Ryuumiko._ Gracias... espero no haberte despertado _ hablo con una sonrisa, luego se giro a ver a su nueva acompañante.

Yona._ No me has despertado... tuve una pesadilla hace poco y no logro volver a dormir... _ explicó en voz baja mientras se abrazaba así misma.

Ryuumiko._ Te entiendo perfectamente Yona... _ soltó un suspiro _  tampoco logró dormir bien y mucho menos ahora... _  dijo las cuatro últimas pslabras, en innentendibles susurros.

Yona._ ¿Que? _.

Ryuumiko._ Nada... no te preocupes son cosas mías _ dijo en tono amable.

Yona._ ¿Ryuumi~san... ? _ pregunto la pelirroja.

Ryuumiko._  ¿Si? _ pregunto la ojivioleta tranquilamente.

Yona._ ¿Podría contarme la historia de Hiryuu y la joven? Kaya me contó que tu sabias mejor  la historia que ella _ pidió esperanzada y ansiosa para proseguir con la misteriosa historia del Rey Hiryuu.

Ryuumiko._ Así que Kaya te la contó... ¿Hasta donde sabes sobre la historia? _ pregunto_ Me imagino que ella solo te contó una parte, porque sino no me pedirías que te la contará _ dijo sin expresión alguna la pelicoral, mientras que en sus adentros pensaba en regañar a lo ojirosa por su habitual "soltadura de lengua" que no pensaba que la metería en problemas complicados.

Yona._ Sólo me contó hasta que la muchacha y el rey Hiryuu se despidieron después de haberse conocido _ hablo la pelirroja con entusiasmo en su voz.

Ryuumiko._ Bueno... escucha con atención _ soltó un suspiro y comenzo a relatar la historia.

Despues de que la bella joven se haya visto con aquel hombre, sin saber que era un dios, no tuvo razones para no volver a ver a ese carismático pelirrojo y que queria conocer y hacerse amigos; en cierta forma le llamaba la atención y lo estimaba de sobremanera.

Harumi regreso a aquel lugar con la escusa de ir a dar un paseo; sin embargo al entrar y no encontrar aquel hombre de ojos morados se decepcionó, pero aquella joven de cabellos lilas no era de las que se rendían, así que juro que regresaría nuevamente hasta ver de nuevo a su amigo Hiryuu.

Con una sonrisa la ojirosa se retiro de aquel celestial jardín ante la atenta mirada del dragón rojo desde los cielos, que la observaba con gran curiosidad y anhelo en conocer cada detalle de esa peculiar humana.

Pasaron días y luego semanas, ya estaba por cumplir un mes pero no se lograba encontrar a ese misterioso hombre, Harumi al no haber podido ver a Hiryuu por un solo momento, ella entristecio, estaba por rendirse y no volver a ese lugar; pero atrás de la pelilila sin que ella lo notará, se encontraba el Dios dragón rojo en forma humana haciendo acto de presencia y empezo a  hacer dulces caricias la brillante y lila cabellera de la ojirosa.

Harumi al sentir gentiles caricias en su cabello se giro para ver el origen de tan dulce acto.

La pelilila al ver al causante sus ojos se iluminaron y una hermosa sonrisa llegó a su rostro.

Harumi._ Es bueno volver a verte Hiryuu... _  hablo la pelila con una dulce y cálida voz.

Hiryuu._ Igualmente Harumi _ dijo para tomar la mano de la joven y besar la palma dulcemente, acto que ruborizó a la pelilila.

Sangre de DragonWhere stories live. Discover now