Esclava de Peter Pan 🍞

Cap-7- Sirenas y engaños

Tras unos minutos de correr claro. Sé que no llegaré a ningún lado, no
teng-o ni idea donde estoy, y sobrevivir en un bosque no es una de mis
fortalezas, así que mejor voy con las demSsya que recuerdo el camino
que tomé con Pan.
No tardo en llegar y veo que todas aún están con chicos, y aguanto una
arcada al verlos haciendo el amor en pleno vista. Volteo para ir detrás
de un árbol para no tener que ver esas asquerosidades, y para que
ningún chico me vea y decida hacer algo. Quisiera ayudarles porque se
nota que están siendo forzadas, pero esta fuera de mi poder.
una hora después, escucho que los chicos se van y por fin me puedo
quitar de la incómoda posición entre las hierbas y el árbol. Busco a Pria con la mirada y la encuentro semi desnuda y tratando de colocarse
la ropa mientras lloraba descontroladamente. Corro hacia ella,
preocupada, aunque me sorprende que aún llora si han pasado 3 años.
Me daba poca fe en que podría acostumbrarme a este lugar.

" Ay, Pria... " - digo, mirando los cortes que sangraban que tenía en la
barriga ya que su camiseta estaba cortada por la mitad. Ella me mira con
los ojos hinchados.

- " Ojalé pudiera ayudarte " - le digo, sincera.
Entonces se me ocurre una idea, solía hacer medicinas caseras en mi
casa, tal vez en esta isla están las hojas que sirven para sanar cortes.

" Espera, icreo que si puedo ayudarte! " - digo, sonriendo para
reconfortarla. Ella emboza una pequeña sonrisa pero no llega a sus ojos,
y entiendo por qué. Corro hacia los árboles y observo todos los
arbustos, y mi corazón acelera cuando veo uno que se parece mucho a
Lo que tiene que ser. Casi grito de felicidad cuando Io veo de cerca y
compruebo que es cierto. Cojo un montón de las hojas y las aplasto, haciendo pue salga el liquido
de ellas que usaré en los cortes de Pria. Corro hacia dónde estaba ella y
se lo enseño.

" Estas hojas son las que usaba yo antes para sanar heridas " -exclamo,
y ella abre los ojos en sorpresa. - " Es que yo quería ser veterinaria,

Pongo las hojas en sus cortes y ella muerde su labio para sofocar un
grito. Le avisé que dolería. Pasados unos minutos todos los cortes
estaban cubiertos en el líquido y al siguiente día las heridas se habrán
cerrado y no tendrán ninguna infección.

" G-gracias -tartamudea ella. Yo le sonrío. Entonces escuchamos pasos
y ella rápidamente tapa los cortes mientras yo volteo para ver quién es. .

Era la pandilla de chicos otra vez.

" iTenemos noticias! " - grita uno que desconocía su nombre. Su piel era
entre moreno y claro y su pelo era oscuro como sus ojos. -

" Mañana
iréis al lago para bañaros. "
Escucho algunos murmullos de felicidad por parte de las chicas,
supongo que pocas veces tienen la oportunidad de bañarse mirando el
estado en el que estén.

" iAhora, a vuestros jaulas! " - grita Fred con una amplia sonrisa. No
puedo evitar sentir odio por él y por todos. Empiezo a andar hacia mi
jaula aunque no entiendo porque vamos ahora sí apenas es tarde.
Cuando lleso ni me molesto en saludar a Sara y me pongo a pensar en
Lo sucedido hoy. Así que un lago... Pan y Félix hablaban de eso, ¿pero que hay de lo de
sirenas? ¿Habrán sirenas ahí? Leí en un libro que las sirenas son malas.
Bueee, a lo mejor imaginé que decían sirenas, se supone que ni existen. De
repente escucho mi barriga hacer sonidos raros del hambre y recuerdo
que no he comido para 3 días. También recuerdo que tengo hojas en mis
bolsillos aún, tal vez sirven de comida.
Los saco y los muerdo pero los escupo inmediatamente, asqueada.
Siento la mirada de Sara posarse en mí.

" No empiecesa ensuciar mi jaula " - dice, borde. No tenía las fuerzas
para discutir con ella así que trato de quedarme dormida a pesar del
hambre que sentía.
Al siguiente día desperté con el mismo jaleo por parte de Fred, y le
vuelvo a seguir hasta dónde están todas las chicas. Me pongo con Pria y
alzo mis cejas en cuestión, y ella hace pulgar arriba, haciéndome
entender de que se curaron sus heridas.
Todas las chicas empiezan a seguir a los chicos hacia dónde esté el
supuesto lago. Cuando llegamos me quedé estupefacta, era hermoso.
Era increíble que los chicos nos den esta oportunidad, pero más que eso
era sospechoso. Miro con los ojos entrecerrados al agua intentando
captar algo extraño pero no había nada, y las demás se desvestían y se
metían en el agua despreocupadamente.
Volteo y noto que los chicos se habían ido, también es extraño que no
nos observarian, pues es lo único que les interesa. Rasco mi nuca,
confundida, pero decido no desaprovechar este momento y hago lo
mismo que las demás, rápidamente metiéndome en el agua para que
mi cuerpo no esté en el descubierto, aunque me meto con ropa interior
porque sigo sospechosa. Echo mi cabeza para atrás en el agua y noto pue todas se dirigen hacia mi, y veo que es porque hay botes ahí, seguramente de champú.
Me uno a ellasy pongo un montón en mi mano como siempre. Lavo mi
pelo y nado lejos de ellas, incomoda por tantos cuerpos. Entonces
escucho alguien.

" Hola -dice la voz femenina, y me giro. Es alguien que nunca he visto,
y tiene el pelo larguísimo y belleza excesa. Me puedo boquiabierta al
verla pero murmuro un hola. Entonces también noto algo brillante bajo
el agua, y aunque me siento culpable miro abajo y por suerte no estaba
desnuda, pero era peor, era una sirena.
Trato de esconder mi sorpresa y repentino miedo, y le sonrío amable
mientras ojeo dónde esté la tierra cercana para escapar. No estaba
lejos.

" ¿Nadamos? " - pregunto, sonriendo para no mostrar nerviosismo. Ella
sonríe de medio lado y asiente. Me pongo a nadar hacia un trozo de roca
que había porque vi que había un gran piedra encima. Por suerte no me
intentó hacer nada, y en cuanto llegamos cogí la piedra y le golpeé en la
cabeza haciéndola desmayar, y ahí es donde empezaron todos los
gritos.

" Pera que sepáis que esto no lleva premio, esto solo era porque quería
quitarme de encima las débiles " - dice en alto para todas, riéndose.
Definitivamente no entiendo a Pria. Miro a Pan asqueada y por fin se va,
riéndose con los demás chicos.
Me levanto y voy a por mi ropa, y Pria viene conmigo.

" Vaya persona más despreciable " - digo con furia. Pria asiente pero no
creo que esté de acuerdo conmigo, ni siquiera quiero preguntarle si le gusta, no sé si la podría aguantar después de eso, y necesito a una
amiga. Supongo que no es su culpa que su corazón lata por él, pero
tampoco sería mi culpa no querer estar con alguien que siente celos
porque un violador habla a otra.