Mi lugar en tu vida part.2

1.1K 111 0
                                    

Jaebeom decide dar un descanso después de unas horas planeando y acordando los siguientes robos. Y en tan sólo cinco horas ya planearon alrededor de una docena de robos, tanto menores como grandes.

No veo quien, pero supongo el dueño de la casa pide que su servidumbre comience a atender a los invitados. Entonces en ese descanso, Jaebeom me jala hacia un rincón y ahí comienza a besarme, supongo que saciando sus deseos que tuvo durante toda la reunión. Ya que durante toda esta, Jae me tocaba y se acercaba para darme pequeños besos, que no parecían incomodar a nadie, pero yo no quería que me nos vieran.

Así que en algún momento, tomé valor y le negué los besos, y para mi sorpresa –y suerte– él no pareció tomárselo mal.

Pero mientras Jae me besa, pega mi cuerpo al suyo de un tirón, mordisquea y lame mis labios, siento que una persona se acerca hacia nosotros. Y lo confirmo cuando dicha persona se ríe bajito.

—Oh vaya, supongo que vengo en mal momento —Jaebeom se separa un poco de mí, mis manos en su cuello intentan volver a hacerlo, pero él pone fuerza y se gira a ver a quien habla.

—Uno muy malo —responde, yo también miro a quien nos interrumpe, pero una sonrisa se planta en mi rostro cuando veo que es ese chico, tomado de la mano de su hombre—Jinyoung, él es Yugyeom, él... —mi hombre se limpia sus labios mientras piensa en que decir, pero él hombre se ríe y entonces pone toda su atención en mí.

—Soy quien ha salvado el trasero de Jaebeom en más de una ocasión —me extiende una mano y cuando yo estoy apunto de tomarla, Jaebeom me jala hacia él.

Lo miro pero veo que él está mirando a Yugyeom, niega con la cabeza ante la duda en el rostro en su amigo.

—Oh ya veo... —susurra, entonces sus ojos pasan del agarre de la mano de Jaebeom sobre la mía hasta estar en el rostro del chico al cual también tiene agarrado—Él es BamBam —entonces él me sonríe y se atreve a extenderme la mano de igual manera que su pareja.

Y cuando yo estiro la mía para aceptar el gesto, clavo las uñas de mis dedos en la mano de Jaebeom que sostiene la mía, le advierto que es mejor que no intente detenerme, parece funcionar, porque detengo que salte para impedir el tacto.

La sonrisa delicada de BamBam se ensancha cuando ve que sí le acepto el saludo.

Jaebeom se aclara la garganta apenas toco su mano, Yugyeom se ríe y llama nuestra atención.

—Vamos Jaebeom, ninguno de nosotros se metería con tu chico —el comentario me saca una sonrisa. Sí, me gusta tener ese título.
Mi hombre rueda los ojos y pasa su mano posesivamente por mi cintura, la acaricia y sus labios besan mis cabellos.

—No me gusta que lo toquen —entonces el rostro de Yugyeom se pinta en picardía, alza ambas cejas hacia Jaebeom y sonríe.
—Por nadie más que tú —eso le roba una sonrisa a Jaebeom, pero algo me llama la atención, BamBam me hace una seña como para que lo acompañe. Frunzo mi ceño, él hace otro ademán, pidiéndome que lo espere.

—Yugy —llama a su hombre, que al instante responde a su llamado, poniendo sus ojos sobre él—Quiero darle al chico de Jaebeom uno de las cosas que compramos en Suecia, ¿puedo? —la sonrisa cariñosa que Yugyoem le da a BamBam me hace sonreír.

—Por supuesto, Bammie —ambos vuelven su vista hacia nosotros, Yugyeom mira a Jaebeom esperando su aprobación y BamBam me mira a mí, asintiendo feliz, diciéndome que lo acompañe.

—¿Podrías concedernos a Jinyoung unos minutos? —le pregunta Yugyeom, entonces justo cuando miro a Jaebeom, él también se voltea para mirarme.

Pongo mi mejor cara de súplica, acaricio su brazo con mis manos y pestañeo rápidamente, sé que no puede resistirse a darme algo, así que suspira y asiente. Yo río feliz y me planto de puntillas para darle un beso en su mejilla.
—Ven Jinyoung, el regalo está en nuestra habitación —dice BamBam apenas yo doy un paso para seguirlo, cuando nos alejamos, escucho a Yugyoem y Jaebeom hablando sobre los nuevos trabajos.

MAYDAYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora