Invisible saruhiko

Invisible-cap 5

Al principio fue... bueno, AUN ES molesto.
Las miradas de los demás en septer 4 son tremendadente irritantes. Es como si vieran a un fantasma!
No morí, ¿que pasa con eso? La vida sigue, dejen de desperdiciar tiempo y terminen de trabajar.
Odio lo dramáticos que son y ni mencionar su actitud, me tratan como si de un momento a otro me tuvieran que encerrar en el hospital otra vez!
Lo peor es que el capitán solo se ríe!
¿¡Que tiene de gracioso!?

Los ignoro por que ya me canse, porque no importa que haga, ni cuantas señales de que me irritan les mande, siguen pegados como lapas!

Siento que moriré, oh los arrojare del ultimo piso... Y aun no consigo mis lentes!

—Fushimi-kun deberías dejar de trabajar, y descansar.
—Ya descanse mucho en el hospital capitán.
—Seguro, pero prácticamente pegaste tu cara a la computadora para ver.
—¿Eso era lo gracioso? —Dije entre susurros.
—¿Dijiste algo?.
—Esto es muy fastidioso ¿me dejara trabajar?.
—Esta bien, esta bien.

—Dōmyōji
—¿Si Fushimi-san? —.dice acercandose con una gran sonrrisa.
—Corrigelo
—Si Fushimi-san —.y se fue como gato mojado con el informe en mano.

—Los negros están bien
—Fushimi-kun, estos lentes te quedan mejor
¿Acaso uno de los hobitts del capitán era molestarlo?,¿como es que llego a esta situación?

Justo cuando doblaba la esquina el capitán ya estaba esperandolo ahí. Con una horrible sonrrisa y pensamientos de molestarlo, si le preguntaban a el.

Munakata ignorando los pensamientos, que seguro tenia su segundo al mando, su sonrrisa solo creció mas.
—Justo a tiempo Fushimi-kun, ¿no habrás pensado dejarme atrás cierto?

Era justo lo que planeaba!!!

—Usted esta ocupado, ¿no debería hacer su trabajo en lugar de estar aquí?
—Yo siempre cumplo mis promesas

Se arrepentía de no haber ido por los lentes mientras ese tipo estaba ocupado

—No, siempre eh usado negros –.dijo con su paciencia al límite y lineas negras.
—Pruebate estos
Esto no tiene fin
—Esta bien, esos
—Nos llevaremos estos –.dijo Munakata al que atiende la tienda
Después de elejir sus lentes nuevos, que eran azules... Corrección, después de que el capitán eligió sus lentes; no solo no lo dejo irse a su habitación sino que lo arrastró a un día de compras e incluso lo hizo cargar algunas. Eran pluzes y tés, entre otras cosas. Luego lo arrastro a un restaurante, y ahí termino el despiadado dia.

Y por su puesto jamas le diría al capitán que se relajo un poco, o ese loco matiatico de los pluzes lo arrastraria por mas lugares otros días.

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Gracias por segir mi historia, eh estado algo ocupada
Y aunque no se como continuare esta, publicare oneshos sobre canciones.
Bye bye~