Huracán ✔️

Capítulo 41

La respuesta de Emily hizo que le bajará a la poca exaltación que tuvo.

-Más te vale que no hayas sido tú, porque de haberlo echo ¿Ya te diste cuenta que mataste a tu hijo? -Le preguntó a Eleazar con voz apacible.

-Eleazar, por favor -pidió Emily.

Pájaro salió de inmediato junto con Lagarto y Lizardo. Estos dos últimos se habían limitado a comentar algo para evitar que la situación se sobre exaltara más de lo que lo había estado.

-Voy a encargarme de que pongan cámaras en la habitación de Barbara -dijo Lizardo.

-Lástima que lo dices hasta hoy -respondió con enojó y se encerró en su habitación.

Era una hacienda mucho más rústica, de un solo nivel, ladrillo y con suerte con un hermoso jardín que en ese momento estaba lleno de hombres armados.

Emily entró por el despacho ya que conectaba con la habitación que compartía con su esposo.

-No quiero que nos peleemos -agregó.

Eleazar estaba revisando unos documentos y no respondió.

-Eleazar por favor -lo abrazó por detrás.

-No tienes porque venir a disculparte, ya abriste la boca, no se puede hacer nada.

Él fue indiferente.

-¡Wow! Osea que si no estoy de acuerdo con lo que haces te molestas conmigo.

-Sí, es mi especialidad -sonrió con sarcasmo.

-¡Qué hermosa especialidad! -exclamó Emily devolviendo el sarcasmo.

-Lo sé -guiñó el ojo-, te guste o no, es lo que nos ha mantenido con vida hasta hoy; no solamente a mí, a los Burgo, a las mujeres de los Burgo, a mi familia, a la familia de Lagarto y a ti y a tú familia. Te guste o no Emily hay veces que toca dejar de lado el sentimentalismo y pensar con la cabeza fría. Y lo siento, pero aquí nadie a tomado buenas decisiones y parece que no saben realmente lo que es este mundo.

-Tienes toda la razón, pero comprende que Barbara no está bien ahora. Eso sí, te prometo que yo misma me voy a encargar de sacarle la verdad cuando sea el momento.

-Seguramente, tú y Leo lo harás. Lo malo es que si fue ella, para ese momento quizás ya todos estemos muertos.

-¿Qué tiene que ver Leo en esto?

-Que lo defiendes, lo sigues defendiendo y dándole la razón a pesar de que fue quien te metió en este mundo.

-Entonces todo esto no es por Barbara, es por Leo. Amor, una cosa no tiene que ver con la otra.

-Claro que si tienen mucho que ver, ¿Cómo crees que me siento teniendo a mi mujer y a su ex novio bajo el mismo techo?

Eleazar estaba celoso.

-No creí que te sintieras así.

-Olvídalo, no hay tiempo para celos sin sentido -rezongó.

Justo tocaron la puerta al momento que Emily iba a responder.

-Perdón que los moleste -decía Maya-, Eleazar parece que Tony tiene buenas noticias -agregó.

-Perfecto voy contigo.

-Eleazar, me parece que no hemos terminado de hablar -interrumpió a Emily.

-Yo creo que si -respondió y fue con Maya.

Emily sintió como si un balde de agua fría le hubiese caído encima, pero tampoco estaba dispuesta a que los celos le ganaran, por lo que se apresuró para alcanzar a Eleazar. Cuando llegaron a donde estaba Tony ya estaba allí Eladio y Leo.