La decision

6 2 0
                                    



Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.




                                                                   UNA FAMILIA DE PERROS







Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.














1

La decisión









Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.





Mi padre dice que va desnudo por la vida. Yo le pregunto qué significa eso, porque a mí me parece que todos vamos así. Nosotros no somos de esos perros que van con ropa, ni adornos.

Él me contesta siempre lo mismo; "no escondo nada, no llevo cargas, el amor me arropa y la verdad me libera."

Todo eso está muy bien, pero yo suelo quedarme igual, además mi madre cuando está enfadada o cansada, dice; "¿por qué me echaría yo esta carga tan pesada, dios del amor hermoso?"

A esto le suele seguir una serie de lamentos que ninguno escuchamos y mis hermanos y yo salimos corriendo para no acabar sufriendo la retahíla.

Yo, que según dicen mis padres nací para ser un pensador, pienso: "¿Cómo mi padre va tan desnudo y mi madre tan vestida?" En mi cabeza todo se queda grabado sin ningún entendimiento.

Somos una familia de perros al uso, padre, madre y siete cachorros de distintas edades. Yo soy el tercero empezando por arriba y según he oído son los mas listos, así se lo hago saber a mis hermanos y después llega la pelea y la retahíla de mi madre.

Mi abuelo materno parece una chimenea, siempre va echando humo y mi madre le dice que tiene un humor perruno, a lo que mi padre contesta; "que tú has heredado".

Mi madre se lamenta y vuelve a soltar la retahíla y mi padre se aleja diciendo; "yo como voy desnudo por la vida, no tengo problemas" y... vuelta a empezar.

A mí el mundo de los mayores me queda un poco lejos todavía, soy un cachorrillo—según dicen—, pero a veces tengo la sensación de ser algo mayor que ellos. Sobre todo cuando repiten constantemente las cosas, es como si no pudiesen salir de un circulo en el que ellos se han metido y siempre andan diciendo; "si ya sabía yo que esto me iba a pasar" y yo les pregunto;"¿por qué no lo has evitado?"

A lo que ellos suelen contestar; "tú no lo entiendes, son cosas de mayores". Mi madre es la que más lo dice.

Un día mi padre decidió abrir ese circulo que a él lo tenía atado y una mañana rompió con todo. Nos dijo que se iba a despedir del trabajo, que iba a buscar una casa junto a un río y el que quisiera se podía ir con él.

Os podéis imaginar la cara de mi madre, estábamos desayunando, era uno de esos días muy extraños en el que todos estábamos juntos, supongo que él debió elegir ese momento por ese motivo.

Todos nos quedamos callados como muertos, realmente era más parecido a cuando te sumerges en el agua, hay un silencio pero sabes que el agua pulula a tu alrededor, pues aquí en vez de agua pululaban millones de preguntas dentro de nuestras cabezas.

Durante un larguísimo rato que en tiempo debió ser poco pero a todos se nos hizo eterno, hubo un silencio sepulcral, yo no quería perderme ninguna expresión. Mis hermanos lamían los platos sin rechistar y no levantaban la cabeza, pero realmente los que me sorprendieron fueron mi madre y mi abuelo, el padre de mi madre.

Él, llevaba poco tiempo con nosotros, había estado algo fastidiado por culpa de una garrapata que le picó y le provocó una parálisis en la pata derecha, así que se vino a nuestra casa.

La cara de mi abuelo era de satisfacción absoluta, parecía decirle a mi padre; "¡muy bien échale cojones, todos los que yo no he tenido nunca!"

Por supuesto estaba callado como un zorro, pues él podría acabar pagando las consecuencias de la valentía de mi padre.

Mi madre no tenía expresión legible, era entre descompuesta, pensativa y vete a saber que más. Creo que mi padre jamás le había sorprendido tanto, ni cuando decidió poner solución a su fertilidad.

Allí estábamos todos, alrededor de la mesa con la cabeza en los platos y sin mediar palabra, hasta que mi madre rompió el silencio diciendo:

_Supongo que lo has meditado bien, y también supongo que si lo sueltas de esta forma es porque no hay vuelta atrás.

A lo que mi padre contestó.

_Tú lo has dicho todo.

Diciendo esto se levantó y se fue dejándonos con el bombazo de la mañana.

Una Familia De PerrosWhere stories live. Discover now