El hijo de Hades y Persefone [1.3]

Capítulo 4| Descendiente del viento

- Sorprendida de saber al fin el secreto sombritas
- mis primas se van levantando a Damián que estuvo durmiendo en la cama de mi prima todo este tiempo. Sueño pesado tiene el chico o los hijos de Morfeo tienen algo que ver con esto. Tome su mano incentivandola a levantarse ella me siguió saliendo de su cama con lentitud. Sonreímos juntos como cuando éramos niños y hacíamos travesuras en el vecindario donde vivía con sus padres. La guié esta la ventana que abrí para subirme al mueble que había bajo está quedando a la altura perfecta de poder salir ella me siguió sin entender que es lo que yo trataba de hacer.

Ella tomo mi mano entrelazando nuestros dedos que se acoplaron con facilidad como si su mano la hubieran hecho para encajar con la mía. Que cursi sonó eso ya parezco Adonis con su romanticismo. Creo que acabo de arruinar un momento perfecto ahora entiendo cuando Ylenia me dice que siempre arruino los momentos románticos es algo que llevo en los genes. Volvamos a donde estábamos Diana miraba nuestras manos entrelazadas y alzo su mirada para verme con una sonrisa que me decía que sabía lo que arriamos, pero tenía algo de miedo. La noche nos cubriría y de la oscuridad que nos rodearía nadie se daría cuenta lo que ella temía es que terminemos como tortilla en el suelo.

- Confió en ti mi flor piensa que eres un ave en pleno vuelo extendiendo tus alas ante la brisa del viento planeando la dirección a la que quieres llegar yo estaré contigo - ambos nos lanzamos al vacío como una pareja de suicidas y estando a un metro de tocar el suelo Diana emprendió el vuelo hacia arriba. Estábamos volando por encima de la fraternidad por encima de todos siendo llevados por la brisa del viento. La adrenalina que corría por mi cuerpo no se comparaba a nada que haya sentido antes, libertad esto se sentía volar. Diana a mi lado grito con euforia apretando mi mano con fuerza, sé que ella le encantaría hacer esto con sus padres y se también lo orgullosos que estarían de la mujer que se convirtió Diani. Volamos un rato más hasta que Diana se sintió cansada y volvimos a la fraternidad aterrizando de mejor manera en el tejado por donde estaba la puerta para ingresar al edificio.

En cuanto bajamos a la planta baja todos los chicos y chicas de la fraternidad estaban cenando pizza por lo cual nos unimos a ellos. Las risas inundaban la caza y canciones que se cantaban en el campamento reinaban en esa cena seguido de anécdotas graciosas acerca de los entrenamientos y de las famosas bromas de Damián y Penny.

- Bueno a ver una de nuestras hermanas tiene que decir algo - hable para que todos se callaran ser el líder de la casa Delta tiene sus ventajas. Diana aclaro su garganta poniéndose de pie para que todos la oyeran.

- Soy la descendiente de Bóreas el dios del viento norte - los aplausos no tardaron en llegar y las felicitaciones a la semidiosa no se hicieron esperar.

- Oigan en dos semanas comienzan las bromas de fraternidades debemos reforzar nuestras medidas de seguridad para que no encuentren a nadie lanzando bolas de agua, flechas o creando rozas de la nada - hablo Adara recordándonos a todos y todas las famosas bromas de las fraternidades donde por un mes también nosotros debíamos actuar normales para no tener que borrarle la memoria a nadie. También debíamos pensar en que bromas hacer para poner definitivamente este año a nuestra fraternidad en el segundo o primer puesto como mejores bromistas de todo el campus.

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Apague la alarma de mi teléfono levantándome de una vez o de seguro me quedare dormido y llegare tarde. Damián que comparte habitación conmigo dentro de la fraternidad se sentó en su cama pasando una mano por su rostro. En la fraternidad ahí cuatro baños dos en el dónde están las habitaciones de las chicas y otros dos en dónde estamos los chicos. Por lo cual no teníamos que hacer filas tan largas para usar el baño, algunas veces Diana me pedía dejarla entrar en el antes que yo por que las chicas se tardan horas en el baño y ella siempre se queda dormida por no escuchar la alarma. Como las hijas de Afrodita son las que más se tardan en el baño las dejan entrar hasta lo último pero Diana algunas veces no llega. Camino entre dormido hasta el armario donde tomo una toalla colocándola en mi hombro. Salgo viendo que todavía nadie se levantó lo cual me dejaba libre el baño y de la nada los gritos comenzaron a escucharse en la casa. Damián sale de la habitación corriendo en dirección a la sala y le sigo de cerca al igual que otros chicos que se despertaron por el griterío.