Capítulo 13.

754 88 47
                                    

  Capítulo 13.


  La calma es abandonada cuando tanto los Ellos como la pareja de seres etéreos notan a ambos humanos recostados en el pasto húmedo, captando con los corazones frágiles como Newt usó su último suspiro para aferrarse a la mano de Anthema, muriendo a su lado. Adán llora desconsolado mientras se agacha a la altura de esos novios, abrazando los cadáveres inertes; Azirafel cierra los ojos quizás con la intención de omitir ese escenario fatalista, uno que no dura ni un segundos más porque Anathema se siente brusca y exhala ruidosa en un silbido peculiar, buscando a su alrededor a un Newt pálido y tembloroso que no se aparta del pasto, los ojos abiertos para en par. Ante las miradas atónitas de los presentes, ex cazador y bruja se abrazan, recién regresados de la muerte.

  — Anathema... Quiero irme lejos de Tadfield — Esa declaración hace que los Ellos y Crowley rían quitando los nervios de encima, Wensleydale algo dificultoso debido a la herida no tan profunda que cruza el vientre, misma que le pica un poco.

  Adán boquea buscando una explicación en la mirada del ángel, mismo que alza sus hombros, como si ver a las personas resucitando es lo más normal del mundo; la bruja se levanta con ayuda de su novio que se queja porque su remera favorita está arruinada por su propia sangre, en cambio Anathema se queja de un feo dolor de cuello que la está matando (vaya ironía); Crowley arrastra a su ángel en dirección a la Cabaña Jazmín en compañía del Anticristo que no puede creer aún que trajo a la vida a dos personas y no se le agitó ni un rizo, y Perro sólo se mantiene afuera jugueteando con la cabeza de Asmodeo, girándola de un lado a otro y clavando los dientes en toda esa carne.

  Todos se sientan alrededor de la no tan grande mesa y milagrosamente alcanzan los asientos, unos más irregulares que otros, como un sillón a lunares amarillos que Crowley decide ocupar o la banca rústica que los Ellos ocupan, en cambio Azirafel descansa sobre un extraño prototipo de trono repleto de telas y almohadones. Anathema pone las cartas en la mesa, así aclarar las dudas que le carcome la cabeza desde un inicio.

  — ¿Quién rayos era ese sujeto y qué quería? — Crowley carraspea nervioso y Azirafel sólo inclina avergonzado la cabeza, deseando olvidar toda esa situación.

  — Verán, con mi ángel somos pareja...

  — Eso ya se sabía, genio — corta Pepper con la clásica mirada de "Es tan obvio, Dios, qué idiota" — ¿Pero por qué quería matarlo a él? Eso no es cool.

  El demonio aclara su voz para proseguir sin perder la compostura ante la interrupción. Sin embargo...

  — ¿No era una ex novia loca? Porque mi tío Richard, que ahora vive en México, fue apuñalado por mi tía Roxan al verlo con otra mujer — comenta Wensleydale como si sus anécdotas fueran la verdad y pura verdad, cuando en realidad Roxan sólo le cortó un dedo al tío Richard por accidente. O no tan accidente.

  Brian agarra una de las galletas y la engulle sin detenerse a tragar, escupiendo migas por doquier.

  — ¿Y si sólo quería matarlo? Es decir ángeles y demonios no se llevan de la mano... casi siempre — agrega Brian después de lanzarle una mirada rápida a Crowley y Azirafel.

  Los reunidos al fin guardan silencio contemplando a un Adán entretenido en llenar su estómago como si el hambre atacara después de usar sus milagrosos poderes. Notando aquella ventajosa situación Crowley concluye con su mínimo relato, una en que se apoya en la historia del muchachito de lentes, con algunos detalles que se harta en recalcar, por ejemplo que jamás tuvo que ver nada con él, ni nunca quiso, y que las razones de Asmodeo se asemejan a una obsesión insana sin razón de existir. Todos se relajan cuando Crowley asegura que Asmodeo jamás regresará ya que (dato aportados por Azirafel) aquella espada no es llameante por gusto, sino es fuego sagrado entregado por Dios Omnipotente con el fin de acabar con los demonios, o lo que se puede de ellos.

°•. six thousand ineffable years .•° Cactus_03Donde viven las historias. Descúbrelo ahora