Capítulo 2

3.4K 288 95
                                    

A la mañana siguiente Sirius fue el primero en despertarse.
Antes de levantarse observó a Remus durante unos momentos, su suave cabello castaño, sus cicatrices que lo hacían inseguro pero que a él no le importaban nada... Amaba a su lobito.

Salió de la cama, recogió sus pantalones del suelo y se los puso sin hacer ruido.
Fue a la cocina y desde allí envío un patronus a James contándole que hoy no iba a ir a trabajar porque iría a visitar la agencia de adopción con Remus y envío otro patronus al trabajo con la excusa de que tenía que coger el día libre por unos asuntos familiares.

Estaba preparando una taza de chocolate para Remus y un café para él cuando llamaron a la puerta.
Sorprendido de que alguien los visitara tan temprano fue a abrirla y se sorprendió cuando encontró a la pelirroja con su uniforme de medi-maga y su ahijado dormido en brazos.

-¿Evans?¿Qué haces aquí?-preguntó sorprendido.

-¿No te lo a dicho Remus? Hoy va a cuidar a Harry...¿Cómo es que no estás en el trabajo?-preguntó perspicaz la ojiverde intuyendo la respuesta de Sirius.

-Bueno... Me he cogido el día libre por unos... Asuntos-diio sin saber muy bien si debía contarle a dónde iban a ir Remus y él.

-¿Y cuáles son esos "asuntos"?-preguntó la pelirroja haciendo comillas de forma complicada, puesto que cargaba a Harry y una bolsa con las cosas de su pequeño al mismo tiempo.

Sirius suspiró, sería mejor contárselo, sabía que no se daría por vencida.

-Anoche estuvimos hablando y... Vamos a visitar hoy una agencia de adopción.

La sonrisa de la pelirroja era enorme, por fin había hablado Remus con Sirius.

-¡Enhorabuena!-dijo a un volumen más alto de lo normal, lo que causó que Harry se despertara y llorara un poco-¡Oh! Cariño no pasa nada no llores-dijo mientras lo acunaba.

Sirius se rió, siempre era divertido cuando la pelirroja metía la pata.

-Black no te rías.-dijo mirándola sería pero divertida.

Mientras Lily consolaba a Harry la pelirroja le tendió la bolsa con todo lo necesario para cuidar del pequeño de un año (pañales, biberones, chupetes, algunos juguetes...)

Sirius entró en la casa y dejó la bolsa encima del sofá, fue rápidamente a la cocina para apagar la cafetera (que se había olvidado encendida) y volvió con la pelirroja y su ahijado que había dejado de llorar.
Se volvió a la puerta y recogió a su ahijado de los brazos de la pelirroja.

-Compórtate cariño-le dijo Lily a Harry, este sonrió lo que parecía indicar que estaba de acuerdo.

-Tranquila Evans te lo devolveré de una pieza-dijo Sirius mientras se acomodaba a Harry en la cadera.

Cuando Lily se fue Sirius entró a la casa con Harry, cogió la bolsa que había dejado en el sofá y fue a la cocina para prepararle a Harry un biberón.

-Bueno campeón hoy vamos a ir Remus y yo a una agencia de adopción-le habló Sirius al pequeño que tenía enganchado en la cadera-Eso significa que pronto tendrás un primo o una prima¿Qué te parece la idea?

Toda la respuesta que obtuvo por parte de Harry fue el silencio.

-Voy a suponer que has dicho que te encanta la idea...¿Crees que deberiamos tener a un bebé recién nacido o deberíamos tener a alguien de tu edad?

Ahora lo que obtuvo de Harry no fue un silencio, sino una risa aguda y prolongada.

-Pues supongo que esa risa es por la emoción que te produce tener a alguien de tu edad...¿Niño o niña?

Sirius volvió a obtener silencio por parte de Harry, que lo miraba con sus grandes ojos verdes.

-Supongo que eso da igual al fin y al cabo... Pero imagínatelo... Una pequeña niña de tu edad correteando por la casa... Remus leyendo historias para que se quede dormidita... Yo ahuyentando a los chicos que se le acerquen...  Bueno, tú serías la excepción¿No sería bonito?

