Acuérdate de mi

C. 66

Clara y Isa se fueron hacia un café, ese lugar era muy acogedor, tomaron asiento en uno de los sofás que ahí se encontraba y se sentaron uno frente a otro

Clara- y bien de que quieres hablar

Isa- no me gusta que estemos así, antes hablamos diario, ahora me evitas y no quiero esto, no quiero irme si arreglar las cosas contigo

Clara- es lo mejor, se que suena cruel, pero no quiero que esto termine con corazones rotos, ni de tu parte ni mucho menos de la mía, lo mejor es que cada quien haga como que no nos confesamos lo que sentimos, créeme que me duele decir esto

Isa- no, no quiero esto para nosotros, no quiero irme sabiendo que entre tu y yo las cosas están mal

Clara- quedamos como amigos no? Pues así seguiremos, siempre que necesites algo sabes que puedes llamarme, a la hora que sea

Isa- eso lo hice hace unos días y no obtuve respuesta alguna- sacó su celular- mira, me déjaste en Visto- le mostró la conversación

Clara- no sabía lo que hacía, perdón, juro que esta vez será diferente, te quiero y no quiero que desaparezcas de mi vida, menos ahora que serás famoso

Isa- cuando de verdad se quiere a alguien nunca se olvida a esa persona por más ocupado que estés, al menos yo nunca lo haré- la tomó de las manos- eres muy importante para mi y lo sabes, tal vez no es el momento de estar juntos pero espero que algún día llegue y sea todo lo contrario

Clara- Isa- lo abrazó- eres increíble

Isa- entonces estamos bien?

Clara- obviamente- sonrió

Isa- bueno entonces quiero que me prometas algo

Clara- depende

Isa- hazlo, juro que no es nada malo, anda

Clara- bien, lo prometo

Isa- a partir de hoy saldrás a pasear conmigo hasta que me vaya

Clara- hecho- le dio la mano

Isa- bien, entonces ya quedamos

Los dos se quedaron un rato más platicando, después Isa la llevó a su casa. Violeta y Villa decidieron dar un paseo por las calles de Bogotá, de noche tenía una vista espectacular, iban tomados de la mano y haciendo bromas, al llegar a casa de Violeta lo invitó a pasar, saludaron a su mamá y lo invitaron a cenar, al terminar el se despidió y se fue

Villa llegó a su casa y le mandó un mensaje a Violeta

Villa:
Hola bonita, te iba a proponer algo, pero se me pasó y apenas me acordé

Violeta:
Pues es momento de decírmelo amor

Villa:
Me encanta cuando me dices así, pero bueno mi propuesta es la siguiente: te iba a decir que que te parecía ir a pasear por Bogotá conmigo estos días que me restan aquí, hay lugares a los cuales te quiero llevar y quería ver si aceptas

Violeta:
Contigo voy al fin del mundo si es necesario, claro que acepto

Villamil:
bueno pues a partir de mañana vamos, descansa mi amor 😘

Violeta:
Bonita noche guapo 😘

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Los días pasaron, el día de irse estaba cada vez más cerca, sólo tres días más les quedaban para viajar, los boletos de avión ya estaban listos, sus maletas ya casi estaban terminadas. Villa no quería irse sin darle un buen recuerdo, decidió ir a casa de Violeta, se arregló y pasó a comprarle unas flores, después se dirigió a casa de su novia

Violeta- Juan - dijo emocionada y lo abrazó

Villa- hola, mira te traje esto- le dio unas flores

Violeta- están hermosas, gracias, pasa, porque no me avisaste que venías, digo para arreglarme, veme estoy en pants

Villa- bueno quería darte una sorpresa, casi me voy y quiero aprovechar el tiempo contigo, quería invitarte a la casa, te tengo una sorpresa

Violeta- sorpresa? Bien, voy a cambiarme rápido entonces, no tardo

Violeta sólo se cambió, ya que se había bañado antes, bajó y le dijo a Villa que se fueran. Al llegar a la casa de Villa este le dijo que se cubriera los ojos, ella obedeció y este la guió todo el camino, al llegar le dijo que podía ver y Violeta se sorprendió

Violeta- Juan esto es demasiado- dijo cubriéndose la boca

Villa- nada es demasiado para ti, mis papás y mi hermana me ayudaron, esta noche la casa es sólo nuestra

Villa le había pedido ayuda a su mamá y a su hermana para hacerle algo romántico a su novia, ellas le dieron ideas, Su papá también intervino, le sugirieron que lo hiciera en el jardín, el aceptó, colocaron una mesa redonda, adornaron con velas y flores, un poco de luces y por supuesto la comida favorita de Violeta

Violeta- estas son las enchiladas de mamá, no me digas que ella también participó

Villa- si, ella puso la comida- rió

Violeta- gracias por esto Juan- lo besó

Villa- siéntate bonita- la ayudó

Ellos se sentaron y comieron, platicaron de temas variados, la tarde se pasó rápidamente, la noche se hizo presente, Villa puso música tranquila y la invitó a bailar

Villa- no soy bueno, pero la ocasión lo amerita, baila conmigo

Violeta asintió y colocó sus manos al rededor de su cuello, el chico la tomó por la cintura y se movieron de un lado a otro. Después de tanto bailar decidieron entrar ya que comenzaba a hacer frío

Villa- oye eres perfecta

Violeta- no lo soy

Villa- para mi si, así que no me contradigas

Violeta- bien, hombre- rió

Villa- vamos arriba, no traes suéter y estás temblando- la tomó de la mano y subieron

Al entrar a la habitación de Villa el sacó una playera y se la dio

Violeta- y esto?

Villa- será tu pijama por esta noche, póntela

Violeta- gracias, puedo pasar a cambiarme al baño?

Villa- adelante

Violeta se cambió, Villa hizo lo mismo y se colocó su pijama, sólo faltaba que se pusiera su playera

Violeta- ya estoy lis... Hay no perdón yo no sabía que aún no terminabas- dijo tapándose los ojos nerviosa

Villa- tranquila, que jamás habías visto a un chico sin camisa?

Violeta- no que yo recuerde- dijo aún con las manos cubriendo sus ojos

Villa se levantó de la cama y fue hacia su novia, la tomó de la mano y la guió a la cama

Villa- no seas exagerada, siempre hay una primera vez, o tan feo estoy?- dijo mirándose

Violeta- estás hermoso, pero es raro verte así- dijo nerviosa

Villa- por cierto que sexy te vez con esa playera- dijo coqueto

Violeta- te parece?- dijo dándose una vuelta

Villa- pero sabes, te verías mejor sin ella- se acercó y la besó- te amo- le dijo al oído

Violeta se puso nerviosa y sólo lo acercó de nuevo a ella dándole un beso, ese beso iba subiendo de tono cada vez más, Villa se colocó encima de la chica y comenzó a besarle el cuello, comenzó a bajar poco a poco, pero se detuvo agitado

Villa- tu quieres hacerlo?

Violeta no dijo nada y sólo pegó sus labios con los de él en señal de aprobación