El día que me sentí tan groupie

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Sonó el despertador y con solo 4 horas de sueño después del bailetón del sábado llegó ese gran día, mi primera clase de escritura creativa con la Calata Culta, me sentía ansioso ya que conocería a una de mis escritoras favoritas y contemporáneas, me preguntaba cómo será la chica detrás del blog que leo con tanta minuciosidad y concentración, hacía preguntas en mi mente como:

¿Tendrá un súper ego? ¿Tendrá una especie de "ki" como el que tienen los sayayin? ¿Me saludará con un cálido "holi"? ¿Será igual que en sus fotos?

Dejé de hacerme preguntas y bajé hacia el primer piso a desayunar un pan con queso y unas hierbas que me vendió el casero; seguía ansioso porque ya quería estar en Surco donde era mi clase y yo seguía en Pueblo Libre, busqué en el Maps la ruta que me dirigiría allá.

Agarré mi mochila, saqué unos condones que me siguen a todos lados, y que por cierto no uso hace mucho, creo que porque son de mala marca; puse un cuaderno adentro, mi celular en mi bolsillo, me miré en el espejo y salí de mi casa con toda la actitud con dirección a Surco, tomé un carro hasta el Jockey; por cierto la clase se dicta en el culo del mundo pero eso no importaba con tal de conocer a Leslie.

Una vez en el carro intenté dormir pero no pude, hacía demasiado calor y era domingo por lo que llegué súper rápido, me bajé en la Universidad de Lima, por cierto era día de examen de ingreso, había tantos postulantes y padres risueños y preocupados porque su hijo ingrese a esa universidad. Algunos padres tenían cara de no tenerles fe a sus hijos. Me reía por dentro ya que el examen de ingreso no es tan complicado, para alguien que tuvo como primera enamorada un libro de matemáticas era normal, comencé a caminar mientras veía cómo las academias y grupos de estudio ofrecen a los padres sus servicios para sus hijos. Traté de encontrar la Vallejo, a ver si me regalaba una beca pero no estaba, miré mi reloj, ya era un poco tarde, seguí mi ruta, tenía que llegar a Buen Retiro, donde era mi clase y donde se encontraba la persona detrás de la Calata Culta.

Paré un taxi - ¿A dónde? - Al Buen Retiro - 6 soles - 5 lucas, primo - Vao.

Llegué a la primera cuadra del Buen Retiro, caminé buscando el local de Machucabotones, me sudaban las manos, estaba con demasiada expectativa, había un local desbordando en gente, todos buena vibra, dije en mi mente "Cuánta acogida, esto pinta demasiado bueno" hasta que me di cuenta de que era una iglesia, seguí buscando en la misma cuadra el local mientras sonreía por lo que me había pasado.

Llegué al dichoso local, no sabía si entrar o esperar a alguien para entrar y pasar piola, se me acercó el "tío" que cuida la puerta, que me dijo que todavía no llegaba nadie pero que era en el "3" y fui directo al salón donde está el banner de Machucabotones.
Estaba tan emocionado por conocer a la persona detrás del blog "la Calata Culta" que me había olvidado que hay un segundo profe, que por cierto es súper buena onda, de ahí me enteré que es el Calato Culto.

Me recibió el Calato Culto y otro alumno (en esas situaciones en las que estoy algo ansioso le doy gracias a los libros de liderazgo, seducción y persuasión y a mi experiencia de manejo de grupos en Fuxion), pero no estaba Leslie...

Mi corazón latía más rápido y mis ojos la buscaban, sonó la puerta pero era una alumna -snif snif por dentro- hasta que apareció la persona detrás de la Calata Culta y bueno, sí, sí tenía un aura, y una hermosa cabellera roja...

Las crónicas de ChesterWhere stories live. Discover now