Escuela para malos novios. [Sanscest] -Segunda Temporada De Intercambio-

"tsunderes"

¿Cuánto tiempo había pasado?

Pare Renick no era realmente importante.

Cómo cuando se mantenía junto a Geno mirando una película en la tv, hacían eso cada fin de semana, cuando el conseguía tiempo libre luego de su trabajo.

Este Geno le agradaba, era bastante decidido, determinado. Algo que en ciertos momentos llegaba a dar risa, más que impresionar a Renick. Al parecer, Geno no estaba interesado en establecer una amistad con el, se lo había dejado más que claro.

Sintió una mano en su cintura apegandolo más hasta el cuerpo de Geno, suspiro y se acomodó, no era del tipo de chico que realmente disfrutara de esos abrazos, pero, por Geno podría hacer una pequeña excepción sin quejarse... Demaciado.

— ¿Es necesario que andes poniendo tu mano en mi cintura todo el tiempo?— se quejó el menor alzando la mirada a Geno, el cual tenía una mirada tranquila ante todo.

— Yo a ti te veo muy cómodo.— el semi-muerto se alzó de hombros restándole importancia a esas queja mientras acariciaba lentamente la cintura del menor.

— que no me ande quejando demaciado no significa que este cómodo.—

—pues si no te gusta te largas.

— lo haría pero resulta que luego me ando enterando que andas de llorón.

— y eso que?

— que no me gusta verte así. Me preocupas demaciado no estar para ayudarte!

—...

—...

Ambos se quedaron en silencio por unos minutos, observándose mutuamente,por lo menos así fue hasta que Renick rompió el contacto visual para mirar a otro lado tapándose el rostro con su capucha, acción que se pareció sumamente adorable al mayor.

—disculpa ¿qué?

—Nada.

—ah! Vamos repiteme...

— no, ahora calla si no quieres que estarélle mi puño en tu cara, ¿Entendido?—

—pfff bien.—

terminaron nuevamente mirando la película, olvidando el objetivo principal de la discusión ya que, Geno aún mantenía su mano en la cintura del  ahora dios  y colocaba su cabeza sobre la de el.

Su relación era bastante... Rara.

Pero, en cierto punto bastante entretenida.

Por el echo de que todas sus peleas terminarán siempre en risas, pero jamás se disculpaban enrealidad.

Podrían tener un desacuerdo mínimo y armar apartó de ello la tercera guerra mundial, lanzándose cosas, chillando, gritandose, cruzándose de brazos y dándose la espalda...

Y así se mantenían ...

Hasta que alguno de los dos... O los dos estallara en risas.

Eso era la señal de que la pelea ya había concluido y que nadie estaba enojado.

No se veía la necesidad de pedir perdón. Ambos eran demaciado tercos y egoístas como para admitir un error. Por ende solo lo olvidaban.

Una de esas tantas peleas que había acabado en risas una vez más... Fue donde ambos se dieron un primer... Beso. Bueno, el primero que Renick había consentido en darle a Geno.