La primera vez que nos habíamos visto fue rara y linda, eramos chicos y no entendimos ese mundo del amor.
Claro que nunca me arrepiento de todo lo que viví con el y de lo que sigo viviendo, por que a pesar de nuestras idas y vueltas, la vida nos cruza siempre en algún camino.
Era algo único, algo que no se olvida, hoy me pongo a recordar y esa sensación de saber que siempre estuvo hay, que nunca se fue, que nunca me olvido.
Estar con el me hacía olvidar el resto, sin importar que después cada cual volvía a sus correspondidas clases.
pero como siempre algo termina...
*la historia seguirá en la próxima parte*
