Huracán ✔️

Capítulo 44

—De acuerdo, te voy a decir toda la verdad.

Para Eleazar era difícil todo aquello, también lo estaba siendo para ella, pero era necesario. Quizás ya no tendrían tiempo después para aclarar las cosas.

—Sabes que fue hace mucho cuando te conocí; sí, era un adulto y tú una adolescente. Era mayor que tú, pero me enamoré de ti desde el primer momento que te vi, no lo oculté entonces, y no lo voy a ocultar ahora. Pero es claro que el Eleazar que conociste entonces es muy diferente al de ahora.

En ese entonces yo tenía más que claro que eramos diferentes y soñaba con todo para ti, pero no podía dártelo creo que quedó claro con cada pobre y torpe obsequio que te di, pero cada uno fue dado con mucho amor. El día de tú cumpleaños tú saber perfectamente como me trató tú papá y tú hermano, ha hace falta que lo diga, porque fuiste testigo; me humillaron.

Esa noche deseé que todo cambiara, y por eso cuando se me presentó la oportunidad de entrar como encubierto y trabajar con el Comarca acepté sin dudar, porque sabía que eso me daría otras oportunidades. Allí conocí a Darío, en ese entonces era la mano derecha del Comarca, creo que te lo dije antes, cometió un error y el Comarca me nombró a mí su mano derecha. Cuando eso sucedió te tenía muy presente; era ingenuo y creí que atrapar a Mouro sería fácil, ideamos un plan con Flavio y era lograr tener el control de sus abogados; don Flavio y sus hijos se habían encargado de que otra unidad de la policía atraparan al abogado que tenía Mouro en ese entonces, por lo que necesitaba a otro.

Estaba lleno de dolor, no me quiero justificar, pero había mucho rencor Emily, creí que si daba el nombre de tú papá les demostraría que ellos eran peor que yo, nunca pensé en lo delicado que era para ellos, y para ti también. No sé en realidad en qué estaba pensando, pero al ser la mano derecha del Comarca, quien era el hombre de confianza de Mouro él me escuchó y buscó a tú papá.

Justo para ese entonces pasó el tiempo y el error de Darío dio problemas, fue cuando conocía al Gavilán. El error que Darío cometió hizo que el Gavilán pusiera los ojos en el Comarca por lo que me ordenó que me deshiciera de él. No tuve el valor por lo que lo escondí. Allí fue cuando me cayó un balde de agua fría de realidad, y comprendí que no era un mundo para ti.

Las cosas pasaron y pensé que tú papá no había aceptado la propuesta de Mouro, pero lo hizo. Para ese entonces ya salías con Julio, y el mundo en el que yo estaba no era para ti, por lo que no puede hacer o decir nada. No sé si lo recuerdas, pero aún no habías decidido tú carrera y yo recordaba que me habías dicho que no te veías trabajando con tú papá; el Comarca ya te había visto y le gustaste sabía que sí trabajabas con tú papá ibas a estar en el ojo del huracán, por lo que por casualidad me encontré con el anuncio de una pasantilla y la dejé en el parabrisas de tú auto.

Te observé de lejos y vi que sonreíste cuando encontraste el anuncio, te emocionaste; creí que había hecho lo correcto. Nunca más volví a acercarme a ti, o a siquiera buscarte para verte de lejos, las cosas se pusieron muy mal y eso me lo impidió mucho más; mataron al Comarca y se decidió que yo me quedaría a cargo del negocio.

Conocí a Mariza el día que fui a buscarla para avisarle sobre la muerte de su padre, creció en la Colina y era muy inocente, lo sigue siendo a pesar que tan solo es un año menor que tú. Me recordó mucho a ti, y se lo dije, le hablé de ti desde el primer día.

Sabía de su existencia porque el Comarca siempre hablaba de ella. Mataron a su mamá cuando tenía diez años en el primer conflicto que tuvo el Comarca con el Gavilán. Por eso la protegía mucho; estaba sola Emily, así que me hice cargo de ella.

El negocio había quedado mal por lo que sabía que debía darle movimiento, pero nadie me tomaba enserio por eso Lizardo vino a trabajar conmigo y siempre hablaba de ti, como un tonto, por eso decía que me ibas a llevar a la perdición. Sabía que no era un mundo para ti, pero no sé, creí y confiaba que cada vez estaba más cerca de atrapar a Mouro y poder volver por ti, y no quiero que pienses que estoy diciéndolo porque quiero que veas que siempre te amé, es sólo que era así; es la verdad. ¡Estaba loco Emily!