Nova de la esperanza.

Capitulo 1.

"A veces no es importante la persona que te busca, sino la que detiene que el corazón se marchite"

Me encontraba en la habitación de ambos niños sosteniendo un libro entre mis manos, era la novena vez que se los leía, pero ¿Cómo no hacerlo? Ellos conseguían su motivación a seguir mejorando cada día gracias a esto.
Cada noche es lo mismo, ambos acostados en sus camas, esperando con ansias a la parte donde el brujo de la esperanza aparece para detener el caos que formó el de la desesperación; Debo admitir que odiaba totalmente esa parte.

Un suspiro largue con molestia, ya había llegado a la parte donde este Ser aparecía y "salvaba el día". Es una molestia como lo representan, bueno, es una verdadera molestia el como habían escrito con tal odio hacia el brujo de la desesperanza. Él tenía sus razones para ser de esa detestable forma, incluso tuvo sus razones para querer desaparecer el mundo entero, pero ¡Nadie nunca lo escucho!, ¡Nadie estuvo ahí para saber cuál era su problema!
Tome el libro con fuerza, clavando mis uñas en la tapa de este mismo. Podía notarse como una irritación se hacía presente, incluso era tonto pensar que siempre ocurría lo mismo.
Cerré mis parpados con fuerzas, deseando que aquella historia nunca hubiera sido escrita, menos con tantas mentiras, aun así, volví a abrirlos al sentir como alguien me quitaba el libro de mis manos con suavidad y me comenzaba a rodear con sus brazos alrededor de mi cuello, dándome así un cálido abrazo.
-No tienes por qué estar triste, ¡Yo sé que él también tuvo un final feliz!
No sabía porque aquellas palabras trajeron tanta felicidad a mi corazón, ni porque lágrimas surgieron en mis ojos, pero no podía negar que estaba feliz con aquellas palabras que el pequeño de cabellos grises había soltado.
-De seguro lo habrá tenido.
Respondí con ligera inseguridad.
Resulta difícil hablar sobre "Él", más teniendo en cuenta que los hechos no fueron de ese modo; Mi memoria se encuentra en fragmentos, pero aun así puedo recordar que los hechos fueron totalmente diferentes a los contados.
El libro dice "Entonces el muchacho de cabellos negros le extiendo al de pelirrojos la mano, uniendo sus fuerzas y volviéndose un mismo Ser. De esa forma fue que la estabilidad fue atraída al mundo, de esa forma fue que todo volvió a la normalidad". Pero la verdadera historia cuenta otra cosa.
La verdadera historia relata sobre como la esperanza fue derrotada y como la desesperanza reino por mucho tiempo.
"Sin saber que hacer la esperanza, decidió desvainar su brillante y justiciera espada como último recurso. De esa forma creyó que así pararía el caos que había sido atraído al mundo por su hermano; No lo consiguió y murió.
Desde entonces el mundo en silencio quedo, admirando como la destrucción no podía ser frenada."
Después de leerles el falso final feliz, decidí arroparlos. Me despedí con cariñosas palabras.
-Espero que tengan dulces sueños, los amo.
Salí de la habitación poco después de dejarles una luz encendida, incluso de fijarme que Elinor hubiera cerrado sus ojos sin hacer trampa.

Cada paso que daba sentía que algo no se encontraba bien. Fingí no saber lo que me ocurría, pero sé que eso no iba a funcionar.
"Espero que algún día me lo puedas perdonar" Ese pensamiento abarco toda mi mente mientras caminaba por el pasillo, aunque comenzaba a sentir que todo se repetía una y otra vez, como si me encontrara caminando en un bucle sin fin.

- ¿Te estas arrepintiendo?

Una voz femenina resonó, haciendo que comenzara a mirar todo mi alrededor. Ningún alma cerca.

- Papilio noctem, Ostende mihi quaeso viam in tenebris.

Cerré mis parpados al pronunciar las dos primeras palabras, para después ir abriéndolos poco a poco y encontrarme con que nunca me había movido delante de la puerta de los niños. No dejaba de sentir que había una mirada recorriendo cada parte de mi espalda, así que me di la vuelta y me encontré con una bella dama. Enfrente de mi tenía una bella dama de cabellos y ojos rojos utilizando un provocativo vestido negro
-Mio Red Moon, ¡Cuánto tiempo!, ya comenzaba a extrañar tu presencia por estos lares.
Dije tanto con notable sarcasmo como alegría, pero ésta solo se acercó a mí para arrebatarme el libro que traía en la mano. Pude ver como inspeccionaba la tapa de éste, como leía cada letra del nombre con tranquilidad, para después entregármelo con cierta rabia, la cual se hizo presente sin "razón alguna".
-"Nova de la esperanza", ¿Acaso te gusta reencontrarte con el pasado?
Pregunto con cierto interés en sus palabras, incluso noté como ocultó la rabia con una sonrisa en sus labios, más sus cejas seguían fruncidas.
-No se de qué hablas.
Respondí para retomar rumbo hacia mi habitación, pero me detuve en seco cuando escuché lo siguiente que esta soltó.
-Tú sabes de que hablo, Brujo Hades.

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Mi vista se encontraba fija sobre la tapa de un libro, el cual su decoración se basaba en dos manos que se entrelazaban firmemente con constelaciones bailando a su alrededor.
¿Por qué sentía que ya conocía ese libro de algún lado?
-Nova de la esperanza.
Murmure el nombre de este, tratando de hacer memoria, pero no conseguía recordar absolutamente nada.
-¿Cuánto tiempo más te quedaras mirando ese aburrido libro infantil?
Pregunto el peliverde golpeando suavemente el suelo con su pie derecho, parecía que su paciencia se había agotado finalmente, pero viniendo de él no me extrañaba en absoluto.
-Lo siento.
Me disculpe dibujando una pequeña sonrisa en mis labios.
- ¿Alguna vez te dijeron que te disculpas mucho?
Soltó otra pregunta, pero esta vez se notó cierta irritación en su tono de voz y cuando quise soltar otro "Lo siento" este no me dio ni siquiera tiempo de responderle. Retomo el camino que habíamos abandonado.
Solté un pequeño suspiro por mis labios y admire por última vez aquel libro, para después tratar de alcanzarlo y cuando estaba por hacerlo, este se detuvo para simplemente decir.
-Comienzo a sentir que no te conozco para nada, Aurok.