevo mi mano a la tela del interior que tengo puesto, es lo único que llevo encima. Mi miembro se pone automáticamente duro y aprieto más las piernas viendo la escena con mucha euforia.

Nawebonada Vladi1000.

¿En qué momento llegamos a esto?

—Ahh... —Jadea Hoseok cuando las manos de Jungkook bajan por su cuerpo. Él se acerca a mi también y me toma del cuello para acércame a sus calientes labios. Me besa demasiado apasionadamente mientras Jungkook deja el cuerpo de Hoseok y se dirige al mío llenándome de besos.

¡LLEVAME PA TU CASAA! «Yoonmin»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora