Una tarta para dos.

Nae Taeyang

"Ayer invite por fin a Kyouka-chan al parque de diversiones, últimamente la eh visto un poco distraída, pareciera estar en otro mundo y tengo que llamarle más de tres veces por su nombre para que reaccione o me escuche. Hace dos semanas luego de volver al terminar un encargo, no regreso a la agencia y tuve que ir a la habitación donde ambos estamos viviendo, quise hablar con ella, pero como escribí en días anteriores, no recibí respuesta de ella y tampoco quiso comer por un tiempo se veía como la primera vez que nos conocimos, tenía los mismos ojos que la vez del tren. Me costó que aceptara salir conmigo al parque de diversiones, sin embargo, espero que entremos en confianza y me pueda contar lo que sucedió, ya que no solo yo estoy preocupado... Todos en la agencia lo están."

Atsushi cerro su cuaderno y lo guardo, se levantó de su escritorio se dirigió a la puerta, se puso sus zapatos y salió de su habitación camino a la heladería donde más tarde, se encontró con la pequeña chica.

Atsushi. - Ahh~! Kyouka-chan! (Con una sonrisa de oreja a oreja) ¿Quieres un helado?
Kyouka. - No, así estoy bien gracias. (Gruñido de hambre) ... Pistache, por favor...
Atsushi. - Jaja, bien entonces espérame un poco.

La pequeña se dirigió a una de las bancas más cercanas y sentó mientras esperaba. Transcurridos algunos minutos, el chico de cabellos agrisados salió con dos helados en mano, ambos tenían cubierta de chocolate y algunas chispas de colores, y el de pistache como adorno dos tubos de galleta. Camino hasta donde Kyouka se encontraba sentada, luego de sentarse extendió la mano hacia ella para que tomara el helado.

Kyouka. - Gracias.
Atsushi. - No es nada, cómelo antes de que se derrita. Kyouka tomo un tubo de galleta y lo puso en el helado de Atsushi.
Kyouka.- Están sabrosos, come ese.
Atsushi.- Ah~ Gracias.

Después de varios minutos de silencio, terminaron sus helados y se fueron camino al lugar planeado previamente. La chica se veía desanimada y con la mirada perdida durante todo el camino, por lo que Nakajima la tomo de la mano para evitar perderla de vista o que se quedara atrás. Tardaron más de lo estimado en llegar, finalmente el chico se acercó a la taquilla y compro los pases para continuar con su recorrido.

Atsushi.- ¿A cuál quieres subir primero Kyouka-chan?
Kyouka.-...
Atsushi.- (se aproxima a la chica) ¿Kyouka-chan?
Kyouka.- A la casa embrujada.
Atsushi.- ::Que alivio, solo lo estaba pensando::(suspiro) Entonces vamos.

Mientras caminaban, el chico no podía evitar mirar todas las atracciones y juegos con gran asombro, era la primera vez que entraba a un lugar así, previamente había investigado y preguntado a sus compañeros, pero no se comparaba con estar físicamente en ese lugar, no sabía cómo describir todas las emociones que sentía en ese momento, la gente riendo alegremente, gritando e incluso llorando a su alrededor lograron que inconscientemente las lágrimas comenzaran a brotar de sus ojos y escurrieran lentamente por sus mejilla.

Kyouka.- ¿Estas bien? (Extiende su brazo, acercándole un pañuelo)
Atsushi.- (Toma el pañuelo y seca sus lágrimas) Si, lo siento... Es que de repente muchos sentimientos se acumularon y... Es la primera vez que vengo a un lugar así, no pude imaginar como sería realmente, tu ¿has venido antes?
Kyouka.- Si... Cuando aún trabajaba para la Port Mafia, mate a un hombre en la rueda de la fortuna.
Atsushi.- ::Algo preocupado:: Parece que no fue tan afortunado, pero no te abrumes con cosas de pasado ¡Kyouka-chan!.

Repentinamente el chico la tomo de la mano y la llevo corriendo hasta la casa embrujada, creyeron que para entrar deberían esperar mucho por la gente, sin embargo había seis personas frente a ellos, por lo que no demoraron tanto.