Capítulo 2

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Una vez más, como lo ha hecho todos los días, Fergus se pone de pie y espera a que aparezca el niño. Recibió un mensaje de Estoico solo un mes después del día en que lo envió. Que con una o dos semanas de sobra antes de que todos llegaran allí, su hijo vendría y lo ayudaría. Y se supone que está en un dragón. Dudaba eso, pero incluso si lo hiciera, eso podría darle la ventaja que necesita para ganar la mano de Mérida. Y luego cancelarla para que pueda encontrar el amor cuando esté lista.

-Fergus, ¿qué estás haciendo? Has estado viniendo aquí todos los días durante la mayor parte del día. ¿Qué estás esperando?-

Girándose para ver a Elinor caminando hacia él, Fergus sonrió y suspiró. Ella no estaba contenta con él cuando le contó sobre Estoico. Pero como Rey y Reina juntos, le dijeron que siempre tendría un hogar en Dumbroch. Haciéndolo parte del Reino, lo que significaba que su hijo podría luchar por la mano de Mérida.

-Esperando al chico- dijo
Mirándolo cuando se apartó de ella, Elinor no sabía qué decirle sobre eso. Ahora lamentaba haberle contado lo único que podía sacar a Mérida de eso, ya que eso era claramente lo que estaba planeando hacer con el chico de Estoico.

-Todavía no puedo creer que le hayas dicho a Estoico. O que realmente pienses que su hijo volará aquí en un dragón-

-Él estará aquí, Elinor. No tengo dudas. Nosotros, como Rey y Reina del Reino, le dijimos que él siempre sería parte del Reino. Eso significa que su hijo tiene derecho a luchar por Mérida. Al menos si el niño de Estoico gana, sé que ella será tratada como debería- Fergus suspiró mientras la miraba mientras ella se detenía a su lado.

-Podrías haber evitado todo esto-

-No lo haré. Los juegos comienzan en dos semanas. Aún si el hijo de Estoico este aquí o no. Quiero decir, qué clase de nombre es Hipo de todos modos- dijo Elinor luego se volvió y se alejó furiosa de su esposo. ¡Ella simplemente no sabía lo que estaba pensando hacer! Especialmente sabiendo la enemistad entre Estoico y todo el Clan Macintosh.

Con un suspiro, Fergus se volvió hacia el cielo mientras observaba la dirección en que volaba su halcón. "Vamos muchacho. Ven aquí antes que los demás, así puedo hablar contigo"

-¿Papá?-

Volviéndose para ver venir a su hija, Fergus se echó a reír. -No te preocupes por nada Mérida. Yo me encargaré de eso. Él estará aquí-

Mérida se detuvo junto a su padre y suspiró mientras dejaba caer la cabeza sobre su brazo. -Eso espero. De lo contrario, solo me deja una opción-

-No más de esa charla. No vas a escapar. Te quedas aquí y dejas que el chico de Estoico y yo nos encarguemos de todo- Fergus suspiró cuando vio que su humor no había cambiado. -Yo....-

-Pero si él no gana, ¿entonces qué papá? No me veré obligada a casarme con alguien que no conozco. Angus y yo nos iremos al día siguiente si no lo hace. No dejaré que este sea mí destino- Mérida comenzó a girar, pero luego se quedó sin aliento cuando vio a un dragón negro aterrizar al otro lado de la pared. Cuando el chico se sentó y levantó su máscara, ella parpadeó.
-¿Quién eres tú?-

Riendo Hipo se deslizó de Chimuelo mientras daba una reverencia.
-Bueno, princesa, yo soy Hipo-Levantándose para ver a su padre, Hipo parpadeó. -¿Tu debes ser Fergus?-

-¿Hipo? ¿Es quien dijiste que eras?-Fergus tenía una mirada fija en los ojos del niño. Tenía los ojos verde oscuro de Estoico -Eres el chico de Estoico, ¿verdad?-

Cuando lo soltó y dio un paso atrás, Hipo se echó a reír.

-Ése sería yo- Un fuerte roce, y Hipo se echó a reír mientras miraba a Chimuelo. -Y este es Chimuelo-. Mirando hacia arriba, suspiró. -Papá me envió para ayudarte. Sé lo que hay que hacer y no tengo problemas para hacerlo-

Un favor a un amigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora