23.- Lido di Venezia

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Nico: ¿Cuanta azúcar has comido esta mañana? – dijo sonriendo

Isabel: Ni un gota – dijo riendo

Tu: Ella es así por naturaleza

Alberto: Bien, vámonos ya – dijo subiendo a la lancha

En el camino todos íbamos hablando lo cual le vino bien a Nico porque lo distrajo del agua que había a nuestro alrededor, cuando llegamos nos hospedamos en un hotel de cerca de la playa. Ya no me sorprendía tanto ver la cantidad de autos puesto que en Vienna habíamos visto varios. Cada uno fue a su respectiva habitación y acomodamos todo para luego salir a recorrer la pequeña ciudad.

Isabel: Esto es increíble, hace un año que no veníamos

Nico: ¿Ya han estado aquí?

Tu: Sí, normalmente veníamos todos los años, pero el año pasado no pudimos así que quedo para otra ocasión

Alberto: Lo que más extrañaba de este lugar eran los autos, amo mi ciudad, pero conducir también es divertido. Ya que estamos aquí, alquilemos uno – dijo emocionado

Isabel: Me parece bien, por aquí hay un montón de tiendas

Alberto: Bien, vamos Nico, ayúdame a elegir alguno

Nico: De acuerdo, pero yo no sé conducir

Entonces recordé que era de otra época, claro que había autos en sus años, pero era un niño así que no había aprendido

Isabel: ¿De verdad? – dijo sorprendida

Nico: Si, casi nunca me movilizaba en auto – dijo haciendo una mueca – mi padre acostumbraba a caminar – mintió

Alberto: Pues es tu día de suerte, yo te enseñaré, ya verás que es divertido

Los chicos se metieron en una de las tiendas en las que podías alquilar, no les llevo mucho tiempo conseguir un volvo plateado V40 T5, cuando lo tuvieron fuera de la tienda el hombre le dio unas llaves a Alberto, tendríamos unos tres horas con el auto.

Alberto: Bien, es el momento. – Le dijo sonriendo – verás que es fácil solo no te pongas nervioso o podríamos chocar contra algo

Nico: Bien, no suelo ponerme nervioso – dijo sonriendo

Alberto le hizo sentarse en el asiento del piloto y le indicó para que servía cada cosa

Tu: ¿Estás seguro? – le pregunte cuando le dió las llaves

Nico: Estaré bien, parece sencillo

Alberto: Lo es, ahora pon la llave ahí y pon el auto en neutro

Nico le obedeció y en instantes el motor empezó a funcionar

Nico: ¿Es normal que suene así?

Alberto: Exacto, ahora dejemos que el motor se caliente y luego pones la palanca de cambios en primera y segunda y arrancas – dijo sonriendo

Isabel: La zona esta despejada, pero conduce lento primero

Nico: Muy bien, sube ____ - dijo sonriéndome

Tu: ¿Qué? – dije sorprendida

Nico: No tendrás miedo, ¿o sí? – dijo arqueando una ceja burlón

Tu: Eres tu quien debería tenerlo, es la primera vez que conduces

Nico: Sube ya, no voy a chocar con nada

Alberto: Ve con él, solo darán una vuelta rápida, yo creo que ya lo ha entendido

Suspiré y subí en el asiento de copiloto, estaba algo nerviosa, pero Nico parecía bastante confiado aunque de igual forma me puse el cinturón de seguridad lo que le hizo reír.

Un nuevo comienzo (Nico di Angelo)✔️Where stories live. Discover now