Shy boy.

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—¿chico tímido?. Pff,por favor—

Blue de The neighborhood sonaba através de mis audífonos.
En la mesa del rincón,con un manga en mis manos.
Ese era mi pasatiempo;venir a la Biblioteca reproducir buena música y leer mangas.  Estaba concentrada en mi lectura, cuando siento que tocan mi brazo suavemente, al voltear pude ver a un chico de tez morena y rizos cayendo de su frente, llevaba una mochila gris sobre su hombro y un libro de álgebra de tercer grado.

—¿Puedo sentarme? — cuestiono en voz baja, asenti. —Gracias— sonrió amablemente.

Volví mi mirada al libro y continúe leyendo, de reojo pude ver como sus labios se movían me quité un audífono y lo mire.

¿Decías algo?— enmarque una ceja.

—¿Es la primera vez que vienés? —

—No. Siempre vengo.— dije y volví a centrarme en mi lectura.

—¿Qué lees?— acercó más su silla. Frunci el ceño. —Himitsu kichi no himitsu... Nunca había escuchado sobre el¿de qué se trata?— tomó el libro suavemente, comenzó a leer.

—Es para adultos... — baje mi cabeza. Sentí como mis mejillas se ponían calientes. Apartó la vista del pequeño libro y me miro sorprendido.

—Oh... Jaj. Eso me pasa por intrometido— tocó su nuca. —Bueno, emm, ¿Y por qué lees eso? — trague saliva. No podía decirle que era más virgen que una papaya y que estaba más sola que nada. Me quedé callada. —¿Tu novio sabe que lees esas cosas?— me sentí más avergonzada.

—N-no tengo novio... — recargo su barbilla sobre su palma después sonrió de lado.

—Ya veo... ¿Te tocas con eso? — abrí mis ojos con sorpresa, ¿y éste idiota que se cree?.

—¡Claro que no!— el rio.

—Bien, Bien... Haré que te creo. — se acercó más a mi, su rodilla rozaba la mía. —Puedo ayudarte... Si tú quieres— sentí su mano sobre mi muslo. ¿Ayudarme en qué? ¿En álgebra?.

—Estás loco, ni siquiera te conozco— frunci el ceño.

—Soy Michael, ¿y tú? —

—Peach... — sentí como su mano se escurrio debajo de mi falda.

—Ya nos conocemos...

Relamio sus labios. Sabía lo que haría.

Cerré mis ojos, sentí sus labios sobre los míos, era un besó húmedo y lento, nuestras lenguas al encontrarse comenzaron una guerra, la cual el ganó. A la falta de aliento nos separamos, sus obscuros café me miraron.

—¿Conoces los dedos de gamer? — negué. —Pues hoy será el día—.

Al sentir el tacto de sus fríos y largos dedos en mi, me queje.
Lo hacía lenta y cuidadosamente, era bueno en esto,, jadee, me hundió en un besó callando mis quejidos.
Aumentó su velocidad, cerré los ojos y aprete su brazo.
¿Cómo podía estar haciendo ésto en una biblioteca?
Sentí mis piernas temblar,,había terminado.

Continuemos en mi casa... — susurro en mi oído. Asenti.
















Vgogh




























Peach Chim 🍒

i m a g i n a s //Michael Jackson//Where stories live. Discover now