- ¡Valeska! -Jughead chasqueo por quinta vez, sus dedos frente a ella.- Deberias ir a casa.
- ¿Ellos estan en peligro? -Hablo en referencia a los Ghoulies.-
Jughead paso saliva en seco, y miro a otro lado.
- ¿Desde cuando te importa lo que pase con ellos? -Pregunto Jughead.-
Valeska le miro sin entender, e hizo una señal para que este prosiguiera.
- ¿Habías notado alguna vez como los ojos de Khea se iluminaban al ver a la pelirroja? -Cuestiono Jughead.-
Valeska lo miro con los ojos abiertos de par en par, sin ser capaz de decir algo.
- Sabes, si alguno de mis amigos estuviera fuertemente enamorado de alguien, yo no se... pero me hago el ciego, y voy por otro rumbo. -Comento este.- ¿Sabes cuantas veces aquella castaña mostró lealtad a ti?
Valeska se quedo pensando y bajo la cabeza.
- Oh... ¿Que ahi de Malachai? El te dio una familia, te cuida la espalda, aunque tu no lo veas... ¿Y que haces tú? -Hablo con sarna.- Estas aqui... con mi padre, con las serpientes.
El silencio abundo, Valeska parecia que iba a romperse a llorar en cualquier momento, pero Jughead no dejaba de sonreir.
- Yo creia que los Ghoulies no eran más que mierda... pero aquella pelea en el Wyrm, me demostro que incluso son más fieles que las serpientes... y vamos que te lo dice alguien que pertenece a ellos, varias serpientes huyeron, pero ningún Ghoulie se dio por vencido, por más herido que estuviese. --Explicó.-
A la morena se le salieron las primeras lagrimas.
- Antes creia que eras mucho para pertenecer a algo tan bajo... ahora pienso, que eres nada, comparado a la maravilla de personas que te rodean.
Y sin más, se levanto.
¿A que venia todo esto?
- Por cierto, si la vez... dile que gordo Jones dice, que tu eres la mala influencia para ella.
Y se fue.
Dejándola confundida.
¿Ella es la mala?
¿Acaso Jughead y Khea habían hablado más veces de las que ella habia visto?
El echo de recordarle que ni su hermana le aguantaba, y Malachai le pidio que se mantuviera alejada, comenzo a enojarle.
Algo estaba apoderándose de ella.
El odio...
Comenzaba a odiar, tanto a personas que se lo merecian...
Como a...
Odiar a personas inocentes.