-¿Habéis visto la cara de ese patán idiota?

-¡Cállate Monoma, le podría pasar a cualquiera! -dijo Mina en tono cortante.

-Oh, ¿estás enamorada de Kouda? -dijo Kendo, una chica de Slytherin.-Nunca pensé que te podían gustar los llorones Ashido.

-¡Mirad! -dijo Monoma-. Es esa cosa estúpida que tenía hoy en el desayuno.

En su mano mostró la recordadora que la abuela de Koji le había mandado y que al parecer se había caído al suelo.

-Dame eso Monoma, no es tuyo-dijo Eijirou amablemente. No quería meterse en problemas así que intentó solucionarlo pacíficamente.

-Creo que no. Voy a dejarla en algún sitio para que la busque...

-¡Tráela aquí! -Gritó Eijirou, pero Monoma se subió en su escoba y comenzó a volar agitando la recordadora en su mano.

-¡Ven si te atreves Kirishima!

-¡No lo hagas, lo hace para molestarte! -Le dijo Mina-.El profesor Reiji dijo que no nos moviéramos. Te van a regañar si te descubren.

Pero Eijirou había perdido la paciencia. Se montó en su escoba y echó a volar persiguiendo a Monoma. Parecía que llevaba haciéndolo toda la vida. Se inclinó para coger velocidad y Monoma lo miró asombrado sin creer que fuese su primera vez en una escoba.

-Te lo digo otra vez, dámela.

Monoma estaba preocupado, pero no lo mostró.

-¡No, atrápala si puedes! -gritó. Tiró la bola de cristal y bajó a tierra donde sus amigos lo esperaban.

Eijirou volvió a inclinarse ganando velocidad en la caída, persiguiendo a la bola. Justo cuando se iba a estrellar la atrapó a una velocidad increíble y dio una pirueta. Después fue donde todos sus compañeros estaban aplaudiéndole. Pero de lo que no se dio cuenta es de que alguien le había visto.

-¡EIJIROU KIRISHIMA!

Todos dejaron de vitorearle. Nemuri Kayama iba hacia ellos corriendo.

-Ven conmigo.

Sus compañeros de Gryffindor reclamaron, pero ella no les hizo caso y se llevó al chico.

Mientras que caminaba detrás de la profesora devuelta al castillo, vio la cara triunfal de Monoma y de sus amigos, pero enseguida Katsuki les dio un puñetazo haciendo que se callaran y lo miraran con terror por la mirada de odio que les dirigía. Eso le alegró, pero sabía lo que vendría ahora. Le expulsarían y tendría que volver con su familia. Y no quería pensar cómo reaccionarían los Midoriya cuando lo vieran otra vez en su casa y a mitad de curso.

Caminaron hasta llegar a un aula, donde la profesora lo detuvo. Llamó a la puerta y se asomó.

-Discúlpeme, profesor Bubaigawara. ¿Puedo llevarme a Nejire un momento?

De la clase salió una chica de quinto de aspecto relajado y largo cabello azul.

-Seguidme los dos -dijo la profesora Kayama.

Volvieron por donde habían venido y cuando llegaron al despacho de la profesora los hizo entrar. Los dos chicos se sentaron en las dos sillas frente al escritorio mientras que la profesora se colocaba detrás de él.

-Kirishima, ella es Nejire Hado. Nejire, te he encontrado un buscador.

La expresión de intriga de Nejire se convirtió en una de alegría.

-¿Está segura, profesora?

-Totalmente. Nunca vi nada parecido. ¿Ésta ha sido tu primera vez con la escoba Kirishima?

Eijirou Kirishima y la Piedra FilosofalWhere stories live. Discover now