➸Clear Skies●Fabrizio Moretti●

2. You'll wait for clear skies

El drama en el departamento del día anterior había acabado. Ninguno de los chicos se encontraba en aquel pequeño lugar, dándome un poco de tranquilidad. Tomé el control de la televisión y me dejé caer sobre el sillón. Los programas que había eran de relleno, no lo suficiente como para entretenerme. El sonido de la puerta abrirse me asustó haciendo que saltara un poco. Al mirar al chico de cabello chinos entrar me volví a incorporar intentando ignorar su presencia, pero ya no me era tan fácil como en otras ocasiones. No podía ignorar el hecho de que Fabrizio sintiera algo por mí y nunca lo hubiera notado. ¿Tan distraída era?

—Te traje Yogurt- dijo poniendo las bolsas sobre el suelo. Sonreí y me sentí feliz por el simple hecho de un yogurt.

—Gracias Fab- me levante y camine hacia donde él se encontraba. Tomé las bolsas y las coloqué sobre la mesa. — ¿Cómo fue que empezamos a vivir juntos? - él se acercó a mí y comenzó a sacar las cosas de la bolsa.

—Nunca pensé ser yo el tonto que contara esta historia, pero recuerdo que fue una noche de Navidad. Todos nos encontrábamos lo suficientemente borrachos, y una chica de cabello castaño se le ocurrió decir: siempre están en mi departamento, deberíamos vivir juntos. -agudizó la voz al imitarme. —Nick dijo que no era mala idea y bueno, aquí estamos. -

—Somos una bella familia. - Fabrizio rodó los ojos y comenzó a reír. — ¿Qué es gracioso Moretti?

—Al parecer tu eres el padrastro que quiere acostarse con su hijastra con problemas paternales- dijo refiriéndose a Julian.

— ¡Oye! - Regañe. —Eres un idiota- le pegue en el hombro.

—Auch- se quejó y posteriormente se echó a reír.

—No pasa nada esa noche, por si querías saber- baje la mirada. Tomé la leche y la guardé en el refrigerador.

Al terminar de acomodar las cosas me senté sobre el sillón y revisé si tenía mensajes en mi Nokia. Fabrizio colocó sus manos sobre mis hombros. Mire hacia arriba y miro a donde yo me encontraba. Él posó una bella sonrisa y yo repetí su acción. Así fue por varios segundos hasta que una voz nos interrumpió.

— ¿Ya se van a besar? - voltee a donde se había escuchado esa voz.

Los demás chicos se encontraban sobre las escaleras mirando tal escena. Les mostré el dedo de en medio y comenzaron a reírse de nosotros. Más tarde por insistencias de los chicos —principalmente Albert. — salimos a un bar a varios minutos de donde vivíamos. El ambiente no era malo, pero aún no me recuperaba de la mala semana que había tenido.

— ¿Cómo fue que acepté venir a este bar? - me queje. Coloqué mi cabeza sobre el hombro de Nikolai y él bebió su cerveza.

—Son preguntas que no me dejan dormir por las noches- comentó. — Pero de alguna "extraña" manera siempre aceptas y acabas peor que nosotros- rio.

Recargé mi cabeza sobre la mesa esperando a que pasara el tiempo rápido, pero era imposible con este ruido. Levanté mi vista y pude observar a lo lejos a Fabrizio junto con una rubia de estatura pequeña. Ella coqueteaba con él por la manera en que agarraba su cabello. El lucía bastante incómodo, y no era manera de pasar un sábado por la noche.

—Iré a molestar a Fab- dije antes de levantarme. Nikolai río por debajo del tono normal y siguió con lo suyo.

Camine a donde él se encontraba y lo tome de la mano entrelazando nuestros dedos. El me miró sorprendido y puso una sonrisa nerviosa.

— ¿Quién es ella amor? - dije remarcando la última palabra. La mire y alce una ceja. La chica rodó los ojos y cruzó sus brazos, al parecer le había arruinado su noche.

—Gemma, la acabo de conocer- el aclaró su garganta y dio un trago a su cerveza.

—Hola, perdón, te voy a robar a mi chico, quiero bailar un rato con él, espero que no nos volvamos a encontrar..- lo jale a la pista del baile, alejándose de ella.

