Todo en un día.

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Llegó la hora del almuerzo, pero James estaba con algunos de sus amigos y decidí no acercarme, por lo que tenia que buscar mesa y estaba todo lleno. Cuando por fin encontré un sitio al lado de unas chicas me senté y me echaron casi a patadas, lo que no entiendo por que si no hice nada, justo James lo vio todo y vino corriendo y me levanto del suelo. No podía levantarme, al caerme fue como que me torcí el tobillo, por lo que James me levantó y me cogió como si fuese una princesa en un cuento maravilloso.

James- ¿Estás bien Nu?

Nuria- ¿Nu?

James- Si es para acortarte el nombre, si te parece bien.

Nuria- Mm ok.

James- Pero, ¿estás bien?

Nuria- Si, eso creo.

James me deja en el suelo y como por arte de mágia ya no me dolía el tobillo. James y yo decidimos comprar el almuerzo e ir con sus amigos, para que no volviese a suceder.

Mejor amigo de James- Ey James quien es ella, ¿tu novia? JAJAJ

James- Callate estúpido, es mi nueva amiga. -Dijo un poco nervioso.

Mejor amigo de James- Bueno bueno fiera relájate. -Dijo riendo

En mi interior tenía tantas ganas de reirme que parecía que fuese a explotar.

Nuria- Hola, yo soy Nuria, encantada.

Mejor amigo de James- Hola, yo soy Mario el mejor amigo de este ser, JAJAJ. -Dijo mirando a James de una manera muy graciosa.

James- En fin, Nu ¿qué quieres comer?

Nuria- Mmm, un sandwich de jamón york y queso estaría bien.

James- Oido cocina. -Dijo riendose.

Mario- ¿Y a mi no me preguntas James? JAJAJ. -Dijo en tono muy sarcástico.

James- No a ti no bicho del demonio, JAJAJ. 

James se fue a comprar todo y Mario empezó a interrogarme muchísimo.

Mario- Bueno Nuria, ¿eres nueva no?

Nuria- Si.

Mario- ¿Y estás en la clase de James?

Nuria- Si.

Mario- JAJAJ.

Nuria- ¿Qué pasa?

Mario- No nada.

Nuria- Enserio dime.

Mario- Uy mira ahí viene James. -Dijo señalando, y evitando mi pregunta.

James- Ey chicos, ¿de que hablaban?

Mario- Solo nos conociamos un poco mejor JAJAJ.

James- Ah, ok. Nu aquí esta tu sandwich.

Nuria- Oh gracias, ¿cuánto te debo?

James- Nada, tómalo como un regalo de cortesía del insti. -Dijo sonrojandose.

Nuria- Mmm ok, pero ya te devolveré el favor. -Dije con una sonrisa pícara.

Mario empezó a reirse muchísimo de los dos, realmente ambos parecíamos enamorados, pero solo es mi amigo no le veo como otra cosa.

Al salir de clase James se despidió y se fue, ya que tenía mucha prisa. Estoy en la taquilla guardando las cosas cuando derepente un grupo de chicas se me acercan, intento irme discretamente, pero una de las chicas me cogió del brazo y me metió en el baño.

Chica 1: Ey tu eres la tal Nuria ¿no?

Nuria- ¿Cómo que la tal Nuria?

Chica 2- Sí la novia de James.

Nuria- ¿Qué como que novia de James?

Chica 1- ¿Crees que puedes quedarte con el pedazo de zorra? JAMES ES MIO.

Chica 2 y 3- Eso

Nuria- Oye que James no es mi novio. Y guardate los insultos cari.

Chica 1- ¿Cómo que cari? ¿Qué te has creido? Te vas a enterar.

Entre la chica dos y tres me agarraron y la chica 1 me puso un pañuelo en los ojos y boca, y empezó a darme puñetazos por todos sitios, luego cuando ya no podía ni aguantarme en pie me escupió en la cara y las otras dos me dejaron tirada en el suelo. Me quedé allí tirada empapada en sangre como 40 minutos o más, sin poder moverme y la cara inchada. Entró una limpiadora y se tiró corriendo a incorporarme y a preguntarme.

Carmen (la limpiadora)- ¡Dios mio! ¿Qué te ha pasado?

Carmen- Debería llamar a alguien.

De pronto toda la sala de profesores estaban en el baño conmigo, y al ver como estaban decidieron llamar a la ambulancia directamente, sin informar a mi madre ni nada. La cual luego llamó atacada de los nervios al instituto para saber si seguía allí. Llegaron los paramédicos y solo se quedaron con la boca abierta hasta que reaccionaron y me pusieron el la camilla, para luego estar en el hospital.

Cuando llegué al hospital vi a mi madre llena de lágrimas correr hacia mi y abrazarme.

Mamá- Lo siento cariño, de verdad lo siento, todo esto es culpa mía por cambiarte de instituto lo siento. -Dijo mientras seguía llorando.

Yo apenas podía hablar, y le dije.

Nuria- No má no lo es.

Los médicos me pasaron a una habitación pero no dejaron entrar a mi madre, allí las enfermeras me desvistieron y limpiaron la sangre, me pusieron una bata y una vía para ponerme suero, luego entró un médico y quedó asombrado al verme.

Médico- ¿Qué te ha pasado?

Yo no respondí y empezó a revisar todas las heridas y hematomas.

Médico- Te han dado una paliza en el instituto, ¿cierto?

Asentí porque me era imposible hablar del dolor que tenía, una vez que me cogieron puntos y desinfectaron mis heridas me pasaron a planta, es decir, que me dejarían allí ingresada. Unos minutos más tarde entró mi madre empapada en lágrimas, lo que me dio mucha pena. Ella me abrazó pero del dolor tan insoportable que tenía no pude evitar gritar del dolor. Enseguida llegó un médico y mandó a que me hicieran radiografías.

El institutoWhere stories live. Discover now