MI VOLUNTAD INTERIOR - La Muerte Inmortal (Año 1521)

Conspiración Mitológica.

—¡Señor!, tranquilizese por favor.—decían los soldados quienes se quedaron aterrados por la brutalidad de su jefe. —(Mierda ya está pasando...)—Pensaba Cortés, mientras sentía como una especie de odio, rencor, y demás negatividad se empezaban a apoderar de su cuerpo, creando una furia indescriptible que poco a poco iba creciendo. —No se lo que buscaaaahhs... ¡¡ya te lo dijeeehh!!... —dijo Moctezuma ahogándose, y quedándose sin fuerzas para hablar. —¡¡¡AAAHHHHH!!! —Cortés dio un grito de furia aterrador, y sujetando fuertemente su espada, de un solo tajo partió a la mitad a uno de sus hombres con todo y su armadura de metal.

—¡¡¡C-Capitan!!!—gritó el soldado restante mientras veía a su compañero partido en 2, y a Cortés cubierto de sangre con un rostro de terror, y que ahora lo miraba a él. —¡¡¡AAAHHHH!!!—el soldado restante se echó a correr a toda velocidad llorando del horror. —¡MUERE!—dijo cortes, y acto seguido, lanzó su espada llena de sangre directo hacia el soldado que intentaba salir del templo mayor. Unos segundos después, la espada atravesó el casco y el cráneo del pobre hombre, e incluso perforó parte de la pared de roca con la que estaba construido el templo mayor.

—Tú... N-no puedo creer... que por un momento... pensé que e-eras, Quetzalcoatl, y que nos llenarías de dicha—dijo Moctezuma, mientras empezaba a perder la conciencia debido a la falta de aire. —¿De verdad quieres a tu pueblo? ¿a tu imperio?. Viste lo que le hice a estos 2 inútiles. Si no me das lo que quiero... Destruiré todo y a todos en este lugar —dijo Cortés mientras mostraba una mirada terrorífica. —N-no puedo... ¡¡No puedo!!... —dijo Moctezuma, mientras estaba en sus últimos segundos consciente. —Dijiste que no temes morir porque ya has perdido todo. Pero si por tu ego muere toda tu gente, perderás también tu dignidad y tu respeto, y serás recordado como el gobernante que sacrifico el imperio mas grande del mundo por su ¡¡¡IMBÉCIL ORGULLO!!! —dijo fuertemente Cortés, mientras poco a poco su furia iba aumentando cada vez mas y mas, y estando a punto de atravesar el cuello de Moctezuma con sus dedos...—¡¡¡¡DE ACUERDO!!!! —Grito Moctezuma con su ultimo aliento. —Perfecto —dijo Cortés soltando inmediatamente a Moctezuma tras oír que aceptó.

—E-el tesoro... Está... Tras esa pared... —dijo Moctezuma, señalando una pared con unas cortinas color verde tejidas con plumas, que se encontraban tras su trono. —Mas te vale que sea cierto —dijo Cortés mientras se acercaba a aquella pared. Al tenerla enfrente, mostró una gran sonrisa, y acto seguido, comenzó a quitarse su armadura. —¿ahh?...—dijo Moctezuma al ver a Cortés sin su armadura, ya que pasó algo sorprendente. —Tu... Tu pie... ¡¡¡NO ESTÁ!!! —dijo Moctezuma impactado y aterrorizado, puesto que ese hombre no se sostenía sobre sus 2 piernas, ¡¡¡ese hombre flotaba!! —Todo tiene sentido... tu no eres Quetzalcoatl, ¡¡¡tu eres!!!...dijo Moctezuma impactado y consciente de la verdad —Sabes, hace unos momentos dijiste que no sabías como es que me confundiste con Quetzalcoatl. Tienes toda la razón. Porque yo soy su opuesto...

Tezcatlipoca.

—Tras oír esas palabras, la sangre de Moctezuma se heló por completo, haciendo que este quedará en shock. —Muy bien, entonces hagamos esto —dijo Cortés, poniendo la palma de su mano sobre aquella maciza pared, y acto seguido, una especie de humo negro empezó a surgir de su palma, y este comenzó a recubrir toda la pared, hasta que, el humo simplemente se deshizo con el viento, y con el, también la pared...

—Perfecto, ahí estás —dijo Cortés, al desvelar lo que se encontraba tras aquella pared. —Ahora por fin podré obtener mi máximo poder, y me desharé de este cuerpo asqueroso.