La música era realmente buena. Lo tomé de la mano y lo hacía moverse de un lado a otro, las risas eran abundantes, al igual que los movimientos. Me sentía cómoda con su presencia y más porque no se cerraba a no hacer nada. Siempre Fabrizio alegraba mis noches en los bares con sus locuras.

—¿No volverla a ver?- preguntó mientras se movía de un lado a otro. Me sonrojé por lo que había dicho, dije las cosas sin pensar.

—Agradece que te quite a esa chica de ti- di una vuelta y me coloque a lado de él. — Los amigos hacen eso, Fab.

— Cualquier persona hubiera pensado que estabas celosa, pero tratándose de ti, lo dudo mucho. - Sólo mostré una sonrisa y seguí con lo mío. Quizás tenía un poco de razón.

Él me tomó de la cintura haciendo que nuestros cuerpos quedarán más cerca. Y hay algo que tenía que admitir, Moretti sí sabía que momentos aprovechar. La canción acabó y nos alejamos. Lo miré a los ojos y pude notar un brillo en ellos. Volvimos a nuestra mesa y nos sentamos con los chicos.

—Después de lo que te conté te pusiste viva con Fabrizio- me susurro Julian al oído.

—Deja de molestar Casablancas- ordene. El morocho río y dio un trago a su cerveza.

—Pero solo estoy diciendo verdades. Aprendes muy rápido de todos nosotros.

Unas horas más tarde salí del bar para poder fumar un buen cigarro sin tener que oler aquel horrible olor, y es que era raro que me encantara tanto fumarlo, pero el simplemente olerlo no era lo mío. Al estar afuera sentí el frío de la ciudad sobre mis piernas, creo que fue mala idea traer falda en una noche de junio. Saqué la cajetilla de cigarros de mi chaqueta y coloque uno sobre mis labios. Pase el mechero y aspire aquel tóxico. Miré la luna y saqué el humo mientras negaba todo. Me senté en la acera y seguí con aquel cigarro hasta acabar con él.

— ¿Estás bien? - mire hacia arriba topándome con un Fabrizio borracho. Di toquecitos al piso como referencia a que se sentara a mi lado. Él obedeció. — ¿Qué tan aburrida ha sido tu noche?

—No, para nada- suspire. —Sólo pienso en muchas cosas a la vez sin razón alguna.

— ¿Quieres hablar de eso? - mostró una sonrisa y acomodo su chaqueta.

— ¿Quieres un cigarro? - le extendí la cajetilla.

—que buena forma para decirme que cierre la boca- comencé a reír por lo que había dicho. Era gracioso cuando se lo proponía.

—Cállate Moretti y fuma el cigarrillo - dije colocando el cigarro en sus labios. Pase el mechero y aspiro. Quitó el cigarro de sus labios y lo colocó en sus dedos. — ¿Mejor?

—Esto me recuerda a cuando nos conocimos- comentó. —Estaba Let's Groove de earth, Wind & fire- recordé aquella noche a la perfección, los chicos no me dejaron sola y se unieron a mi baile en una horrible fiesta. — y tú no dejabas de moverte de un lado a otro, quizás eras la única que bailaba en aquella fiesta. - aspiró de nuevo el cigarro y siguió con la plática. — un vestido rojo y unos converse negros usabas aquella noche, lo recuerdo perfectamente.

—La fiesta era un desastre y quería un poco de diversión- baje la mirada un poco apenada.

— Recuerdo a Julian borracho diciéndome que vio a una Ángel en la pista de baile- río. — Cómo el suele ser tímido, me acerque a ti y me puse a bailar contigo, tenías una gran sonrisa, y fue así como los chicos siguieron lo que hacía.

—Más tarde salí un poco arrepentida por lo que había hecho, pero estaba segura de que había hecho buenos amigos.

—te seguí y te encontré sentada en la acera. Fue ahí cuando supe tu nombre y me ofreciste cigarrillos, fue una buena noche.

—Me alegro de que me hayas seguido, no sé qué sería sin ustedes. - dije honesta.

—No sé qué haríamos sin ti Lena...

Dirtyharryy