—Temo hacer alguna pregunta que te moleste. —Inició diciendo—. El punto es que no voy a estar tranquilo hasta saberlo, soy así, un niño grande con todo grande pero pensamientos pubertos, así que espero una respuesta, más bien la exijo. ¿Tienes algo con él?

   Aunque Scarlett quería reír por la forma en que estaba hablando, lo cierto es que no quería discutir más.

—No —respondió con sinceridad.

—¿Por qué estabas con él? —preguntó—. ¿Por qué ibas toda sonrisitas y agarraditos del brazo?

—¿Estás celoso? —preguntó al escuchar la acidez con la que hablaba.

—¿Celoso yo de un niñato que es a ojos de todos es un mocoso de pelos horribles, rostro horrible y cuerpo más escuálido que el de un indigente? Pues sí, estoy celoso, muy celosos de hecho —confesó—. Me molesta que te agarre, que te abrace, incluso que te mire; es más me molesta que mire mi origami.

   Recordó lo que ella le había dicho sobre su trasero y el origami.

—No ve mi trasero —dijo a punto de reír—. Y si lo ve no me doy cuenta está claro y no debería importar.

—¡Ja! —exclamó—. ¿Entonces daría igual si una mujer está mirando mi trasero?

—Pueden ver pero no tocar —dijo ella tratando de calmarlo—. En fin, ¿cuándo está discusión se volvió sobre quién tiene el trasero con más admiradores? Se trata de lo que pasa entre nosotros.

—El nosotros incluye los traseros y el mío es tuyo y el tuyo es mío —dijo sin más—. No me gusta que te vea, no me gusta que pase tiempo contigo, fue tu ex novio.

—¿Entonces tú no ves a ninguna ex novia? —preguntó mientras Hurs cerraba la boca de golpe—. Quiero pensar que si pretendes prohibir que hable con él es porque tú pones el ejemplo.

   Se quedó callado pensando en sus palabras, después de todo él hablaba con Polette desde hacía meses aunque no tenía relevancia cuando no eran coqueteos pero sí hablaba con Melina todo el tiempo.

—No —dijo tratando de sonar seguro—. Una ex es eso, ex. No deberíamos tener relación alguna.

   Scarlett enarcó una ceja y guardó silencio preguntándose a sí misma si debía creerle.

—Tal vez —dijo con seguridad—. Pero tú y yo no somos nada así que no debía importar. Lo dejaste claro la última vez así que deja de hacer un drama. No te entiendo y creo que tú tampoco haces.

   Hurs dio un bufido pero concordó en algo, no quería una relación con ella pero tampoco le gustaba verla con alguien más y en algo tenía razón, ni siquiera se entendía a sí mismo.

   Se acomodó la ropa y la abrazó.

—Creo que no estoy listo para una relación, pero tampoco para algo en lo que tenga que compartir. —Se sinceró—. No puedo ofrecerte una estabilidad emocional, al menos no una relación pero tampoco quiero verte con otro y tener que aguantarme.

—Entonces qué propones —dijo ella.

—Una relación como la que teníamos pero algo con exclusividad —dijo aunque sabía que entre eso y el noviazgo solo había una delgada línea.

—Vas a contarme las cosas —dijo y él dio un suspiro—. Si no quieres no lo hagas pero quiero que quede en claro todo y después no tengamos que estar en conflicto.

—Tuve un problema personal relacionado con mi familia —dijo contando a medias lo que había pasado—. No te ignoré por gusto, solo no quería ver a nadie, es todo y tienes razón no me costaba nada avisarte pero en mi defensa diré que no tenía humor para nada.

DOMAR A LA BESTIA (EL CLUB DE LOS DESTERRADOS 2)Where stories live. Discover now