Capítulo 1

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Lilah

-Estúpida- es lo que me dice la que se hace llamar mi "madre" después de darme una de sus famosas palizas.

Cuando estoy segura de que ya se fue me levanto sosteniendo mi costado.

Empiezo a subir tomándome del barandal hacia mi habitación,osea,el ático.

A mis 17 años no pensaba que se podia sufrir de esta manera,pero me equivoque.

Todo es culpa de mi padre ya que nos abandono a mi madre y a mi.

Yo solo tenía 6 años.

Mi madre no soportaba el dolor así que recurrió al alcohol,cada
vez que se emborrachaba me golpeaba y me decía que era culpa mía que mi padre se fuera.

He tenido que vivir así desde entonces.

Ya arriba,después de muchos gemidos de dolor,logré llegar a mi habitación.

Me parece frente al espejo y me levanté la camisa,puedo notar que abajo de ella hay un gran moretón que va a tonalidad verde.

Mi cara también sale perdiendo,un gran moretón en mi mejilla y el labio partido.

Me quite toda mi ropa y me arrastró hasta el baño,me metí a la ducha para desestresar los músculos después de recibir esa paliza.

15 minutos después …

Estoy en la cama tratando de hacer que el moretón de mi costado mejore aunque sea un poco.

Esto duele como los mil demonios,sin embargo no derrame ni una sola lágrima.

Creo que se acabaron hace mucho tiempo.

Cuando termine de untarme la pomada me pare como pude y caminé hacia la puerta para colocarle seguro.

Vuelvo a la cama y enciendo el pequeño televisor que tengo.

Me pongo a pasar los canales hasta detenerme en las noticias,ahí habla sobre unas personas que adoptan un comportamiento raro y empiezan a morder gente,pero no me preocupe porque eso solo pasa en un país que no está cerca,Honduras.

Al terminar la noticia siento mis párpados me pesan,así que apague la televisión y coloque el mando en la mesita.

Me acomodé bien en la cama,a modo de no lastimarme más mis heridas.

Apague la lámpara que tengo al lado.

Poso mi vista en el techo un momento imaginando como hubiera sido mi vida si mi padre nunca nos hubiera abandonado,mi madre no hubiera recurrido al alcohol y yo hubiera tenido una infancia normal.

Dejo de pensar en eso y dirijo mi vista hacia el reloj que está en mi mesa.

Es ya medianoche.

Cierro mis ojos y caigo en un profundo sueño.

Al día siguiente…

Me desperté por el sonido de mi alarma.

No pierdo tiempo y me levanto.

Camino hacia el baño y hago mis necesidades.

Al terminar salgo y me encaminó hacia mi armario,tomo un suéter gris holgado con algunas rayas blancas,jeans negros y mis Adidas blancas.

Pongo la ropa en mi cama,para después quitarme mi pijama y ingresar al baño para darme una ducha.

Me doy una ducha de 10 minuto,al salir estoy más despierta y mi cuerpo está más relajado.

Los golpes ya no me duelen,por ahora, creo que mi cuerpo ya se acostumbró.

Me visto,así que luego empiezo a ponerme un poco de base en el moretón de mi mejilla,el labio partido no lo cubro,el moretón de mi costado está mejor y mi vida sigue igual.

Cuando estoy lista,tomo mi mochila y bajo.

Cuando estoy abajo notó que mi madre no está despierta, supongo que por la resaca.

Así que voy a la cocina y abro la nevera para ver si hay algo de comer pero no hay nada.

Solo alcohol.

Decido que hoy no desayunare,mi apetito no es mejor.

Tomo mis llaves y abro la puerta principal.

Pero en ella hay algo que llama mi atención un papel que dice"Desalojo".

Carajo.

Tendré que buscar trabajo para pagar el alquiler de la casa.

Alejo esos pensamientos mientras camino a la escuela.

Cuando llego todos me miran como un bicho raro.

No tengo amigos y eso no me molesta,ya me acostumbré a estar sola.

Antes de llegar a mi salón una chica de cabellera pelirroja se interpone en mi camino.

Samantha,la cabeza hueca del lugar.

-Hola, idiota- me dice acompañada de sus perras calderas por detrás.

La ingnoro y sigo caminando.

Pero ella no se detiene y me sigue.

-Te estoy hablando- me dice,así que paro en seco y me doy la vuelta.

-No,tú no me hablabas a mi,tú dijiste "hola idiota" y yo no soy idiota como tus perras falderas-le digo.

No hablo con nadie,pero eso no significa que tenga miedo de enfrentar a alguien sin cerebro.

-Maldita hija de pu...- no la dejo terminar.

-Si correcto hija de mi madre,ahora sí me disculpas yo sí tengo un cerebro que aprovechar y ya llego tarde a clases, adiós-le digo dejándola con las palabras en la boca.

Cuando entró a él salón el profesor me mira con cara de pocos amigos por llegar un poco tarde.

Dejo atrás las miradas acusadores de mi profesor y "compañeros" y voy al fondo de la clase.

Cuando me siento,el profesor empieza con la clase y yo saco mi libreta con lápiz.

Dos horas después…

Ya es hora de almorzar,por fin, no haber desayunado está haciendo que me muera de hambre.

Voy a la fila y tomo una bandeja para después formarme junto con los otros.

Cuando es mi turno pido una hamburguesa y un zumo de naranja.

Cuando me dan lo que pedí,voy y busco una mesa vacía,cuando la encuentro voy y tomo asiento.

Saco mis audífonos y empiezo a comer junto con la voz de Queen.

Hasta que algo me interrumpe.

Mejor dicho alguien.

Samantha.

Me quite los audífonos y dirijo mi mirada a Samantha.

-¿Que quieres?-le pregunto de mala gana, esta chica no sabe cuándo parar.

-Solo decirte que no soporto que me falten al respeto ni mucho menos una perra como tú-me dice sonriendo con aires de superioridad.

Estoy dispuesta a irme cuando dice algo que hace que mi sangre hierva de enojo.

Sobrevivientes ||COMPLETADA✔️✔️||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora