Juegos del Destino (#9 Saga Bebé)

Dieciséis

Hay un largo silencio mientras yo solo observo la pantalla negra, supongo que estoy viendo mi útero y hay algo al medio.

Palidezco.

—¿Eso es.. ? — Interrogo con miedo. —¿Son quistes?

Ella ríe.

¿Es buena señal?

—Bueno, tu útero está muy bien, Hanna.

Respiro aliviada por un momento.

—Pero.. ¿Y el sangrado de dos días?

—Si, al parecer sufriste un sangrado de implantación.

¿Ah?

Deja de mover la paleta en mi estómago para explicarme.—Esto es normal, uno de cuatro mujeres lo padecen y tú fuiste una de ellas.

Al ver mi mirada desconcertada, continua explicándome, aunque no entiendo los detalles, tal vez quiere explicarme despacio para soltarme al final que es lo grave que tengo.

¿Tan crueles son los doctores?

—Veras, la pérdida de sangre puede durar uno o hasta tres días y en su mayoría entre los 6 a 10 días de fecundación, a algunas mujeres hasta los catorce días, pero es algo normal.

¿Qué me está diciendo esta mujer?

—Ocurre las primeras semanas de gestación, momento en el que el útero está muy irrigado y sangra con facilidad.—Me explica y yo sigo sin creer lo que sale de su boca.— Al adherirse el embrión en la pared del útero se rompen pequeñas venas y arterias que irrigan normalmente el endometrio, provocando un sangrado, lo que se conoce como. — Observa mi vientre un momento.—Sangrado de implantación.

¿Fecundación?

¿Gestación?

Solo eso he oído, pero no soy estúpida, se exactamente que esta insinuando.

—Usted.. — Mi voz tiembla.—¿Usted está diciendo que estoy..?

—Sí, estas embarazada, Hanna.

Shock..

Completo shock.

La sonrisa de la doctora cae.

—No.. — Es mi primera palabra y pongo los ojos en la pantalla. — ¿Esta segura que no son quistes?

Ella vuelve a sonreír y niega, dejo caer la cabeza sobre la camilla y miro el techo.

¿Qué carajos, Vincent?

Tengo ganas de llorar y me cubro la cara con las manos, maldigo en mi interior tratando de recordar los castigos medievales que me enseñaron en la escuela y posiblemente realice con Vincent Hart.

No puede ser verdad.

Vincent ya tiene un hijo.

¿Cómo rayos voy a decirle que estoy esperando un bebé suyo?

—Vaya.. —Murmura la ginecóloga, siento que otra vez está moviendo la maquinita en mi vientre.

—¿Y ahora qué?

—Esta es una sorpresa..

Me quito las manos de los ojos y la observo, para luego mirar la pantalla y a ella de nuevo.

—¿Qué pasa?

¿Se podrá haber equivocado?

¿Es posible?

Existen las negligencias Médicas ¿No?

—Doctora..

Ella vuelve a sonreír como si estuviera disfrutando esto.

¿Por qué está disfrutando esto?

—Hay dos placentas, Hanna.

Hola...

Cielos, Vincent..

¡Doble Play!

Un dato importante, ya les dije que aprendemos biología aquí también.

Mellizos:

Se produce por la fecundación de dos óvulos y dos espermatozoides, dando como resultado dos embriones diferentes que coinciden en el tiempo.

Dos placentas: Mellizos- Niña y niño/ Niña-Niña/Niño-Niño

Gemelos:

Se fecunda un solo óvulo con un espermatozoide y forma un cigoto que posteriormente se divide en dos, desarrollando dos fetos.

Comparten la misma placenta.: Gemelos- Niña- Niña/ Niño-Niño

¡Hanna y Vincent tendrán mellizos!

Nos leemos

>> Yiemir.