Vidrios rotos.

01:06am 15/01

Ya no entiendo, ¿estoy muerta o viva?, tengo muchas preguntas y pocas respuestas. Ahora mismo estoy sentada en la oscuridad no veo absolutamente nada, como si tuviera los ojos cerrados, ya han pasado minutos y no sucedió nada. Hasta que escucho pasos pesados, que arrastran sus pies con desgano hacia mi, escuche que algo se desplomo en el suelo y ya no oí los pasos, ya no escuche nada, un murmuro que lo sentí alado mio me saco de mis pensamientos, me dio escalofríos, no entendía que decía, pero lo repetía muchas veces, parecía hablar en otro idioma, estaba muy asustada mi corazón estaba muy acelerado, escuchaba mis palpitaciones, estos susurros se repetían constantemente. -¡Cecilia!- El grito me asuste me levante muy rápido y mi vista se nublaba en negro, hasta que la pude recuperar, estaba en el hospital renuevo, ¿nada paso?. 

Erik estaba preocupado, se lo veía en su cara, tartamudeaba al hablar -E-estas bien?- lo miro confundida, y el responde -Tuviste un infarto...- No tengo ninguna emoción, ya lo sabia, entonces, estoy esclavizada a vivir en un hospital y una vida que no quiero. Já no suena tan mal, diré eso mañana o dentro de unas horas jajaja. Erik tomo mi mano algo desconfiado y quedo durante unos minutos cuando abrieron la puerta y nos desconcentro, era un doctor, en un momento me lo quede mirando fijo, pues tenia el cabello oscuro y ojos grises, se parecía mucho al demonio, es mas tenia su misma voz, pero el pronunciaba mas alegre. Solo lo observaba, otra cosa no podía hacer, solo venia a chequear por mi, ya que tuve un paro. Todo estas personas que me recuerdan a mis "sueños", me hacen querer volver a dormir, al final, creo que tengo insomnio, nunca duermo maldita sea. La mirada del doctor y la mía se cruzaron, vi esos ojos grises, llenos de tristeza, vació, quizá no tiene tiempo de pensar en eso, pues trabaja todo el día, alejo su mirada de la mía, y se fue de la habitación. Estaba muy confundida y pregunte a Erik -¿quien eres?- Erik me miro raro, y contesto -Soy Erik, tu novio, ¿no recuerdas?, nos conocimos en una parada de bus...- respondí -No se quien eres- el quedo sofocado por mi respuesta me miro a los ojos esperando que me rectificara y salio de la habitación, esa era mi intención, no creo poder seguir aguantando lo que es el mundo real fuera de mis sueños, aunque en mis sueños no muero solo agonizo, estaba conectada a muchos cables, no se nada de medicina, pero si sacada algún cable de mi la maquina iba a pitar. Entonces vi el enchufe de la maquina, si no tiene electricidad no funciona, y si no funciona no va a pitar, entonces lo desenchufe, por lo que veía estaba en sala de emergencias, y allí pasaban a mirar a cada rato por si pasaba algo, me quite todos los cables del pecho y camine un poco por la habitación, había un baño ahí, entre, pensé un poco, si dejo de comer sera muy lento se darán cuenta y me pondrán un tubo por el estomago... .Hay un espejo aquí,  me mire en el, no había nadie, era como si yo no existiera, estoy sola ahora, cerré la puerta, para que al menos el sonido no se escuche tanto, no siento mi rostro, siento que estoy adormecida, como si tuviera anestesia, me arañe el brazo y no pude sentir nada, es como si estoy en otra piel. Golpee el espejo, y mis nudillos sangraron, tome varios trozo de espejo, corte en forma horizontal sobre mi abdomen con un trozo de vidrio sobre el pijama que llevaba puesto, y de la misma forma que corte el pijama comencé lentamente a cortar mi abdomen, ja, alguien no podrá dormir encima de mi estomago. la linea termino en mi cadera, solo espere a que me desangrara, ya lo se veré todo nubloso. Pero esta vez no paso eso, lo único que pensé en ese momento fue en Erik, ¿lo estoy deshonrando?, mi sangre brotaba aun mas en el suelo frió, sentía un vació en el estomago, mi color ya era mas pálido de lo normal, mis nudillos eran rosados y otras moradas, verdes, como moretones. Erik ya no existe para mi, no somos novios, tampoco ninguna fantasía que mi cerebro quiere, el solo estuvo cuando me sentía mal, y no esta tan mal, pero siento que estaba todo este tiempo conmigo por lastima, de alguna manera se vio reflejado en mi y quería ayudarme, pero, no puedes hacerlo solo por lastima, te intoxicas solo a ti, solo tengo fotos y recuerdos de ti en mi mente, y allí es donde voy, a cuando todo estaba mejorando, cuando solo eran días solitarios pero almenos con un poco de felicidad, quizá me estoy condenando a mi misma. 

Tenia mucho sueño y apenas podía quedarme un momento mas despierta, mientras me desvanecía en mi mente gritaba "esta noche no quiero despertar, los odio a todos!" ya que no podía gritar mi voz era nula, no podía hablar, como mis labios cosidos, al final, esto es lo que quiero, lo que me desearon, lo que yo desee. Sonreí y cerré los ojos, de esa manera me siento vivo, el poco momento que pase aquí siento que me muero y mis pensamientos son cada vez mas agresivos, muertos. 

Podría llevarte conmigo amor, pero tu eres la luz de las personas, haces que sus días sean mejores, quizá le harías mejor a alguien mas, sabes, la muerte es un pecado, soy una mala persona, tu no. Pero si el tiempo te lleva cabe dos tumbas, fuera de casa, una para ti y una para mi.

Abrí mis ojos al escuchar una puerta abriendo, un enfermero entro a la habitación me vio con mucha sangre derramando de mi, mierda, ahora de seguro llamara a un guardia después de dos intentos, todas mis malditas muertes son lentas y sin dolor, no lo entiendo. Quizá solo corte mi piel no mis órganos, aun así, me tenia que desmayar por la perdida de sangre, el enfermero salio de la habitación, volví a cerrar mis ojos.