Capítulo I

5.3K 283 209
                                    

Justo cuando recién Zoro estaba liberándose del capitán Morgan, con ayuda de un pequeñajo, noto prontamente que estaba en deuda con el pequeño muchacho que lo acompañaba, recordaba las palabras de este;

"Se mi nakama"

No podía negarse ciertamente después de que había sido salvado por el menor. Pero eso no quitaba su incertidumbre acerca de quién era ese niño. Le hecho una mirada por encima, era Delgado y con sus músculos marcados pero no grandes, no tenía rastro de barba, ni vellos en sus piernas ni axilas, parecía ser lampiño. Quizá por la edad. Su piel sonrosada y algo bronceada por el constante sol se veía suave, y sobre todo elástica.

Muy elástica.

Era el segundo día que estaban en el pequeño bote. Solos, llevados por la marea.

Luffy se había terminado toda la comida el solo. Claramente cuando Zoro despertó de su siesta, preguntó por la comida que les habían dado los habitantes del pueblo de donde habían salido.

- Oh, sí, ya me comí todo shishishi -. Expresó el niño con su risa tonta mientras cerraba sus ojitos ignorando como había despertado fácilmente al monstruo interior de Zoro.

- ¡¿Por qué demonios te comiste todo tu solo?! -. Exaltado agarró por el cuello de la camisa al menor para ponerlo a su altura y mirar de cerca la cara del menor, obviamente los pies del pequeño no alcanzaba a tocar el suelo del barco.

- Perdón, perdón, es que tenía mucha hambre - El menor posicionó sus pequeñas manos en los brazos musculosos que lo sostenían de esa forma amenazante, no parecía tener el más mínimo rastro de miedo o arrepentimiento en su rostro, la sangre de Zoro se caliento furiosamente.

- ¡No digas "perdón" Si no lo lamentas de verdad, imbécil! -. El menor Miró directamente en los ojos del mayor y dejó de sonreír. El agarre y la furia en el mayor se aflojaron. Sintió que algo dentro del tambaleó ante la penetrante mirada del menor, sin expresión. « ¿Se habría enojado por el trató?».

El menor subió lentamente su mano y la posó en el brazo que lo sostenía allí en el aire.

- Zoro... Sí yo me comí todo... ¿¡Qué vas a comer ahora!? -. Su rostro se había convertido en uno de angustia. El peli verde sintió un poco de alivio por esa reacción, pero luego sintió como una vena de su sien se hinchaba de la creciente rabia que tenía.

«MENUDO CAPITÁN TAN TONTO QUE ME HE CONSEGUIDO»... Se recriminó así mismo el mayor, dejando de nuevo en el suelo al niño que se había puesto a sudar de los nervios.

- Quisiera poder pescar algo para ti, Zoro, pero soy peso muerto en el mar -. Lamentó el menor mientras hacía un adorable puchero y suplicaba disculpas con su mirada.

- No te preocupes, capitán. Aguantare hasta la siguiente isla -.

- No puedo creer que de verdad no haya nada que puedas comerte -.

- Te podría comer si sigues insistiendo -. Había respondido desinteresado Zoro en un intento de hacer calmar el ambiente con una broma.

- ¿¡Te podrías comer a un humano!? ¡Genial! No sabía que era posible -. El monito exclamó impactado por esa información repentina, pues jamás imaginaria a su espadachín comiendo a un humano. - ¿Y qué se siente morder a otra persona viva? -. Intenta explorar ese tema sin pillar la intención original de Zoro, quien solo podía preguntarse «¿cómo era posible tanta inocencia en un adolescente?».

- El tipo de "comer" Del que hablaba no implica morder para tragar, Capitán. Es algo más de adultos -. Zoro se comenzaba a sentir mal por su propia broma, y queriendo evitar más conversación, se recostó en la suelo del barco.

All x LuffyWhere stories live. Discover now