Tócame. HOPEV.

60

Sin embargo, tal vez iba a estar más tiempo fuera de Corea si hay complicaciones con los plazos de entrega; todo podía pasar. Pero posiblemente Hoseok iría a verlo también. A pesar de que en ese momento no quiera irse, siente que es algo que debe hacer. Debe dejar de ser la reina del drama, pero ¿realmente Hoseok y él podrán soportar estar días sin tocarse ni sentirse el uno al otro?, es lo que solía preguntarse. A veces cuando está con Hoseok, siente que el aire se vuelve más liviano. Más agradable. ¿Se sentirá pesado cuando no esté con él?

Incluso en ese momento, cuando Hoseok deja de sobarse los ojos y le mira, sonriéndole, pero deteniendo su expresión por la sorpresa y la preocupación al ver sus ojos brillosos por la pena, se siente acogido y feliz. 

- ¿Qué pasó, bebé?, ¿Tuviste una pesadilla?

Negó con la cabeza, suspirando al sentir la mano de Hoseok acariciando su mejilla. Sabía que decir lo que estaba pensando no cambiaría nada y también sabía la respuesta que le daría Hoseok, pero de todas formas lo hace y en el fondo, no se arrepiente, porque es algo que de verdad quiere decir.

- Ven a París conmigo.

Lo dijo en un susurro apenas audible, pasando su mano por encima de la de Hoseok en su mejilla, en un intento de sostenerse a su toque. 

Hoseok lo miró aún más sorprendido y hasta podía ver la tristeza en sus ojos al escucharle. Sin desviar la mirada, lo miró fijamente a los ojos, como queriendo decirle que, efectivamente, ya sabía su respuesta, pero aún así replicó.

- ¿Por qué?, ¿Por qué no?

- Ya sabes porqué, Tae -dijo afligido, quitando la mano de la suya, desviando la mirada unos segundos después y sentándose en la cama dándole la espalda.

Taehyung miró el techo blanquecino, antes de gemir con frustración, tapándose su expresión descompuesta por todos esos sentimientos que lo abrumaban.

Son sólo días, pensaba, ¿Por qué tengo que hacerlo tan difícil? 

- Lo sé -terminó diciendo, sentándose en la cama y acariciando la espalda desnuda de Hoseok-. Lo siento, no debí decirlo. Tampoco quiero que te sientas presionado a realmente hacerlo porque sé que no pasará, es solo que... creo que aún tengo tiempo para comprar un boleto más o comprar una maleta más grande y meterte en ella -bromeó, pero al contrario de lo que esperaba, no se rió y Hoseok tampoco.

Detuvo su toque, abrazándose así mismo sin dejar de observar la nuca de Hoseok, quien estaba cabizbajo, como si su toque le hubiera tirado una bolsa de piedras encima. No quería verlo así, pero sentía que no podía evitarlo. Debería hacerlo reír, no provocarle dolor en ese momento. Taehyung quería hacerlo, sonreír y besarlo entre caricias, decirle que todo estaría bien... pero, ¿Por qué no se sentía capaz?

Después de unos segundos, vio como se pasaba las manos por el cabello, con el mismo gesto de frustración y profunda tristeza que él y se dio la vuelta, mirándole con profunda ternura.

Tomó su mano con gentileza y con la otra, volvió a posarla en su rostro, borrando una lágrima imperceptible que recorría su mejilla.

- ¿Quieres que sea sincero contigo, Taehyungie?

- Siempre eres sincero conmigo, ¿no? -se mordió el labio inferior, tratando de ahogar esas ganas de seguir llorando.

Pero le vio sonreír y por alguna razón, supo que estarían bien.

- Yo... dejaría toda mi vida por ti -confesó Hoseok, mirándolo fijamente-. Haría lo que sea que me pidieras, me compraría un boleto de avión y dejaría todo, absolutamente todo y sin importarme nadie más, para seguirte... -Taehyung quería decirle que eso no era necesario, pero se quedó mudo viendo como Hoseok ahuecaba sus manos entre las suyas-... pero eso es lo que precisamente me da miedo y es lo que me hace decirte que no dejaría mi vida actual por ti... -tragó saliva y respirando hondo, siguió hablando-; Tengo miedo de que si empiezo a seguirte, si veo tu espalda, ya no podré caminar a tu lado nunca más, sino que te perseguiré como un fantasma hasta que te canses de mí. Y no quiero eso para nosotros. Sinceramente, eso me mataría más que un año sin ti...