CAPITULO 16: DISCRECIÓN

1.7K 193 17
                                    



••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••   

"...eso significa tener que matar al otro tu"

Esas palabras retumbaron en la mente de Lan zhan. ¿había escuchado mal acaso? ¿Tenía acaso que matar a la otra parte de wei ying?

Wei ying quedó sorprendido ante la revelación. ¿matar a alguien?, nunca había hecho algo similar y no quería hacerlo ¡cómo podría! , el tener sangre en sus manos era algo que no podía ni imaginar, después de todo el solo quería ayudar a las personas indefensas; ¿como podría arrebatar la vida a alguien sin su consentimiento por su propio beneficio? nadie se merecía morir así...

-lo siento, no creo que pueda hacerlo- Baoshan oculto su cara tras un abanico que había traído consigo, después de unas cuantas movidas de este, lo cerró; la cara de la mujer no había cambiado, pero por alguna razón wei ying sentía que había dolor en aquel rostro.

- independientemente de lo que quieras eso ya esta decidido- por alguna razón, cuando wei ying escuchó aquellas palabras, un escalofrío subió por su espalda.

Baoshan llevó su mano al pecho de wei ying, de pronto sintió un dolor agudo dentro que se extendía por todo su cuerpo.

-¡¡!!- por más que quisiera quejarse, wei ying por algún motivo no podía. Lan zhan noto la mueca de dolor en la cara de wei ying y quiso intervenir, sin embargo, después de dar el primer paso por algún motivo no pudo moverse más, wen ning también intentó acercarse pero el resultado fue el mismo; detrás de ellos escucharon una pequeña risa.

-no puedes vencer a mi maestra, tranquilos solo le dolerá un segundo- efectivamente apenas el niño dijo esto, el dolor en el pecho de wei ying desapareció. Wei ying no soporto el propio peso de su cabeza por lo que la dejó caer un momento dejando su mirada hacia el suelo, la sensación de agujas moviéndose en su pecho le resultó demacrado, por esa razón no pudo terminar de ver lo que Baoshan tenía en sus manos.

Después de que la parálisis desapareciera de los cuerpos de Lan zhan y wen ning, ellos no pudieron soportar su propio peso haciendo que ambos cayeran de seco sobre la tierra húmeda, las ropas de lan zhan se había arruinado por el barro, pero esto pareció importarle poco.

-¡suéltalo!- Lan zhan se lanzó hacia donde estaban la mujer y wei ying, pero algo lo detuvo cuando estaba a dos pasos de ellos.

-reconsidere eso ultimo maestro Lan- Lan zhan tuvo que bajar la mirada para encontrar el origen de aquella voz, frente a él se encontraba el niño discípulo de Baoshan, antes Lan zhan no lo había considerado un peligro al ver que no traía ningún arma, pero se había equivocado; el niño en realidad no cargaba ninguna espada porque no la necesitaba, mejor dicho, no necesitaba de ningún arma, ya que sus uñas eran más afiladas que ningún otra espada que Lan zhan hubiera visto en su vida.

-¡Lan zhan!- wei ying extendió su mano con dirección a Lan zhan, quería ayudarle, pero lo que sea que hizo Baoshan lo dejó sin fuerzas. Wen ning no se movió, entendió que si hacia algo seguramente lo detendrían, lo único que podía hacer era observar la situación.

-Tranquilos, ya termino- Baoshan rodeo la cintura de wei ying con su brazo derecho para darle apoyo, mientras sujetaba otro objeto en su mano izquierda - joven wei esto es para usted- wei ying vio el objeto que estaba en las manos de Baoshan, era tan hermoso que parecía sacado de un cuento de hadas.

RECOMPENSAWhere stories live. Discover now