Caí, por primera vez caí, pero no a cualquier lugar, si no que caí en el amor, se siente tan bien estar enamorada de una simple persona que está a tu lado apoyándote todo el tiempo, que puedes compartir todo tipo de pensamientos, ideas, sentimientos, locuras, hablar con esa persona de cualquier cosa que se te venga a la mente sin ninguna pena, preocupación o miedo a lo que vaya a pensar al respecto o simplemente lo que te vaya a decir, por que sabes que existe realmente esa confianza entre los dos.
Al verlo, simplemente pienso "Cómo logró enamorarme?", "Por que me gusta tanto?", pero cuando comienzo a pensar la respuesta de esas preguntas, con lo único que puedo responderlas es por que él es especial, es una persona que realmente vale la pena tener a tu lado, un simple chavo el cuál me hace reír todo el tiempo, me hace sentir cosas maravillosas, que puede alegrar mis peores días, que me pone el mundo de cabeza, él me puede llevar a ver la luna y las estrellas y a la vez poder tener los pies en la tierra, simplemente él me hace recordar quien soy.
Al sentir su piel rosar con la mía, me hace sentir millones de mariposas en el estómago, lo único que pasa es ese sentimiento tan bonito que es como si estuviera en una montaña rusa descendiendo muy rápidamente, como si no tuviera fin. Ver su mirada puesta en mi, hace que por dentro me vuelva loca, veo un paraíso al momento que hacemos contacto visual. Su presencia causa demasiada tranquilidad en mi ser, se siente como si estuviera en mi lugar favorito... en un bosque con un día lluvioso y truenos al fondo, una sensación demasiado relajante, que tan sólo con cerrar los ojos, me olvido del mundo entero, simplemente sé que él está a mi lado y nadie más.
