Issei el delincuente escolar

Capitulo 118: El salto

El eden aun no habia sido profanado por los dragones malignos, mientras el trio de la iglesia trata de encontar un camino para pasar al proximo paraiso, una parvada y grupos de animales escapan del lugar rompiendp toda la paz del lugar, mostrando la indicacion de su enemigo.

Otousan!-grita la castaña llena de lagrimas mientas corre al origen de ese grito con sus amigas tratando de alcanzarla.

Al acercarse notan como aquel pelinegro sostiene del cuello al padre de la castaña mientra lo deja caer en el suelo.

Otousan!-grita la catsaña llena de lagrimas e ira- dejalo ir!

Yaegaki: ...queria venir a completar mi venganza, exactamente en este lugar llamado paraiso...pienso que estoy siendo demasiado compasivo contigo-dijo sosteniendo el cuello del castaño- todo lo contrario a como fuiste con nosotros, no es verdad touji?

Yaegaki...-dijo el castaño con sangre en su boca- si solo me matas a mi, eso desvaneceria tu rencor?

Irina: otousan! como puedes decir eso?

Irina-dijo el castaño aun debil por el veneno- si puedo dar mi vida para salvar la tuya y saciar la sed de justicia de ese hombre esta bien....yaegaki-kun...no puedo negar mis pecados, pero si puedo saciar tu venganza con mi muerte solo te pido que no toques a irina...

Dime touji...tu amas a tu hija?-dijo con un tono que le puso al piel de gallina al castaño

Yaegaki?-respondio el castaño

Res...ponde...-dijo con el mismo tono

Con todo mi ser yaegaki-dijo el castaño buscando compasion dentro del joven- asi que por favor no...

Yaegaki: Eso es suficiente para mi...-dijo soltando al castaño mientra daba un par de pasos asia el trio de la iglesia- yo la amaba...ella me amaba, nos amabamos el uno al otro...nunca le hicimos daño a nadie y aun asi...aun asi buscas la compasion que nunca nos dieron...touji...tu y ese demonio bael tomaron algo que yo amaba, y ahora yo tomare algo que aman...

Yaegaki! NO!-gritaba el castaño mientras se arrastraba tratando de detenerlo pero el pelinegro se libraba dandole un par de patadas al castaño.

OTOUSAN!-grito irina

Ya tuve suficiente de esto!-grito xenovia mientras se lanzo apuntando su espada contra el pelinegro, incluso la castaña comenzaba a llenarse de ira pero el peliengro activo las 8 cabezas de dragon de su espada lanzadolas contra estas.

Xenovia lograba cortar varias de estas cabezas sin dificultad pero estas siempe lograban regenrarse con mayor rapides, mientras irina intentaba activar su espada sagrada pero esta no tenia efecto, logrando atorarse en la carne de una de las cabezas, la cual extendiendo su largo cuello, logro sacar su espada lejos del alcance de la castaña.

Irina!-gritaba el castaño en el suelo

[Porque no funciona?]-pensaba la castaña con preocupacion mientras extendia sus alas blancas para recuperar su espada esquivando cada cabeza hasta lograr tomarla y dirigirse a toda velocidad contra el pelinegro.

Esta es una de las desventajas de tu naturaleza-dijo el peliengro mientras una de las cabezas recibia el filo de la espada sagrada sin problema- ustedes los angeles no pueden molestarse, no puden cegarse por la ira, no pueden dejar que sus emociones los dominen...no pueden amar...-dijo dejando en shock a la castaña- porque mientras mas sienten...mas humanos se vuelven

Irina-san...-dijo asia preocupada al ver como las alas de la castala comenzaban a tornarse negras poco a poco, aunque la castaña intentaba no desistir

Yaegaki: Quizas eso es lo que faltaba a ustedes los angeles...un poco de humanidad...-dijo mientas 2 de las cabezas de dragon de su espada se prapraban para embestirla una a su izquierda y otra a la derecha.