Another Year.|One-shot|(Odazai, BSD)

Parte única.

— Pero piensa, Odasaku. —Llamó apoyando su mano en el hombro de su amigo. Quién se encontraba a su lado en la barra con un vaso de whisky en mano.

Oda lo observó por el rabillo del ojo, viendo como Dazai articulaba cada palabra con esfuerzo. Hipando cada cierto tiempo, quizás se había pasado un poco en su "celebración".

— ¿Cuándo cumplimos años?¿Tenemos un año más de vida?¿O estamos un año más cerca de la muerte?. —Volvió a preguntar abriendo levemente los ojos. Aunque sólo uno se podía apreciar debido a sus vendas.

— Ya me hiciste esa pregunta trece veces. —Suspiró el hombre dejando su vaso a medio tomar en la barra.— Y las trece veces te respondí que no lo sabía.

— Pero piensa… —Volvió a pedir y Oda dejó caer sus hombros ya cansados.— Puede ser un año más de vida por el hecho de que seguimos viviendo, ¿No?. —Preguntó y Oda asintió sin mucho que poder hacer para callar a su amigo— Pero quizás también es un año más cerca de la fecha de nuestra muerte. —Dijo tambaleandose levemente en su lugar, sentándose a duras penas de la barra.

— La muerte es incierta, Osamu. —Respondió con simpleza dando otro sorbo a su bebida.

— Pero piensa… —Volvió a decir y Oda juraría que si escuchaba nuevamente esa frase en bocas de su amigo le arrojaria su vaso a la cara.— La muerte puede no ser tan incierta, si vives honorablemente y de forma correcta, siguiendo un dogma. Teniendo una vida "placenteramente" tranquila puedes vivir mucho tiempo.

Oda lo miró, Dazai hablaba de cosas totalmente serías con una sonrisa de borracho. Eso le dio gracia de cierta forma, ver a su amigo luchando por sostenerse mientras debatía consigo mismo. Ya que él no le estaba prestando mucha atención.

— Dormir a una hora exacta, levantarse a una hora correcta, comer de manera variada y saludable, hacer ejercicio y el resto de estupideces que la gente hace para vivir más. —Comenzó a enumerar con voz somnolienta.— Las personas lo hacen con el vano sentimiento de querer extender su penosa vida, ¿No? Entonces al saber que hacer y no hacerlo, ¿Acaso no reducimos nuestro tiempo de vida?

— Si es así no viviras mucho. —Declaró alejando su vaso de su boca.

— ¡¿Eso crees?! —Preguntó con ojitos brillantes colgandose de los hombros del mayor.— ¡Gracias, Odasaku! —El nombrado suspiró. Al ver que Dazai se lo había tomado como un cumplido.

— La vida es fugaz, Osamu… —Respondió mirando al contenido de su vaso.— No puedes estar de aquí para allá cuestionandote cuanto durará.

— Te pusiste a balbucear cosas como borracho. —Hizo ver pese a que la situación era al revés. Oda no le prestó mucha atención. Simplemente siguió mirando al líquido dentro de su vaso.

— Puede ser… —Respondió extendiendo más de lo debido esa última palabra.

Dazai levantó el vaso a la altura de su rostro, ese ya casi vacío con más hielo que bebida. Oda arqueó una ceja y entendiendo las intenciones de su compañero alzó el suyo a la misma altura. Quedando notable la diferencia entre la cantidad de contenido en ambos.

— Felicidades. —Dijo el castaño sonriendo con los ojos cerrados mientras ladeaba levemente la cabeza.— Por otro año en el que estas aquí. —Brindó, acompañando sus palabras del sonido del leve golpe los objetos de vidrio.

— Gracias. —Dijo éste para volver su atención al frente, bebiendo lo que quedaba en su vaso de manera lenta.

— Pero si lo piensas.-

— Llegas a retomar ese tema y te arrojare el whisky a la cara. —Amenazó ya cansado, con un tic en la ceja y hablando de forma apresurada.

— Por eso digo que ya doy por terminado el tema. —Respondió también bebiendo de manera rápida para llamar al catinero con el brazo y gritos exagerados.

Odasaku se limitó meramente a sonreír de manera breve. Una noche de copas hablando de problemas existenciales con un extrañamente borracho Osamu. No fue mal cumpleaños después de todo.

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Miró al vaso a su lado, descansando en ese lugar vacío de la barra. Como si fuese un adorno más del establecimiento.
Sonrió de manera ladeada, apoyando su codo en la barra para descansar su mejilla en su mano.

Tomó su propio vaso, ni muy lleno, ni muy vacío. Dejándolo unos segundos en su mano para dejar escapar otra sonrisa.

— Un brindis. —Propuso chocando su propio vaso con el que estaba a su lado. Dejando escapar gotas debido al hielo.— Por otro año en que no estuviste. —Terminó, bebiendo de manera apresurada el contenido que quedaba en el objeto.

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Corto pero ya qué¿? :v es lo que pensé.
Feliz cumpleaños a mi hermoso Oda! :'( cuya herida nunca cierra. Lo subo atrasado porque, bueno, recién tengo Internet.