Ahora Harry se rió y Sirius sonrió con él, consideraba la risa de Harry como una respuesta afirmativa.

-Bueno campeón, vamos a darte de comer que tienes pinta de tener hambre.-terminó de hacer el biberón, se sirvió su café y fue a sentarse en una silla de la cocina para darle de comer a su ahijado.
-------------------------------------------
Remus se había despertado con el olor a café y chocolate de la casa, se levantó de la cama despacio, sonrojándose al recordar lo que pasó anoche.

Se puso una camisa que le llegaba por encima de las rodillas y bajó a la cocina con hambre deseando que Sirius hubiera terminado el desayuno.
Se paró en la puerta de la cocina al escuchar la voz de Sirius.

-Imagínatelo... Una pequeña niña de tu edad correteando por la casa... Remus leyendo historias para que se quede dormidita... Yo ahuyentando a los chicos que se le acerquen...  Bueno, tú serías la excepción ¿No sería bonito?

Remus se congeló en ese instante... ¿Sirius quería una niña?¡Eso era genial! Realmente le encantaba la idea.

Deseando besar desesperadamente a Sirius, entró en la cocina sin hacer ruido, colocó detrás de Sirius y le tapó ambos ojos.

-¿Quién soy?-le dijo susurrándole al oído.

-Um...¿Eres mi luna?-respondió usando el mote personal que le había puesto cuando empezaron a salir.

-Respuesta correcta mi estrella-dijo antes de besarlo apasionadamente.

Estuvieron unos segundos besándose antes de que Harry soltara un berrido molesto por haber dejado de ser el centro de atención.

-Hola Harry-dijo Remus divertido quitando a Harry de brazos de su padrino y colocándoselo en la cadera-¿Has estado hablando con el tío Canuto?

Sirius se quedó quieto al oírlo ¿Remus había escuchado la conversación? Y si así era ¿Estaría de acuerdo en adoptar a una niña?

-Remy ¿Cuanto has escuchado de la conversación?-dijo algo inseguro.

-Lo suficiente como para saber que vamos a adoptar una niña-dijo Remus sonriendo.

A Sirius se le saltaron las lágrimas de felicidad, le dió un beso rápido a Remus y salió de la habitación a toda prisa.

-¡Voy a vestirme! Luego yo me encargo de Harry mientras te vistes tú ¿Tenemos que arreglarnos para ir a la agencia de adopción?

-No necesariamente, puedes usar una camisa con vaqueros... Aunque por favor no uses los vaqueros rotos.

Sirius hizo un puchero pero no dijo nada, salió corriendo a la habitación y regresó momentos después.
Llevaba una camisa de color blanco con los dos primeros botones desabrochados y unos vaqueros ajustados; Remus realmente no podía pensar en otra cosa que en quitarle esa ropa...

-¡Remus!-gritó Sirius, Remus se sorprendió y miró a su pareja mientras se sonrojaba, su sonrojo le causó al ojigris una risa parecida a un ladrido.

-¿Sabes chaval?-dijo Sirius dirigiéndose a Harry-Si no estuvieras aquí Remus me habría atacado-Harry lo miró y extendió sus pequeños brazos hacia su padrino, Remus le tendió a Harry y Sirius lo recogió con gusto.

-Deja de lanzarle a Harry frases de doble sentido, tal vez algún día las entienda-dijo Remus riendo y sonrojado.

-No si sale a Cornamenta, nunca capta las cosas con doble sentido.-ambos adultos se rieron.

Remus salió de la habitación apresurado para vestirse, optó por unos vaqueros negros y una camisa azul cielo que le quedaba un poco suelta.
Cuando bajó a la cocina Sirius ya había terminado de recoger y había fregado los platos del desayuno, aunque Remus estaba bastante seguro de que había usado la magia para ello.

-¿Nos vamos?-preguntó Sirius al ver que Remus había bajado con una ropa que le quedaba genial.

-Nos vamos-dijo Remus confirmándolo.

Sirius se acomodó a Harry en la cadera, Remus cogió la bolsa con las cosas de Harry y salieron de la casa cogidos de la mano para aparecerse en la Agencia de Adopciones Mágica de Londres.

Harley Lupin-BlackOù les histoires vivent. Découvrez maintenant