tin y can la novela (libro)

El día después de la primer vez de Tin y Can (capitulo 5)

El sonido de las aves se hizo más fuerte.

los rayos dorados del sol brillaban en la mansión de la familia Medthana,

la luz transforma el ya hermoso paisaje urbano en una vista que podría haber salido de una huella; cada color era vibrante,

era vibrante y nítido como un nuevo comienzo.

pero ni un solo rayo podría penetrar las gruesas cortinas que cubrían el segundo dormitorio principal en el lado este de la casa.

mientras que las flores del jardín se llenaron de luminosidad y colores, la habitación permaneció oscura.

Solo la respiración constante de una persona dormida se podía oír, eso y el sonido suave de la ducha dentro del baño cerrado.

Can Puede dormir sin molestias.

Estaba acostado de lado, abrazando una almohada suave y abajo, con las mejillas apoyadas en sus manos tendida.

parecía tan cansado,

junto a él había más almohadas y prendas de vestir desechadas que, de forma ausente y apresurada, tiraban en cualquier dirección de la noche anterior.

una sonrisa pasó a través de los labios dormidos, pero desapareció en un instante; un parpadeo de un sueño o tal vez un recuerdo.

Al cabo de un rato, la puerta de la bañera se abrió y el dueño de la habitación salió a pasear, con las manos agarradas a una toalla y frotándose el pelo mojado.

Tin, miró hacia donde Can todavía estaba profundamente dormido, su rostro, no tan animado mientras dormía, le prestó una inocencia casi infantil,

pero Tin sabía que, despierto, puede muy bien ser el chico más descarado que haya conocido.

Tin se sentó en el borde de la cama, cuidando de no despertar al niño dormido que estaba tan angustiado el día anterior que logró que Tin se acostara: su propia cama.

Qué estupidez, qué adorable, qué totalmente Can.

Tin se agachó para mirar al tipo dormido que yacía en su cama.

él realmente no sabía si él pensaba que Can era abominable o lindo, pero era totalmente entrañable de una manera que Tin no podía entender

Can murmuró en su sueño, sacó su lengua por un breve segundo y Tin casi se derritió.

Suavemente, con cuidado, Tin puso sus manos en la cabeza de Can y usó sus dedos para arreglar suavemente el cabello rebelde.

Miraba las pestañas de Can, rizadas y largas, aunque no eran tan obvias cuando estaban despiertas.

¡Quiero dormir contigo, solo tú! "Tin recordaba las palabras de Can en el auto la noche anterior y su corazón se llenó de alegría.

si solo fuera cierto, también recordar la amargura que sintió cuando Can le dijo que solo podían ser amigos hace aproximadamente un mes.

Pero luego, aquí estaban, en el cuarto de Tin, saciados después de una noche de pasión inexplicable.

Cuando repasó la noche anterior y el mes anterior y la mañana y el día de hoy, Tin extendió la mano para rozar las mejillas del otro chico.

este tipo que a pesar de que negó con la cabeza indefensa tantas veces, sigue diciendo: "¡Quiero más!

Apenas romántico, de hecho, era sencillo, pero el tiempo ya estaba completamente obsesionado con Can, su Cantalupe.

"sawasdee, Ai Khun Chai "

murmuró el compañero dormido.Parecía que sus golpes habían despertado a Can porque comenzó a mover su cuerpo; Murmuró algo y luego lentamente abrió los ojos.